Arrancan con protestas las rebajas de enero de El Corte Inglés

Madrid – Jornada indubitablemente histórica la que va a vivirse este martes 7 de enero de 2025 en El Corte Inglés, y ya no por ser este el día en el que la compañía española da el pistoletazo de salida a sus siempre concurridísimas rebajas de enero, sino por ser también en el que sus trabajadores saldrán a la calle para reclamar una sustancial mejora de sus condiciones laborales. Unas demandas que se disponen a exigir durante uno de los días del año que más afluencia de gente concentran los centros comerciales de la histórica compañía de grandes almacenes, desde las que serán las primeras protestas de los trabajadores de El Corte Inglés en el más de un siglo de vida desde la fundación de la compañía.

Convocados por la Confederación General del Trabajo (CGT), aunque minoritario frente a otras organizaciones sindicales como Valorian, Fetico, CCOO y UGT entre las filas de la compañía española de grandes almacenes, con igualmente representación entre sus trabajadores, todos los empleados de El Corte Inglés han sido llamados por el sindicato a sumarse a la gran manifestación que la CGT ha convocado para este martes 7 de enero de 2025. Un acto público y de protesta que se ha programado para que tenga lugar a partir de las 11:00h de la mañana frente a las puertas del centro comercial de El Corte Inglés del número 85 de la calle de Goya de Madrid, en pleno centro del siempre elitista barrio de Salamanca de la capital de España. Complejo que, asentado a escasamente unos metros del Movistar Arena, del parque de El Retiro y de la Puerta de Alcalá, se terminará de convertir así en el centro y único punto en torno al que desde la CGT se han decidido a concentrar todos los actos de protesta convocados por la organización sindical, y que se estructurarán en torno a dos acciones que, siempre en torno al centro de El Corte Inglés de la calle de Goya, se prolongarán hasta el medio día de hoy, con una primera parte de la manifestación habiendo sido convocada para de entre las 11:00h a las 12:00h de la mañana, frente a las puertas del centro de Goya 85; y la segunda para de las 12:30h a las 14:00h del mediodía, desde ya la aledaña plaza de Felipe II de Madrid a la que vuelca la segunda fachada del centro, uno de los más grandes y de mayor referencia de entre todos con los que cuenta El Corte Inglés en la ciudad de Madrid.

Este 7 de enero, “el sindicato CGT hará historia al convocar una manifestación sin precedentes en El Corte Inglés, coincidiendo con el primer día de rebajas”, detallan desde la organización sindicalista a través de un comunicado. Con “esta protesta”, advierten, “la primera en más de un siglo de la empresa”, lo que se busca es “exigir mejoras laborales urgentes”, así como “denunciar unas condiciones de trabajo” que se “consideran obsoletas y perjudiciales”.

Socialización de los beneficios

Como bien señalan desde la organización sindical, el objetivo de la protesta es tanto visibilizar como demandar una sustancial mejora de las condiciones laborales de los trabajadores de la compañía de grandes almacenes. Unas condiciones que, a pesar de las ventajas que pudo representar el nuevo Convenio Colectivo de Grandes Almacenes, acordado entre los sindicatos y la patronal de El Corte Inglés, Anged, en marzo de 2023, con cuya firma precisamente se logró abortar el calendario de protestas que para entonces ya se estaba diseñando para los empresas y trabajadores del sector, desde la CGT esgrimen que siguen siendo especialmente leoninas para los intereses de la empresa.

Lejos de resultar ser el fruto de una acción impulsiva y precipitada, la realidad es que desde la CGT vienen ya censurando desde hace largo tiempo las condiciones laborales, a su parecer marcadamente injustas, que se viven dentro de las filas de El Corte Inglés, y en especial desde que la compañía de grandes almacenes informase, a mediados del pasado mes de noviembre de 2023, de su rendimiento durante el primer semestre de 2024/2025. Periodo completado a fecha del pasado 31 de agosto, que la compañía cerró disparando sus ventas un +2,3 por ciento, hasta los 8 041 millones de euros, y su beneficio neto un +11 por ciento, hasta los 203 millones, celebrando con ello una fortaleza en sus balances ante la que desde la CGT reclamaban para entonces que la compañía contaba con el deber de tener que reconocer a sus trabajadores los esfuerzos y sacrificios que habían venido haciendo en beneficio de la empresa.

“Estos beneficios son, en gran medida, el resultado del esfuerzo diario de todos los trabajadores”, que “somos quienes pasamos largas jornadas laborales, muchas veces de más de 10 horas”, quienes “trabajamos en festivos sin que se nos pague, realizamos múltiples tareas y, además, nos enfrentamos a una constante reducción de personal”, esgrimían para entonces desde la CGT. Pero sin embargo, “más allá de los números, el verdadero precio de todo esto lo pagamos con nuestra salud, con el desgaste físico y emocional que sufrimos, y con la completa falta de conciliación familiar”, como resultado de unas condiciones laborales por las que, censuraban, “nos vemos obligados a dejar de lado nuestra vida personal para poder cumplir con las exigencias del trabajo, mientras todo esto sigue pasando desapercibido”.

