Balenciaga se arma para su regreso en 2025 al segmento de la belleza
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Madrid – La histórica casa de modas francesa, de ascendencia y herencia genuinamente españolas, Balenciaga, se prepara para protagonizar su fulgurante, y se espera que más que sonado, regreso al segmento de la belleza, a partir de este mismo ejercicio de 2025. Año para el que desde la “maison” estarían preparando el relanzamiento de su célebre fragancia “Le Dix”, el primer perfume creado por la casa de modas, a modo de una acción tan simbólica como estratégica que llegaría tanto para marcar su regreso al ámbito de la perfumería, como su pronto desembarco en el de la cosmética y del maquillaje.
Para ponernos primeramente en situación, pero sin la necesidad de tener que retrotraernos hasta la apasionante historia que se oculta tras la fundación de la casa de modas por el genial maestro español de la Alta Costura, Cristóbal Balenciaga, en San Sebastián en el año 1917, de manera mucho más reciente, era a comienzos del pasado mes de febrero de 2023 cuando desde el grupo multinacional francés especializado en la industria del lujo Kering, compañía propietaria de Balenciaga desde su adquisición en el año 2001 de manos de la compañía francesa Jacques Bogart, precisamente especializada en perfumería y cosmética, anunciaban la creación de una nueva división “Kering Beauté”. Una nueva rama de su modelo operativo y de negocio, desde la que iban a tratar justamente de ampliar y diversificar sus operaciones, haciendo escalar las de sus diferentes casas de moda y marcas en cartera, hacia el segmento de la belleza, favoreciendo su desarrollo e incursión en los ámbitos tanto de la perfumería como del maquillaje. Unas tareas que desde ese mismo momento confiaron y pusieron en manos de Raffaella Cornaggia, desde entonces y hasta el día de hoy directora general de una Kering Beauté desde la que, siguiendo con ese propósito inicial que se marcaron desde Kering para su constitución y puesta en marcha, ya han logrado firmar, a lo largo de este mismo año de 2024 que nos disponemos ya a despedir, proyectos como el de completar el regreso de Bottega Veneta al mundo de la belleza, y en concreto al de la perfumería, con el lanzamiento de una nueva primera colección de fragancias. Un movimiento que se descubría como estratégico, y que se presumía que iba a continuar con el desarrollo de nuevas líneas de productos de belleza, desde una estrategia por la diversificación que no obstante se habría terminado de dejar en pausa por completo ante los crecientes rumores que ya señalaban a la salida de Matthieu Blazy y a su próximo fichaje como nuevo director creativo de Chanel, y que en cualquier caso se entrarán a retomar ya con Louise Trotter como nueva directora creativa.
Con el foco así pues puesto entonces en tratar de destapar todo el potencial que, para dentro del ámbito de la belleza, presentaban las casas de moda Bottega Veneta, Baleciaga y Alexander McQueen, y las de joyería Pomellato y Qeelin, “la creación de Kering Beauté permitirá al Grupo apoyar a estas marcas en el desarrollo de la categoría de Belleza, que es una extensión natural de su universo”, explicaban para entonces desde la compañía francesa. A este mismo respecto, detallaban, “Kering confía” en que el desarrollo de esta nueva rama de su modelo de negocio “puede crear valor para el Grupo y para sus casas”, sobre la base eso sí de “cada una de sus únicas identidades” propias, y además de una “forma totalmente coherente con sus estrategias y posicionamiento en el mercado”.
Regreso al terreno de la perfumería, para 2025
Desde esas directrices generales que descubría y presentaba la compañía a comienzos de 2023, mientras dedicaban buena parte de sus esfuerzos de sus primeros años a afianzar el relanzamiento de Bottega Veneta tras la salida de Daniel Lee y la entrada de Blazy en 2021 como nuevo director creativo, con su regreso al ámbito de la perfumería en este 2024, de manera paralela desde Kering Beauté han venido trabajando en replicar una operación similar sobre otra de sus firmas de moda más de moda, la Balenciaga de Demna. Una casa que, con un notable pasado ligado al ámbito de la perfumería, se preparan para relanzarla en este mismo segmento, a lo largo de este 2025, y en lo que en su caso ya se advierte que será nada más que el primer paso para su relanzamiento completo en perfumería, pero además próxima entrada en el segmento del maquillaje.
