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UGT advierte a empresas y trabajadores ante la “inminente” entrada en vigor del nuevo Convenio del sector textil

Madrid – Tras más de un año desde que se abrieran las negociaciones para la redacción y el acuerdo del nuevo Convenio Colectivo para la Industria del Textil y de la Confección, el pasado mes de abril patronales empresariales y sindicatos terminaron por ratificar el nuevo texto. Un pacto laboral que no obstante se ha mantenido desde entonces, y por va ya más de medio año, sin entrar en vigor, a expensas de finalmente terminar de ser publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Un retraso que está apunto de solventarse.

Como resultado de esta última demora, se extiende ya por más de 1 año y nueve meses el tiempo en el que los cerca de 50 000 trabajadores de la industria textil y de la confección en España se han mantenido con los salarios congelados. Y eso a pesar de que las duras negociaciones que, con amagos de huelga incluidos, llegaron a mantener las organizaciones empresariales con los representantes sindicales de los trabajadores del sector, a partir de la constitución de la mesa de negociación del convenido a fecha del pasado 23 de enero de 2024, finalmente fructificaron; primero, en la firma de un preacuerdo con el que se frenó el último intento de huelga sectorial, y segundo, en la ya ratificación del nuevo Convenio Colectivo, a fecha del pasado 31 de marzo.

A partir de esa fecha, se confiaba que la entrada en vigor del nuevo convenio no terminase de suponer un nuevo impedimento a la pronta revalorización de los salarios de los trabajadores de la industria española del textil y de la confección. Unas estimaciones que finalmente no han podido verse más que superadas, como resultado, apuntan desde la UGT, del proceso de subsanación del que ha terminado de ser objeto el texto, por parte del Registro y Depósito de Convenios Colectivos (REGCON). Un procedimiento que ha terminado por dilatar en varios meses su entrada en vigor, con lo que ello, primero, ha supuesto para unos trabajadores que se han mantenido con los salarios congelados; y segundo, que va a suponer ahora para las empresas del sector textil, que deberán empezar, una vez que se publique finalmente el texto en el BOE, a abonar todos los incrementos salariales a los trabajadores que van a ser de aplicación en virtud del nuevo convenio, que cuenta con una retroactividad a fecha del 1 de enero de 2024. En total, 1 año y nueve meses, 22 meses en total incluyendo octubre, de incrementos salariales que van a tener ahora que desembolsar las empresas a los trabajadores.

“El texto del nuevo convenio ha sido objeto de diversas subsanaciones por parte del REGCON que han afectado, incluso, a artículos que llevaban años sin modificarse y que nunca habían sido objeto de corrección, lo que ha retrasado en varios meses su entrada en vigor”, señalan desde la UGT. “Este retraso ha supuesto que las aproximadamente 50 000 personas con que cuenta el sector en España, hayan mantenido congelado su salario a lo largo de estos meses, dado que la mayoría de las empresas no aplican el incremento salarial hasta que no se procede a la publicación oficial del convenio” en el BOE. Una circunstancia que, en línea con lo ya señalado, ha provocado un aumento considerable de “la cantidad de atrasos que las empresas van a tener que desembolsar a sus trabajadores y trabajadoras a partir del día de su publicación”, y que a su vez ha causado “un evidente perjuicio a las plantillas”.

Un retraso que afecta a empresas y trabajadores

Según adelantan desde la UGT, las subsanaciones del texto fueron validadas por el REGON el pasado 26 de septiembre, procediéndose entonces a derivar el Convenio para su publicación en el BOE. Un procedimiento “rápido” que finalmente también se está demorando más de lo que sería normal, pero que en cualquier caso se espera que se termine de completar de manera “inminente”, remarcan desde la organización sindical.

Es justamente ante esa cercana entrada en vigor del nuevo convenido el que desde la UGT han querido poner sobre aviso, primero a las empresas, para que se preparen a empezar a abonar los aumentos salariales sobre los sueldos, según lo pactado con ese efecto retroactivo a fecha del 1 de enero de 2024; y después naturalmente a los trabajadores. Unos empleados a quienes recomiendan desde la UGT que soliciten de manera detallada el pago de los atrasos de los ejercicios de 2024 y de 2025, puesto que es este año en el que además ha pasado a entrar en vigor el nuevo sistema de retribución salarial por categorías del sector.

