Loewe vuelve a poner “de moda” Baqueira por Navidad con una pop-up
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Madrid – Destino invernal por antonomasia de la “jet set” nacional durante los años dorados del reinado de Juan Carlos I, Baqueira Beret ha vivido a lo largo de estas últimas décadas una etapa de menor brillo y esplendor, en lo que refiere a su perfil como exclusivo destino turístico de escala internacional. Una situación que se ha lanzado a tratar de corregir la exclusiva firma de moda española Loewe, con la apertura de una pop-up de Navidad.
Para tratar de ponernos primeramente en contexto, nos retrotraeremos hasta comienzos de la década de los 70. Unos años durante los que, todavía en vida de Franco, los por entonces Príncipes de España, en un viaje privado por el Valle de Arán, tuvieron ocasión por primera vez de deslizarse por las pistas de esquí de los Pirineos españoles. Una relación la de los miembros de la familia real con la zona que se estrecharía ya en años de la transición, momento en el que, desde una política activa puesta en marcha por el anterior jefe del estado, Juan Carlos I trató de manera vehemente y proactiva de hacer y de promocionar Baqueira como un gran destino turístico para la práctica de los deportes de invierno entre la “jet set” nacional e internacional. Una ambición que terminó haciendo de sus pistas de esquí el parque de recreo de los miembros de la familia real española durante el reinado de Juan Carlos I con la llegada especialmente de cada nueva Navidad, en un disfrute en el que se fueron viendo arropados por lo más granado de la sociedad, entre miembros de la sociedad civil y representantes políticos. Una destacada presencia de algunas de las figuras más influyentes de la sociedad de la época, con la que cabe reconocer que Juan Carlos I supo aportar a la comarca del Valle de Arán una aureola de exclusividad y distinción que, gracias a su asidua presencia y a la de los miembros de su familia, hicieron de Baqueira un destino que nada tenía que envidiar a otros tan reclamados entre la “jet set” internacional como Saint Moritz, Verbier o Gstaad.
Convertida de este modo, y bajo su mano, en la contraparte a lo que suponía Mallorca durante el periodo estival, tanto la estrecha relación con la familia real como ese halo de exclusividad, que persiste, aunque de un modo mucho más “discreto” y “silencioso” —dado que los encantos de los Pirineos catalanes siguen estando ahí los visite quien los visite—, se diluían al mismo ritmo que se intensificaban y hacían públicos los problemas familiares en el seno de la familia de Juan Carlos I. Familia cuyos miembros, sobre todo una vez ya estallado el caso Nóos, y todavía más después de que se produjera la abdicación de Juan Carlos I en favor del actual jefe del estado, Felipe VI, en junio de 2024, han venido haciéndose cada vez menos visibles en las pistas del Valle de Arán, prefiriendo de manera más notoria los miembros de la actual familia real, como así ha trascendido a lo largo de estos últimos años, disfrutar de manera más íntima, y anónima, de las pistas de los Alpes italianos y austríacos. Lo que no quita para que, de manera eso sí más puntual, Felipe VI, de manera mayoritariamente en solitario y junto a un reducido grupo de amigos, se desplace hasta Baqueira en distintos momentos para disfrutar de sus pistas de esquí, en la medida que su agenda se lo permite, haciendo uso en esas visitas de la vivienda con la que la familia real cuenta a su disposición en la estación de esquí desde los primeros años del reinado de Juan Carlos I. Una vivienda, de propiedad privada, cedida para su uso a los miembros de la familia real, ubicada en la exclusiva urbanización La Pleta, de tres plantas y unos 200 metros cuadrados, que era especialmente frecuentada por el matrimonio Borbón-Urdangarin, hasta el estallido del caso Nóos. Causa que, entre sus efectos colaterales, además de dañar la imagen pública de los miembros de la familia de Juan Carlos I, hizo que el distanciamiento entre sus mismo miembros fomentase la ausencia y toma de distancia de los miembros de la nueva familia real, de las que habían venido siendo las tradiciones y principales plazas fuertes de la familia real durante el reinado de Juan Carlos I. Lo que se ha terminado de traducir en una marca ausencia de la actual familia de Felipe VI de las pistas de Baqueira, que ha dejado de acoger al jefe del estado y a su familia, con lo que ello suponía de promoción, durante las fiestas de Navidad, de manera contraria a lo que habían sido las tradiciones durante el reinado de Juan Carlos I, cuando lo habitual era que la familia real pasase en Baqueira las fiestas, desde pasado el día de Navidad y hasta después de la fiesta del Día de Reyes.
