Inditex avanza hacia un convenio estatal y se sentará a negociar medidas “globales” para su plantilla

En línea con las demandas que durante estos últimos meses les han hecho llegar, entre otros, desde las direcciones de los sindicatos UGT y CCOO, las dos mayores organizaciones sindicales representativas de sus plantillas a nivel nacional, desde Inditex ya han accedido a sentarse para negociar una serie de nuevas medidas globales en materia salarial para los miembros de sus equipos. Unas mejoras que tratarán de implementarse como solución con la que compensar su pérdida de poder adquisitivo, favorecida como consecuencia del aumento generalizado de los precios y de las tensiones inflacionistas que vienen experimentándose durante el último año.

Según a este respecto han entrado a anunciar desde UGT y CCOO, las organizaciones sindicales ya han acordado con la dirección de Inditex abrir la Mesa Estatal para estas negociaciones, el próximo 25 de enero. Fecha para la que de este modo ya está previsto que las partes pasen a sentarse a una misma mesa, desde la que plantearán las distintas medidas y soluciones que contemplan para acordar una mejora salarial y global de las condiciones de trabajo que afectan a todos los empleados de las empresas del grupo, en todos los territorios. Objetivo para el que adelantan las organizaciones sindicales que se tendrá especialmente en cuenta la situación y los niveles salariales que reflejen los distintos convenios colectivos provinciales, el impacto que están teniendo las presiones inflacionistas sobre el poder adquisitivo de las plantillas, y el compromiso adquirido para revisar y mejorar el sistema de comisiones del personal de tienda, con el fin de allanar el camino para establecer un sistema de Incentivos y Comisiones más transparente, universal y equitativo. Una medida que ya le reclamaban desde CCOO a mediados del pasado mes de noviembre, en lo que, como primer paso, terminó reflejándose en ese acuerdo nacional del 18 de noviembre entre CCOO, UGT e Inditex para compensar la pérdida de poder adquisitivo de sus trabajadores, recuperando para 2022 un Incentivo de Dependientas en todo el Grupo, hasta un máximo de 1.000 euros, y revisando al alza el “Plus Sede” del que se benefician sus trabajadores de tienda en la provincia de La Coruña.

Además de lo apuntando, en el marco de ese mismo acuerdo, sobre el que pesan serias dudas desde las que se señala a que solamente fue promovido como respuesta a las movilizaciones que se decidieron a emprender las dependientas y los trabajadores de tienda de Inditex en La Coruña —con los que la multinacional textil ya ha alcanzado la paz— para lograr una mejora de sus condiciones laborales, las tres partes acordaban igualmente abrir, durante 2023, una mesa de negociación en cada una de las distintas cadenas de la compañía. Unas mesas que han terminado tomando forma en la de esta mesa estatal convocada ya para el próximo 25 de enero, desde la que se buscará revisar y mejorar el actual sistema de comisiones del personal de tienda, todo ello con las pretensiones de los sindicatos de que esto llegue a suponer un impacto significativo en los ingresos de la plantilla, y en la construcción de un nuevo sistema de incentivos y comisiones “más transparente, universal y equitativo” para los trabajadores de todas las empresas del Grupo Inditex.

De este modo, esta “Mesa Estatal”, que se abrirá como resultado de los “compromisos adquiridos en el Acuerdo Marco y los recientemente comprometidos en el Acuerdo estatal con CCOO y UGT”, entran a explicar las organizaciones sindicales a través de un comunicado, tendrá como fin “abordar aspectos globales en materia de política salarial en todas las empresas del grupo y en todos los territorios”, constituyendo de facto el principio desde el que asentar las bases de un convenio estatal que, es de presuponer, deberá terminar equiparando las condiciones laborales de todos los empleados del Grupo Inditex en España. Objetivo desde el que además se entrará a responder a las “medidas de alcance y de aplicación a todas las plantillas de todas las marcas” que deben concretarse en el Plan de Igualdad de Inditex que se encuentran negociando con las organizaciones sindicales.

“En definitiva”, apostillan desde CCOO y UGT, “apostamos por arrancar 2023 avanzando, de forma significativa y en el conjunto del Grupo Inditex, en materia salarial”, pero abriéndose a una reformulación de la misma “a nivel global” y “no solo” en materia de incentivos. Unas mejoras salariales de los miembros de la plantilla, que en cualquier caso se deberán abordar junto a “otras medidas”, igualmente de naturaleza global, y que se estudiarán y se acordarán dentro de “los marcos estatales que hemos conseguido abrir”.

Un invierno “caliente” en Inditex

Con un final de año laboralmente más que accidentado dentro de los equipos de Inditex, especialmente, aunque no en exclusiva, en aquellos vinculados a los trabajos en tienda, se presenta realmente como de urgente necesidad el que la compañía logre asentar las bases para una correcta y óptima equiparación salarial y de las condiciones de trabajo dentro de su plantilla. Un objetivo que le lograría reportar no pocas ventajas, y evitarnos episodios como a los que hemos venido asistiendo de dispares convocatorias a la huelga en las distintas regiones del país. Unas llamadas a la manifestación y al paro, cada una de ellas atendiendo a una serie distinta de reclamaciones, aunque cierto es que todas sostenidas sobre una misma máxima de demandas de una mayor participación de los empleados de tienda en los buenos resultados económicos que viene recogiendo la multinacional dueña de cadenas tan conocidas como Zara, Massimo Dutti, Bershka o Pull&Bear.

Como parte de esta misma oleada de protestas, y en lo que no deja de ser una convocatoria que termina de enfriarse todavía más tras haberse puesto ya fecha al arranque de las negociaciones de esta Mesa Estatal, se mantiene convocada para este sábado 7 de enero, primer día de rebajas, una huelga nacional para los trabajadores de tienda de las cadenas Zara, Lefties, Kiddy’s Class y Pull&Bear. Un paro convocado por los sindicatos minoritarios CGT y USO, que han decidido no secundar desde la dirección de CCOO y UGT, desde el que precisamente se busca exigir a la multinacional de la moda que avance en la equiparación salarial de sus trabajadores, ampliando al resto de su plantilla el acuerdo de subida salarial progresivo, de hasta 380 euros al mes para finales de 2024, acordado para los trabajadores de tienda de sus cadenas de la provincia de La Coruña. Siendo esta una huelga que viene a seguir a la llevada a cabo por ese mismo colectivo de trabajadores los pasados días del 24 y del 25 de noviembre de 2022 en La Coruña, y tras la que tenían lugar las convocatorias a la huelgas para el  23 de diciembre en La Coruña y el 7 de enero en Cantabria, ambas finalmente desconvocada tras los acuerdos de última hora alcanzados por la dirección de Inditex con la CIG y con UGT, respectivamente.