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Bolsas convertidas en cajas de cobro: la start-up MagiQeye lanza el primer SCO portátil con tecnología RFID e IA

Por Jaime Martinez

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Retail|Exclusiva
Recreación de una experiencia de compra con una bolsa con la tecnología de MagiQeye integrada. Credits: MagiQeye.

Madrid – Revolución en la escena minorista, después de que la start-up MagiQeye haya presentado y se haya decidido ya a arrancar con la comercialización de su nueva y disruptiva solución tecnológica para las empresas del sector. Una terminal de autopago portátil (SCO) dotada con tecnología RFID y con Inteligencia Artificial (IA), con la que prometen, con el foco de atención puesto sobre las nuevas generaciones de consumidores nativos digitales, terminar de transformar por entero la experiencia de compra en tienda del universo retail, empezando por la que ofrecen los principales y más avanzados operadores de moda.

Fundada este pasado mes de agosto de 2024 por los israelíes Julia Lerner, afincada en los Estados Unidos, y Gidon Moshkovitz, asentado en Italia, y quien se mantiene al frente de la start-up en calidad de CEO, MagiQeye es fruto de nada más ni nada menos que la cristalización de las respectivas trayectorias profesionales que a lo largo de estos años han venido siguiendo cada uno de sus dos fundadores. Encontrándonos así de un algo a una Julia Lerner que cuenta a sus espaldas con más de 15 años de experiencia en el desarrollo de procesos tecnológicos asistidos por tecnología RFID (Radio Frequency Identification), unas tareas en las que se ha especializado como directora ejecutiva de la compañía estadounidense GearEye, que cofundase hace ocho años tras pasar por las filas de empresas como CMT, especializada en sistemas avanzados de imágenes por rayos X digitalizadas para diagnósticos médicos, o por GE HealthCare, la antigua división médica de General Electric; y del otro, con un Gidon Moshkovitz que cuenta por su lado con más de otros 15 años de experiencia, en su caso desarrollada dentro de la industria minorista, sector en el que se especializó en procesos tecnológicos para las empresas del retail como parte de los equipos de la tecnológica HP, de la consultora EY, y finalmente como fundador de Tracxpoint. Una compañía emergente desde la que, hace ahora cosa ya más de 10 años, Moshkovitz empezó a desarrollar nuevas soluciones para el retail para experiencias de compra no asistidas, en lo que en primer lugar llevó al lanzamiento de Smart Cart, el primer carro de la compra “inteligente”, y ahora al de MagiQeye.

Con su cuartel general y oficinas centrales en Milán, Italia, y toda su gestión comercial no obstante centralizada en Madrid, España, bajo la dirección del español Alberto Nadal, vicepresidente global de ventas de MagiQeye, la start-up italo-israelí, apoyándose en las tecnologías y soluciones que a lo largo de estos últimos años habían venido desarrollando de manera independiente Lerner y Moshkovitz desde sus respectivos proyectos emprendedores, acaba de presentar y lanzar al mercado el “dispositivo RFID más pequeño del mundo”. Una solución de pago portátil dotada con esa tecnología RFID, y además asistida por IA, con la que desde MagiQeye prometen revolucionar por entero la experiencia de compra dentro de la escena minorista, transformando cualquier bolsa de compra, cesta o carro en un punto de venta inteligente con funciones de pago digital. Una herramienta de la que cualquier cliente podrá valerse de este modo para completar, por sí solo, cualquier proceso de compra; como culmen de una experiencia que se dará acompañada de todo un cúmulo de ventajas, tanto para compradores como para empresas minoristas, de los más distintos sectores.

Gidon Moshkovitz, cofundador y CEO de MagiQeye. Credits: MagiQeye.

“Se trata del primer sistema de punto de venta (TPV) portátil que ofrece a los minoristas una experiencia de compra fluida, impulsada por RFID e IA”, nos señala al respecto Gidon Moshkovitz, cofundador y CEO de MagiQeye, a lo largo de unas declaraciones concedidas en exclusiva a FashionUnited con motivo de la presentación y del lanzamiento oficial al mercado de esta nueva herramienta para la industria minorista desarrollada por la start-up. Una “innovadora solución”, subraya Moshkovitz, que “redefine la experiencia de compra haciéndola más intuitiva, sin esfuerzo y ahorrando tiempo a los clientes”.

“Hasta ahora estábamos acostumbrados a ver sistemas de SCO (shelf-checkout) inmóviles, donde el ‘shopper’ paga y se va, sin obtener ninguna información de los hábitos de compra, sin interacción”, nos relata por su lado el español Alberto Nadal, vicepresidente global de ventas de MagiQeye. Una solución con la que en contra, defiende, “el ‘shopper’ tendrá un SCO portátil”, desde el que irá “obteniendo beneficios desde el primer momento” a través de toda clase distinta de “promociones y/o cupones” personalizadas, mientras disfruta de una experiencia de compra para la que “se sentirá libre de pagar cómo y cuándo quiera”, al disponer de “la plataforma de pago integrada” en el mismo soporte, sea bolsa, cesta o carro, que lo acompaña a lo largo de todo ese proceso en tienda.