Ante esta, su realidad, además “creemos que sería justo que dichos beneficios se viesen repercutidos en nuestras nóminas en forma de subida salarial, ya que el coste de la vida no deja de aumentar y nuestros sueldos son cada vez más precarios”. No obstante, “cada vez que se solicita una subida salarial o una compensación justa por el esfuerzo realizado, siempre recibimos la misma respuesta: ‘No hay dinero’”, pero al tiempo “vemos con sorpresa” cómo “la empresa hace públicos unos beneficios cuantiosos que, según dichas informaciones, no dejan de crecer año tras año”. Frente a esta aparente contradicción, lo que resulta “inadmisible”, reprueban, es que “la empresa se enriquezca a costa de nuestro esfuerzo, mientras niega a los trabajadores lo que merecen”. “Ya está bien de que nos tomen por tontos y se estén llenando los bolsillos a costa de nuestros esfuerzos”.

Protestas y reivindicaciones frente a unas condiciones laborales “abusivas” y precarias

Tras esa severa contestación por parte de la CGT a las cuentas hechas públicas por la compañía española de grandes almacenes, a medida que desde El Corte Inglés se iban aproximando a cada día más a la estratégica campaña de Navidad, desde la organización sindical no han cesado en tratar tanto de reclamar mejoras en las condiciones de los trabajadores de la compañía, como de buscar sensibilizar a los consumidores de las duras condiciones por las que iban a pasar los empleados de la compañía durante estos días de fiesta. Días para los que desde la CGT celebraban como un primer “paso adelante” el haber logrado adelantar hasta las 19:00h las horas de cierre de los centros para las jornadas del 24 y del 31 de diciembre… hasta que se dio a conocer que la compañía reclamaba el que los trabajadores siguieran trabajando ambos días a puerta cerrada hasta las 22:00h. Una demanda que ya llevó a los trabajadores a tratar de concienciar a los clientes de la compañía de sus condiciones laborales repartiendo octavillas a las puertas de sus centros en Navidad, en una primera acción de protesta que continuará ahora con la celebración de esta manifestación en Madrid.

Como mar de fondo de esta manifestación, cuatro son los principales objetivos que se han marcado alcanzar y que reclaman desde la CGT, empezando y contando como principal la eliminación de las jornadas “laborales abusivas” que imperarían en El Corte Inglés desde un acuerdo de 2017, y desde las que se fuerza a los trabajadores a trabajar en jornadas ampliadas de hasta 10 horas de trabajo diarias, con hasta 11 días sin librar y en algunas temporadas, alcanzando las 60 horas de trabajo semanales. Un exceso de carga de trabajo que, censuran desde el sindicato, “afecta gravemente la salud y el bienestar de los trabajadores, quienes, a pesar de las repetidas propuestas de CGT, no han recibido respuesta por parte de la empresa” para abolir estas directrices.

Como otra de sus reclamaciones principales, está la eliminación de la “gratuidad en domingos y festivos”, y que se traduce, alegan desde la CGT, en que los trabajadores de El Corte Inglés que trabajan en días de festivos y en domingos, no reciben una remuneración ni una compensación salarial diferenciada adicional. Una práctica que sostienen que resulta en toda “una injusticia que debe ser corregida para reconocer el sacrificio y la disponibilidad de los trabajadores en jornadas especiales”.

Como tercera cuestión, desde la manifestación también se va a tratar de visibilizar y de reclamar que se acaba con la “precariedad económica” que según sostienen desde la CGT afecta especialmente a los trabajadores de los departamentos y áreas de supermercado, expedición, omnicanalidad, planificación y proyección de ventas (PPV) y de atención al cliente. Secciones de la empresa en las que, advierten, “los trabajadores perciben el salario mínimo sin incentivos, lo que aumenta la desigualdad con otros  colectivos de la empresa”, y en lo que además “ha llevado a muchos profesionales a abandonar la empresa, aceptando indemnizaciones mínimas, cansados de perder derechos y soportar condiciones precarias con grandes exigencias”.

Por último, y en una cuestión ya más ajena a las reclamaciones directas en beneficio de los trabajadores que con esta manifestación persiguen lograr desde la CGT, la organización sindical del mismo modo va a buscar reforzar sus posiciones entre la plantilla, al tiempo que ataca la permisividad y sintonía que, esgrimen, muestran ante los intereses de la compañía, y no de los trabajadores, las organizaciones sindicales Valorian y Fetico, a las que censuran de “práctica de sindicalismo amarillo”, así como CCOO y UGT, “que no se diferencian de estos sindicatos, dejando a los trabajadores desprotegidos y sin ninguna mejora mínima en sus condiciones laborales”.

Brandiendo toda esta suma de exigencias, “la CGT invita a todos los trabajadores y a la sociedad en general a unirse a esta movilización para luchar juntos por condiciones laborales más justas y dignas”. Todo, desde esta jornada de protesta de este martes 7 de diciembre de 2025, que “será clave en la defensa de los derechos laborales de los trabajadores” de la compañía española de grandes almacenes, así como, concluyen, “en la búsqueda de condiciones más equitativas para todos las y los trabajadores de El Corte Inglés”.