De este modo el sindicato “recomienda a las plantillas que, cuando las empresas empiecen a desembolsar los atrasos, soliciten de forma desglosada los correspondientes a los años 2024 y 2025, dado que en este 2025 ha comenzado aplicarse el nuevo sistema de remuneración que tanto ha costado conseguir”. “Hay que recordar que la firma del nuevo convenio fue posible tras más de un año de intensas negociaciones y después de conseguir desbloquear a mediados de enero algunos de los puntos que desde UGT FICA consideramos de mayor importancia para las personas trabajadoras del sector”, defienden desde el sindicato; puntos ya incorporados al nuevo convenio, “como son los incrementos salariales, la unificación progresiva de los actuales 10 anexos en uno solo”, o “el encuadramiento adecuado de las personas trabajadoras”.

Con subidas anuales mínimas del +3,3 por ciento, para 2024, 2025 y 2026

Con una vigencia de tres años, para los ejercicios de 2024, 2025 y 2026, haciendo una breve recapitulación sobre el valor de los salarios que establece el nuevo convenido, para su primer año de vigencia —íntegramente a aplicar con carácter retroactivo—, el pacto de regulación salarial establece que todos los trabajadores recibirán una subida salarial mínima del +3,3 por ciento. Una subida que se mantendrá como una constante para los tres ejercicios, pero que para ya a partir de 2024 además se reforzará con la introducción del concepto de Salario Mínimo Garantizado (SMG), el equivalente al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) más un +2 por ciento. Condicionantes ambos que dejarán a los trabajadores del sector teniendo que haber recibido para ese año un, como mínimo, SMG de 1 156 euros al mes, y 16 193,52 euros al año; además de los pluses por antigüedad y nocturnidad.

Para lo que respecta ya a 2025, para lo que las empresas deberán abonar 10 meses de atrasos, se han fijado para los salarios ese incremento adicional del +3,3 por ciento, con un SMG para el Grupo C (oficialías y similares) de 1 311,04 euros al mes, 18 347,7 euros al año. Un +5 por ciento más que los salarios para los trabajadores del Grupo B (especialistas y similares), que deben recibir un SMG de 1 248,62 euros al mes,17 480,68 euros al año. Un salario mínimo un +4,5 por ciento por encima de los trabajadores del Grupo A (auxiliares y similares), para los que se fija para este año un SMG de 1 194,85 euros al mes, 16 727,9 euros al año. Cabe también señalar la introducción este año del nuevo concepto “Salario Referente del Grupo Profesional” (SRGP), que establece el nivel objetivo de salario para cada grupo. Un nivel hacia el que se buscará avanzar de manera progresiva, introduciendo una subida del +5,3 por ciento para los niveles salariales más bajos de cada grupo profesional, resultado de sumar un +2 por ciento adicional a esa subida anual del 3,3 por ciento. Como resultado de todas estas mejoras salariales se llegará a unas cantidades a final de año que podrían terminar de incrementarse ligeramente si, una vez cerrado el ejercicio, se acuerda activar la cláusula de revisión salarial ligada al IPC, con un tope adicional sobre la subida pactada de un +1 por ciento.

Finalmente, para 2026, volverán a aumentarse los salarios un +3,3 por ciento. Un incremento que también se llevará a los SMG de las distintas categorías profesionales, y que dejará a los trabajadores del Grupo C con un sueldo mínimo garantizado un +8 por ciento superior a los del Grupo B; y a los del Grupo B con un +4,5 por ciento más de sueldo que los trabajadores del Grupo A. Todo durante un último año de vigencia del nuevo convenio, para el que se mantiene ese incremento del +5,3 por ciento en lugar del +3,3 por ciento para los salarios más bajos de cada grupo; y esa revisión salarial con un máximo de un +1 por ciento para el caso de que la inflación termine por situarse al cierre de 2026 por encima de lo acordado.

En resumen
  • Tras un retraso de más de un año desde que se iniciaran las negociaciones, se espera la pronta publicación en el BOE del nuevo Convenio Colectivo para la Industria Textil y de la Confección
  • El convenio, que afecta a unos 50 000 trabajadores, incluye subidas salariales mínimas del +3,3% anual para 2024, 2025 y 2026, con carácter retroactivo al 1 de enero de 2024.
  • La UGT aconseja a los trabajadores solicitar el pago desglosado de los atrasos de 2024 y 2025 debido a la entrada en vigor del nuevo sistema de retribución salarial por categorías.
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