En ese propósito, desde la dirección de la casa de modas francesa, desde donde justamente se preparan para dar la bienvenida, a partir del próximo 2 de enero de 2025, a Gianfranco Gianangeli como nuevo CEO, en sustitución de un Cédric Charbit que pasará en su caso a ocupar el cargo como nuevo CEO de la casa Saint Laurent, también del Grupo Kering, han venido armándose durante estos últimos meses para su próximo regresos al campo de la belleza. Un objetivo para el cual, y según se recogería de la documentación en manos del Institut national de la propriété industrielle de Francia, a la que han accedido desde el medio italiano Mff, habrían diseñado una cuidadosa estrategia que estaría prevista que arrancase, en este 2025, con el relanzamiento de la mítica fragancia “Le Dix” de Balenciaga. El primer perfume creado por Cristóbal Balenciaga, y lanzado por su casa de modas, en un homenaje y referencia a la histórica sede de la firma en el número 10 de la la avenida George V de París. Un perfume que veía la luz en el año 1947, en clara respuesta al sonado éxito que estaba logrando cosechar su por entonces coetánea Coco Chanel con su ya mítico Chanel Nº5, lanzando en 1921, como primer paso de una estrategia de diversificación y expansión de su universo creativo que Balenciaga continuaría con el lanzamiento de su segundo perfume “La Fuite des Heures” en 1948, y hasta con un tercero, “Quadrille”, en 1955; el último del que se tiene constancia que participase Balenciaga antes de decidirse a echar el cierre a su casa de modas en mayo del 68.
Tras el cierre de la “maison”, fue precisamente esa conexión entre la casa de modas y el mundo de la perfumería el que incrementó el interés de la francesa Jacques Bogart, hoy simplemente Bogart, por adquirir todos los derechos sobre la marca Balenciaga. Adquisición que llevó a cabo comprando de manos de los herederos del maestro de la Alta Costura todos los derechos, para moda y perfumería, de la marca Balenciaga en 1986, inaugurando para entonces un nuevo capítulo en el seno de la histórica casa que se caracterizó por su comercialización y por los intentos de rentabilizar el nombre del español, hasta un extremo que terminó por diluir en exceso su otrora fulgurante estela como referente de la Alta Costura. Un capítulo que llegó así pues marcado por el lanzamiento de toda clase de productos a un precio y una calidad en cuanto a diseño y originalidad cada vez menor, como parte de una estrategia focalizada de manera preferente al desarrollo de su línea de perfumería, similar a la que hoy viene a desarrollar Puig con muchas de las grandes casas de moda que mantiene en cartera, como Paco Rabanne, Nina Ricci o Jean Paul Gaultier. Una pobre estrategia, sobre la que trataron de enmendarse desde Bogart fichando a un por entonces desconocido Nicolas Ghesquière como director creativo de Balenciaga en 1997. Un nombramiento que no solo sirvió para revitalizar el aura de la por entonces desprestigiada casa de modas de ascendencia española, tanto finalmente en moda como en perfumería, sino también para terminar de elevar su valor, favoreciendo así su venta en mejores condiciones a Kering, por entonces grupo Pinault-Printemps-Redoute, en 2001. Una adquisición que de manera sorpresiva no afectó a la dirección creativa de la casa, que continuó, en un síntoma del buen trabajo que estaba realizando por entonces, bajo la batuta de Nicolas Ghesquière, hasta su salida de la firma, forzada por su misma dirección a causa de discrepancias internas, en noviembre de 2012, justamente el año en el que veía la luz “Florabotanica”, el perfume ideado por Ghesquière para Balenciaga, y que estaba llamado a imprimir un punto de inflexión en el desarrollo de la marca dentro del ámbito de la perfumería.
