Kering lanza un nuevo “profit warning” tras hundir beneficios un -50 por ciento
cargando...
Madrid – Desde Kering, multinacional francesa especializada en el sector del lujo y compañía matriz de casas de moda de la talla de Gucci, Yves Saint Laurent o Balenciaga, han presentado sus cuentas al cierre del primer semestre de 2024. Periodo de seis meses finalizado a fecha del pasado 30 de junio, que han completado en línea con sus, malas, previsiones para el arranque de este nuevo año fiscal, para el que han lanzado además un nuevo “profit warning” alertando sobre una posible caída de su beneficio operativo recurrente de hasta un -30 por ciento durante el segundo semestre del año.
De este modo, desde las cuentas presentadas por la multinacional francesa del lujo, desde Kering han informado de un primer semestre del año que la compañía ha completado registrando unos ingresos totales por valor de 9 018 millones de euros. Una cantidad que supone una caída de un -11 por ciento frente a los 10 135 millones de euros facturados durante la primera mitad del pasado año, y que deja a la dueña de Gucci aún así creciendo un +18 por ciento sobre los 7 638,4 millones de euros facturados durante el mismo periodo de 2019; el último año en completarse al margen de los efectos de la pandemia por coronavirus. Un desempeño que ha venido apuntalado de la mano de un primer trimestre durante el que las ventas cayeron frente a los resultados de hace un año hasta los 4 504 millones de euros (-11,28 por ciento), y al que ha seguido un segundo trimestre en el que lo hicieron hasta los 4 514 millones de euros (-10,75 por ciento).
En términos ya de rentabilidad, desde Kering han dado cuenta de un beneficio neto consolidado que ha terminado por situarse en los 940 millones de euros. Una cifra que por su parte supone un hundimiento de un -49 por ciento frente a los 1 846 millones de euros de beneficio recogidos durante el primer semestre de hace un año; así como de un -39,59 por ciento con respecto a los 1 556,1 millones de euros de beneficio neto generados durante el mismo periodo de 2019. Un rendimiento claramente deficiente, que desde la dirección de la compañía francesa han justificado señalando a las inversiones extraordinarias que estarían llevando a cabo con el objetivo de que sus casas sigan resultando “deseables” a ojos de los consumidores; inversiones que se están llevando a cabo, sostienen, al tiempo que siguen manteniendo un firme control sobre sus gastos operativos, y que han terminado afectando a su rentabilidad en unos términos superiores a sobre los que ya advirtieron a los mercados el pasado mes de abril. Fecha para la que lanzaron un último, hasta ahora, “profit warning”, desde el que alertaban de una previsible caída de sus beneficios de entre un -40 a un -45 por ciento para el primer semestre de 2024; anuncio que realizaron apenas un mes después de advertir sobre un primer trimestre en el que las ventas caerían hasta alrededor de un -10 por ciento, alimentadas por una contracción del negocio de Gucci de un -20 por ciento.
“En mitad de un entorno especialmente desafiante, que añade presión sobre nuestros ingresos y sobre nuestra rentabilidad, estamos trabajando arduamente para crear las condiciones necesarias para volver al crecimiento”, no ha dudado en querer salir a defender François-Henri Pinault, presidente y director ejecutivo de Kering, a lo largo de unas declaraciones difundidas desde la dirección de la misma multinacional francesa del lujo. En medio de ese panorama, añade, “nuestras casas siguen con sus inversiones para enriquecer su oferta, intensificar el impacto de sus comunicaciones, y reforzar la exclusividad de su distribución”, para lo que, destaca, “nos aseguramos de que cada una de estas inversiones cuente con la propiedad de poder crear valor a largo plazo”. Concluyendo sus declaraciones advirtiendo de que “si bien el contexto actual podría afectar el ritmo de nuestra ejecución” dentro del mercado del lujo, “nuestra determinación y confianza” para seguir liderando el sector “son más fuertes que nunca”.
Con Gucci hundiendo su facturación un -20 por ciento
Analizando, brevemente, el desempeño registrado por Kering a lo largo de este primer semestre del año, por líneas de negocio la casa Gucci continuó posicionándose como su principal fuente de ingresos, con unas ventas totales que no obstante terminaron por hundirse hasta los 4 085 millones de euros (-20,33 por ciento), siguiendo con la tendencia ya experimentada al cierre del primer trimestre del ejercicio. Un desempeño en negativo que igualmente experimentó la otra principal casas de moda del grupo, una Yves Saint Laurent cuya facturación se redujo hasta los 1 441 millones de euros (-8,56 por ciento); mientras que en Bottega Veneta lograron sortear las tendencias negativas que dominan actualmente el mercado del lujo, para elevar ligeramente su facturación hasta los 836 millones de euros (+0,36 por ciento). Concluyendo ya esta división con la suma del resto de otras casas de moda en cartera de Kering, que en su conjunto redujeron sus ventas hasta los 1 717 millones de euros (-7,48 por ciento); y con una división “Kering Eyewear” y Corporativa, en torno a las que se aglutinan los negocios de óptica y de perfumería del grupo, que siguió manteniéndose al alza con ingresos por 1 067 millones de euros (+22,78 por ciento).
En cuanto a su rendimiento por canales de distribución, para su cómputo durante únicamente el segundo trimestre del ejercicio, las ventas en el canal minorista operado directamente por Kering llegaron a contraerse hasta un -12 por ciento, en términos comparables, afectadas por un menor tráfico de clientes en las tiendas. Mientras que en el canal mayorista, e igualmente para lo que afecta al segundo trimestre, los ingresos se contrajeron un -6 por ciento, en línea con los objetivos de Kering de seguir reduciendo y controlando su exposición a dicho canal.
Caída de beneficios de un -30 por ciento, para el segundo semestre de 2024
De cara a lo que resta de ejercicio, desde Kering defienden su política de inversiones estratégicas, y han anunciado que seguirán adelante con ella. Decisión que, sumada a las “incertidumbres” que actualmente marcan la evolución de la demanda de los artículos de lujo, advierten que podría terminar por reflejarse en una caída de aproximadamente un -30 por ciento de su beneficio operativo recurrente durante el segundo semestre de 2024.
“En un entorno de continua incertidumbre económica y geopolítica, Kering seguirá ejecutando su estrategia y visión, en pos de dos ambiciones clave: mantener una trayectoria de crecimiento rentable a largo plazo, y consolidar su estatus como uno de los grupos más influyentes de la industria del lujo”, defienden desde la dirección de la multinacional francesa. Desde esa posición, y “considerando las incertidumbres que pesan sobre la evolución de la demanda de los consumidores de lujo de cara a los próximos meses”, siguiendo con “la desaceleración registrada en el primer semestre de 2024”, la compañía prevé que “los ingresos operativos recurrentes de Kering durante el segundo semestre de 2024 podrían llegar a reducirse en aproximadamente un -30 por ciento en comparación con el segundo semestre de 2023”.
- Kering se hunde en bolsa tras lanzar un segundo “profit warning” y advertir sobre una caída del -45 por ciento de los beneficios.
- Kering lanza un “profit warning” y advierte de una caída en Gucci del -20 por ciento de las ventas.
- LVMH vuelve a contraer ventas y hunde sus beneficios un -15 por ciento.