Kering (Gucci) hunde ventas un -15 por ciento afectada por una desaceleración “mayor de lo esperado” del lujo
cargando...
Madrid – La multinacional francesa del lujo el grupo multinacional Kering, propietario de casas de moda de la talla de Gucci, Balenciaga o Yves Saint Laurent, ha presentado finalmente sus cuentas de resultados al cierre del tercer trimestre de su actual año fiscal de 2024. Periodo finalizado a fecha del pasado 30 de septiembre, que la compañía completó con una caída de ventas del -15 por ciento, resultado de una desaceleración de sus operaciones mayor de la esperada, y desde la que estiman llegar a hundir su beneficio en el rango de un -50 por ciento, para todo el conjunto del ejercicio.
Entrando en mayores detalles, una vez cerradas las operaciones de la Bolsa de París de este miércoles, 23 de octubre, una medida que suele tomarse para tratar de blindar una brusca sacudida del valor de las acciones ante unos resultados estimados como perjudiciales para la compañía en cuestión, desde Kering informaban del rendimiento de facturación experimentado por el conjunto de la compañía durante el tercer trimestre de su actual año fiscal de 2024. Trimestre que la compañía francesa cerró registrando unas ventas totales por valor de 3 786 millones de euros. Una cantidad que supone una caída de un -15 por ciento frente a los 4 464 millones facturados durante el mismo periodo de hace un año; así como de un -2,53 por ciento con respecto a los 3 884,6 millones de euros facturados durante el tercer trimestre de 2019, el último ejercicio como ya sabemos en completarse al margen de los efectos de la pandemia.
A la espera de conocer cómo esta caída de la facturación terminará afectando a la compañía en términos de rentabilidad, después de que hundiera su beneficio neto un -49 por ciento al cierre del primer semestre del año, poniendo en contexto este desempeño, Kering abrió el ejercicio con unas ventas durante el primer trimestre por valor de 4 504 millones de euros (-11,28 por ciento frente a los resultados de hace un año). Unos ingresos que se han venido desde entonces terminado de completar con los registrados durante el segundo trimestre, por valor de 4 514 millones de euros (-10,75 por ciento); y durante ya este tercer trimestre, por valor de 3 786 millones de euros (-15 por ciento). Un periodo que la multinacional francesa ha llegado a cerrar así con su nivel más bajo de facturación en un trimestre de lo que llevamos de ejercicio, y con la tasa de decrecimiento más alta con respecto a los resultados del año anterior.
A la vista de un desempeño claramente negativo, “con disciplina y determinación, estamos llevando a cabo una honda transformación de gran alcance del Grupo, y particularmente de Gucci, en un momento en el que todo el sector del lujo se enfrente a unas condiciones desfavorables en los mercados”, ha salido a justificar François-Henri Pinault, presidente y director ejecutivo de Kering, a través de unas declaraciones compartidas desde su misma dirección. Un contexto este que “afecta gravemente a nuestro rendimiento a corto plazo”, y frente al que “nuestra prioridad absoluta pasa por crear las condiciones para volver a un crecimiento sólido y sostenible”. Una meta hacia la que se están redirigiendo todos los esfuerzos de los equipos de la multinacional, “al tiempo que reforzamos aún más el control de nuestros costes y el estudio de nuestras inversiones”, trataba de tranquilizar Pinault a los accionistas de Kering; hacia los que también señalaba de manera principal cómo “contamos con la estrategia, la organización y los talentos adecuados para alcanzar estos objetivos”.
Con Gucci contrayendo ventas un -26 por ciento
Entrando a analizar en mayor detalle el comportamiento experimentado por Kering a lo largo de este tercer trimestre de ejercicio, por casas de moda y canales, Gucci se mantuvo como la principal fuente de ingresos de la compañía, con unas ventas por valor de 1 641 millones de euros (-26 por ciento). Una facturación esta que se vio afectada, pormenorizan desde la multinacional francesa del lujo, por un canal minorista en el que las ventas retrocedieron en un rango de un -25 por ciento, en términos comparables, afectadas particularmente por la caída de la facturación en la región de Asia-Pacífico; así como por la contracción del -38 por ciento registrada en el canal mayorista, se justifica que en respuesta a la estrategia dirigida a controla la exposición de la casa dentro del canal multimarca.