Desde entonces, desde la Balenciaga de Kering, y al tiempo que iban dando paso a nuevos creativos al frente de su dirección creativa que terminaban pasando por la casa sin aportar mayor gloria a sus trayectorias ni a la historia de la casa, se fueron lanzando con una igual fortuna distintas fragancias, en virtud del acuerdo de licencia establecido en octubre de 2008 con la multinacional estadounidense de la belleza Coty. Un acuerdo que se estima que venció en 2021, y que pasó a no renovarse tras la decisión de Kering de tomar el control sobre el desarrollo, la distribución y la comercialización de las líneas de belleza, perfumería y maquillaje, de sus diferentes casas en cartera, en lo que terminó derivando, primero, en la descontinuación de las fragancias que hasta entonces venían comercializándose de la casa Balenciaga, y segundo, en la constitución en febrero de 2023 de esta nueva división “Kering Beauté”. Departamento de Kering desde el que así pues se van a encargar ahora de devolver a Balenciaga al ámbito de la perfumería, con el relanzamiento de su mítica “Le Dix”, y como parte de una estrategia de marca de la que también a partir de ahora va a entrar a formar parte Francesca Bellettini, directora general adjunta de Kering a cargo del Desarrollo de Marca, en un cargo que ostenta desde septiembre de 2023, pero a partir del próximo 2 de enero de 2025 con dedicación exclusiva.
Más allá de “Le Dix”: nuevos registros para perfumería y para maquillaje
Por si el regreso de Balenciaga al universo de la perfumería supiera a poco, tras el relanzamiento de “Le Dix”, para el que desde Balenciaga y Kering ya se han preparado registrando según esas informaciones el nombre como marca comercial para las categorías de perfumes, maquillaje y velas, a fecha del pasado 13 de noviembre, la casa francesa igualmente se habría ya armado para, no solamente su regreso al universo de la belleza con el relanzamiento de su fragancia más histórica, sino también para incursionar por primera vez en el campo de la cosmética y del maquillaje.
En esa intención, según también aseguran haber constatado en documentos oficiales del organismo francés desde el medio italiano Mff, el pasado 18 de septiembre desde Kering y Balenciaga habrían pasado igualmente a registrar el emblema en forma de la doble “B” de Balenciaga, ya no solamente para su uso en complementos y prendas de indumentaria, sino también en productos de perfumería y de maquillaje. Un registro que es el que lleva a entender mejor, y desde una visión más general, cuáles estarían siendo las intenciones de Kering para la hora de arrancar con la estrategia de diversificación de las operaciones de Balenciaga, que sigue incluyéndose en sus balances desde un capítulo de “cajón de sastre” como una más de sus “otras casas de moda”, a diferencia de las operaciones de sus principales casas de moda Gucci, Yves Saint Laurent y Bottega Veneta, con el fin de destapar todo su potencial en el campo de la belleza. Un segmento en el que volverán a operar, siguiendo con lo que adelantaba el pasado mes de noviembre la misma Raffaella Cornaggia, de Kering Beauté, en este 2025, ahora ya se intuye que mediante el relanzamiento de “Le Dix”, una fragancia que volvería al mercado como ya no solo una nueva versión del perfume de 1947, sino dando pie a una nueva línea de fragancias inspirada en esa misma composición olfativa. Un lanzamiento al que le seguiría la incursión de Balenciaga, por primera vez, en el campo del maquillaje y de la cosmética, en este caso en un supuesto que todavía se estaría estudiando por la dirección de la firma, y para el que no se manejan oficialmente fechas estimadas, por lo que en cualquier caso bien se llegaría a situar esta entrada más allá del ejercicio de 2025.
- Balenciaga regresará al sector de la belleza en 2025, comenzando todo apunta que con el relanzamiento de su perfume "Le Dix".
- Este regreso formará parte de la estrategia de la nueva división "Kering Beauté", desde la que buscan expandir las operaciones de varias marcas de Kering en el ámbito de la belleza.
- En base a los registros que ya se habrían realizado, el plan incluye no solo el regreso de Balenciaga a la perfumería con nuevas fragancias en 2025, sino también su incursión en el mercado del maquillaje y la cosmética.