Altri invertirá 75 millones de euros para reorientar al textil su fábrica Biotek de Portugal
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Madrid – La compañía portuguesa Altri ha anunciado que acometerá una inversión de 75 millones de euros, destinada a reorientar la producción de su fábrica Biotek de Portugal hacia una producción de fibras solubles aptas para su uso por la industria textil y de la moda. Una más que considerable inversión, para la que recibirán el apoyo del Gobierno portugués.
Altri no espera ni se detiene ante el devenir de los acontecimientos, y mientras aguarda y atiende a ver por dónde y por qué camino termina por discurrir su proyecto para la construcción de una planta de producción de fibras sostenibles en Palas de Rey, anuncia la inversión de 75 millones de euros en su fábrica Biotek de la localidad portuguesa de Vila Velha de Ródão. Una más que considerable inversión, que se acometerá, anuncian también, con el apoyo del Gobierno de Portugal, a través de la Agencia Portuguesa de Inversiones y Comercio Exterior (AICEP), y que irá dirigida a reconvertir y renovar la fábrica de Biotek de Vila Velha de Ródão, actualmente dedicada a la producción de pulpa blanqueada BEKP para su uso por la industria papelera, en una planta especializada en la producción de fibras solubles DWP de base celulósica, destinada principalmente a nutrir de materia prima sostenible, biodegradable y de origen no fósil a la industria textil.
“Estamos muy satisfechos con el apoyo recibido de AICEP y del Ministerio de Economía para hacer realidad esta inversión”, no ha dudado en querer salir a destacar José Soares de Pina, CEO de Altri, a lo largo de unas declaraciones compartidas por la dirección de la misma compañía portuguesa. “Se trata de una inversión crucial para Portugal, que ahora cuenta con dos unidades industriales productoras de fibras solubles, principalmente para la industria textil, lo que contribuye significativamente a la descarbonización del sector”, analiza, al tiempo que advierte sobre cómo resulta “esencial el compromiso de toda la sociedad con la construcción de un mundo más sostenible”, y para “la adopción progresiva de productos naturales, sostenibles y reciclables”. En ese camino, y en ese compromiso, defiende, “la conversión de esta fábrica” presentará además “importantes beneficios ambientales, incluso en el proceso de fabricación”, gracias al uso de “las tecnologías más modernas” desarrolladas hasta la fecha.
Despuntando como uno de los mayores productores de fibras textiles de Europa
Atendiendo a los detalles sobre el proceso de reconversión que se han abierto a compartir desde Altri, como fechas estimadas, se espera que la inversión destinada a la reorientación de la fábrica de Biotek se complete para finales de 2026. Fecha a partir de la cual Altri pasará a contar con una capacidad de producción de más de 300 mil toneladas anuales de fibras solubles DWP, totalmente destinada a satisfacer una demanda exterior; cantidad que se producirá entre sus plantas de Caima, en la localidad portuguesa de Constância, y esta planta de Biotek de Vila Velha de Ródão, para la que se estima que, una vez que entre a pleno rendimiento, contará con un volumen de producción de 180 mil toneladas anuales de fibras solubles.
Contando bajo su mano con este destacado volumen de producción, desde Altri no guardan reparo alguno a la hora de asegurar el que con ella, y gracias para eso a esta inversión de 75 millones de euros para reorientar la producción de la planta de Biotek, la compañía portuguesa pasará a convertirse en “uno de los principales productores de fibras textiles de Europa”. Una consideración que la situará en una inmejorable posición de salida, para la hora de salir a afianzarse y a tratar de tomar impulso, y también ventaja, en el estratégico, prometedor, sostenible y circular mercado de la producción de fibras solubles para la industria textil. Un biomaterial, sostenible y circular, siempre que así lo determinen y respalden sus fuentes y procesos de producción, que está experimentando una creciente y sin límites “edad dorada”, a medida que crece su demanda, especialmente para su uso dentro de las cadenas de valor de las industrias de la moda y del textil, pero también por parte de las de otros sectores. Un auge que está contribuyendo justamente a facilitar y fomentar la reconversión de unidades de producción como esta planta de Biotek de Altri, desde los procesos de fabricación de pulpa blanqueada BEKP, a los de fibras solubles DWP. Todo ello, a través de la transformación de las fábricas en unidades de producción más eficientes y con menor huella ambiental, y además preparadas y listas para contribuir al impulso de la sostenibilidad y de la circularidad dentro del textil y de la moda.
“Esta inversión convertirá a Altri en un grupo europeo de referencia en la producción de fibras para la industria textil”, así como "en un importante contribuyente a la descarbonización” del sector, reivindica José Soares de Pina, director ejecutivo de Altri. Desde esa posición, y en línea con lo ya señalado, Altri saldrá a tratar de reivindicarse, señalan desde la compañía portuguesa, como un agente de referencia dentro de un mercado de fibras solubles; mercado que “tiene actualmente un valor de alrededor de 6 000 millones de euros”, estimándose “que alcance los 7 600 millones de euros para 2033”.
“La creciente demanda de productos basados en biomateriales ha creado oportunidades para la transformación de fábricas que utilizan la celulosa de la madera como materia prima”, como la de Biotek, “en unidades más eficientes y con menor huella ambiental”, a través de su reconversión en fabricas de “fibras solubles”, apuntan desde Altri. Sosteniendo esa creciente demanda sobre la que advierten, para 2033, se encontrarían datos y estimaciones como las que ya manejan desde la compañía portuguesa, y que apuntan a que “más del 71 por ciento de las marcas de moda se han comprometido a reemplazar las fibras de origen fósil por fibras de origen natural”, o a que, y “a nivel mundial, según estudios realizados, el 63 por ciento de los consumidores manifiesta su preferencia por productos ambientalmente sostenibles”. Unos indicadores que hablarían por sí solos del gran potencial con el que cuentan, a nivel solo de negocio, estas fibras solubles DWP, que se descubren como “materias primas básicas para una amplia gama de productos” de la industria textil, pero también de la alimentaria, de la farmacéutica o de los envases; así como “un sustituto natural de las fibras de origen fósil”. Un valor como fuente sostenible y para impulsar la descarbonización del sector, que además contaría con un especialmente prometedor potencial de crecimiento en Europa, si atendemos a un contexto como el actual en el que las empresas están tratando de reducir riesgos a través de una mayor diversificación/relocalización de sus fuentes de producción para mitigar posibles impactos ante una excesiva dependencia de Asia.
- Altri invertirá 75 millones de euros en su fábrica Biotek en Portugal para producir fibras solubles para la industria textil, con el apoyo del gobierno portugués.
- Se espera que la reconversión de la fábrica Biotek esté completa para finales de 2026, aumentando la capacidad de producción de fibras solubles de Altri a más de 300 mil toneladas anuales.
- Con esta inversión, Altri se convertirá en uno de los principales productores de fibras textiles de Europa, un camino que emprenden aprovechando la creciente demanda de biomateriales sostenibles en la industria de la moda.