Como segunda principal firma en cartera, Yves Saint Laurent recogió ventas por 670 millones de euros (-12,76 por ciento); afectada en su caso por una caída en el canal minorista de un -12 por ciento, y en el mayorista del -20 por ciento. Mientras que como caso singular en el desempeño de este tercer trimestre, Bottega Veneta, la tercera mayor casa en cartera de Kering por volumen de negocio, registró un alza de su facturación, hasta los 397 millones de euros (+4,2 por ciento); unos resultados estimulados por las ventas en el canal minorista, con un aumento del +9 por ciento impulsado por las operaciones en América del Norte y en Europa Occidental, que sirvieron para compensar la caída del -10 por ciento registrada en el canal mayorista.
Completando estos indicadores, la suma del resto de casas “menores” en cartera de Kering, un portafolio en el que se incluyen firmas de moda como Balenciaga, Alexander McQueen y Brioni y de joyería como Boucheron o Pomellato, registraron una caída de facturación, hasta los 686 millones de euros (-14,78 por ciento). Mientras que las operaciones de la división “Kering Eyewear and Corporate”, que incluye las operaciones de los segmentos de óptica y de belleza de “Kering Beauté”, experimentó en contra un aumento de sus ingresos, hasta los 440 millones de euros (+32 por ciento).
Caída prevista del -47 por ciento del beneficio operativo recurrente anual
A la vista de esta serie de rendimientos, y que desde la dirección de la multinacional francesa han reconocido que son reflejo de una desaceleración de la demanda de artículos de lujo que ha sido mayor de la esperada durante este último tercer trimestre, como previsión, desde Kering advierten que estiman una caída, hasta unos 2 500 millones de euros, de su beneficio operativo recurrente anual. Una cifra que, de darse finalmente, supondrá una contracción de un -47 por ciento frente al beneficio operativo recurrente por 4 746 millones de euros firmado al cierre de 2023, un impacto que es de esperar que termine por afectar en una intensidad aproximada sobre el beneficio neto anual de Kering.
“Teniendo en cuenta las grandes incertidumbres que probablemente afectarán a la demanda de los consumidores de lujo en los próximos meses, y tras la desaceleración mayor de lo esperado en el tercer trimestre del año, el resultado operativo recurrente de Kering en 2024 podría ascender a aproximadamente unos 2 500 millones de euros”, advierten desde la dirección de la multinacional francesa. Ante este contexto, concretaban, en mitad de un “entorno de incertidumbre económica y geopolítica continua, Kering seguirá ejecutando su estrategia y visión, en pos de dos ambiciones clave: mantener una trayectoria de crecimiento rentable a largo plazo, y confirmar su estatus como uno de los grupos más influyentes en la industria del lujo”. Objetivos ambos para los que se seguirá implementando una hoja de ruta desde la que el grupo continuará priorizando “los gastos e iniciativas que apoyan el desarrollo y crecimiento a largo plazo de sus Casas”; pero mientras se “trabaja con determinación en optimizar su base de costos, la eficiencia de su organización y el retorno de sus inversiones”.
- Kering registró una caída del 15 por ciento en las ventas durante el tercer trimestre de 2024, con Gucci experimentando una disminución del 26 por ciento.
- El beneficio operativo recurrente anual se prevé que disminuya un 47 por ciento, hasta aproximadamente 2 500 millones de euros.
- Kering atribuye la disminución a una desaceleración de la demanda de artículos de lujo y está implementando una transformación para lograr un crecimiento sostenible.