Con una pop-up de Loewe, en Pompeu
Desde este contexto y este distanciamiento de la familia de Felipe VI de las tradiciones del reinado de Juan Carlos I, frente al que Palma de Mallorca ha sabido defender mejor sus posiciones que Baqueira, cobra un especial interés la nueva activación que se ha decidido a llevar a cabo Loewe, que en 1905 ya fue designada como Proveedor de la Casa Real por el entonces rey Alfonso XIII, en Baqueira. Una estación en la que se ha decidido a abrir una pop-up, de la mano de las exclusiva cadena española de tiendas de moda y complementos Pompeu, volviendo con ello a poner de moda la estación como un destino turístico por Navidad, al tiempo que reaviva su posicionamiento como un destino a tener en cuenta entre los miembros de la “jet set” internacional.
Ubicada en el número 9 de la avenida Castiero de Viella, la capital del Valle de Arán, una de las hasta cuatro “concept stores” con las que cuenta Pompeu repartidas por todo el territorio nacional, en Viella, en la propia Baqueira, en Lérida y Málaga, en su interior Loewe se ha encargado de instalar una activación pop-up de Navidad, con una cuidada selección de productos para esta época del año y para regalar. Una serie de artículos entre los que se incluyen piezas de su precolección para Primavera/Verano 2025, así como de la nueva colección cápsula colaborativa que han diseñado para la casa desde el estudio de cerámica japonés Suna Fujita, fundado en el año 2005 por el matrimonio de ceramistas formado por Shohei Fujita y Chisato Yamano. Creativos responsables de idear una serie de evocadores motivos de temática infantil, onírica y marina, cuya estética bien recuerda a la de unas ilustraciones propias de la obra de “El principito”, y que encontremos así, ya no solamente recubriendo y adorando las piezas de esa cápsula, sino también el exterior de esta tienda de Pompeu de Viella, de cuyos escaparates, como parte también de esta colaboración, se ha hecho cargo y se ha adueñado Loewe.
Sobre estos mismos, para su diseño, “los escaparates están inspirados en el último capítulo de la colaboración de Loewe con el dúo de ceramistas de Kioto, Suna Fujita”, una pareja que “ha creado una nueva serie de ilustraciones y cerámicas originales, que viajan a través de paisajes oníricos infantiles” de la mano de “criaturas juguetonas” procedentes de “desde las profundidades del océano”, hasta de “los verdes prados y los confines del espacio exterior”, y que “se convierten en personajes protagonistas de bolsos, prêt-à-porter y accesorios”. Productos que encontraremos como la base de esta “pop-up festiva centrada en la colección navideña de Loewe” que se ha instalado en Pompeu, poniendo al alcance de todos los visitantes que se acerque hasta ella una selección de artículos que “incluye la precolección SS25” y la “colaboración especial con Suna Fujita”. Todo ello, al tiempo que tienen la ocasión de admirar unos escaparates decorados “con los alegres y mágicos detalles e ilustraciones del dúo” de ceramistas, “transformados en un brillante paisaje marino” por su gracia, con “una serie de personajes que nadan en un entorno marino resplandeciente, acompañados de destellos de peces, ballenas, submarinos y un gran pulpo entre las rocas”, mientras “algas y conchas cubren el fondo del escaparate, que se ilumina cuidadosamente con focos blancos y azules para enriquecer su brillo”. Siendo estas unas “criaturas marinas y los nadadores” que, desde estos escaparates, y como base del modelo que la firma ha introducido también en sus principales puntos de venta por Navidad, señalan desde Loewe a través de una nota, “interactúan con piezas clave de la colección navideña 2024 de Loewe”.