De la supresión de las colas, a las recomendaciones y los descuentos personalizados

Entrando ya a analizar en mayor detalle esta nueva tecnología/solución para la industria minorista, presentándose MagiQeye como un dispositivo que se integrará dentro de aquel soporte para la compra (bolsa, cesta, carro, etc.) que ponga a disposición de sus clientes cada empresa minorista, del lado del consumidor, tres son las principales ventajas que hemos identificado como las que les servirán para disfrutar a estos de una experiencia de compra más inmersiva, fluida y personalizada. Todo gracias a esta solución tecnológica, a través de la cual los consumidores no solamente tendrán una SCO a su alcance en todo momento, sino también acceso a cupones con descuentos personalizados, y a una información, en tiempo real, ampliada y detallada sobre cada producto que escojan. Información con la que esta solución MagiQeye terminará por destaparse como un dinámico punto de encuentro desde el que los consumidores podrán acceder a toda la información de los productos que se vayan a disponer a comprar, adelantándose así, y además desde una propuesta más atractiva, a la aprobación de ese pasaporte digital de producto (DPP) que se encuentran ultimando desde la Unión Europea.

Sobre estas mismas ventajas para los compradores, relativas a la supresión de los tiempos de espera, cupones y recomendaciones personalizadas, y acceso a información detallada, al disponer cada comprador en sus manos de una TPV propia que, gracias a esa tecnología RFID, habrá ido identificando cada producto que se haya ido depositando en la bolsa, cesta o carrito, estos pasarán a poder disfrutar de una experiencia de compra en tienda igual de inmediata y fluida que la que disfrutan a través del canal online, sin tener que hacer ninguna clase de cola ni esperar a que llegue su turno, ya sea frente a una caja asistida o una terminal TPV de autocobro, para finalizar el proceso de compra. Completándose la experiencia, como ya señalábamos, con el acceso desde cada uno de los dispositivos móviles de cada comprador a unos cupones personalizados que se les ofrecerán atendiendo, con ayuda de inteligencia artificial, al proceso de compra y a las circulaciones y elecciones que hayan manifestado durante el proceso de compra, y que podrán usar tanto en compras actuales o futuras; y por último igualmente a una información ampliada, en tiempo real, sobre todos los artículos que hayan introducido en su bolsa o carrito, incluida la relacionada con su sostenibilidad.

“Una de las características más destacadas del sistema MagiQeye es la eliminación de las largas colas en las cajas”, subrayan desde la start-up, y es que gracias a su tecnología, “los compradores solo tienen que coger un artículo, colocarlo en la bolsa designada, pagar digitalmente e irse, sin hacer cola”, completando así un proceso que, “gracias al 100 por cien de precisión RFID”, destacan, resulta tan “rápido” y fiable, “que garantiza una experiencia del cliente sin problemas de principio a fin”. Experiencia que se completa con el acceso a la “información sobre los productos en tiempo real”, incluyendo detalles sobre “los materiales e información sobre sostenibilidad”; y con el acceso, desde los dispositivos móviles, a “cupones personalizados basados en sus perfiles y en las promociones actuales de la tienda”.

“Al saber quién utiliza MagiQeye” en todo momento, “podemos generar prescripciones de compra especiales para cada ‘shopper’”, nos señala al respecto el mismo Alberto Nadal. Y es que “una vez analizada toda esa información” que se irá analizando en tiempo real durante el proceso de compra, concreta, “nuestra IA” la estudiará, “para ofrecer recomendaciones”, y para generar unos “descuentos personalizados y cupones que se podrán utilizar en la compra presente o en futuras compras”.

A la “caza” de las nuevas generaciones digitales de consumidores

Mientras tanto, y del lado de las empresas minoristas, cuatro son en su caso las principales ventajas que se identifican tras el uso de la solución de MagiQeye en sus procesos de compra. Y es que gracias a su implementación, y a la vista de los resultados obtenidos tras el proyecto piloto ya completado por la start-up, este sistema SCO con tecnología RFID e IA, cuenta con el potencial de descubrirse como una potentísima herramienta para la hora de avanzar tanto en la consolidación como en el crecimiento en el mercado de las empresas minoristas, siendo capaz de contribuir a la fidelización de los clientes; a la optimización de las operaciones, incluida la gestión de inventarios, gracias a la recopilación de datos en tiempo real; al aumento del ticket de compra medio al final del proceso de venta; e inclusive a la seguridad de los propios establecimientos, siendo compatible con los sistemas RFID de seguridad en tienda.

Plataforma digital de pago de MagiQeye. Credits: MagiQeye.

“Para los retailers, MagiQeye ofrece la posibilidad de aumentar el ticket de compra de la cesta, fidelizar a los clientes y recopilar valiosos datos de los clientes en tiempo real para tomar mejores decisiones”, subrayan al respecto desde la start-up. De este modo, el “dispositivo RFID más pequeño del mundo” que ha desarrollado MagiQeye, con la capacidad de transformar “cualquier bolsa de la compra en un sistema inteligente de ‘shelf-checkout’ con funciones de pago digital para retailers”, se descubre como “una potente plataforma multimedia que también puede mejorar las ventas y la eficacia operativa” de las empresas; unas minoristas a las que se les facilitará de toda esa “información detallada” recopilada durante el proceso de compra, y que podrán así emplear para optimizar sus recursos y generar “un ahorro de costes, a la vez que” para mejorar “el proceso de compra”, gracias a los “sensores de hardware de última generación” y a la “interacción con el cliente impulsada por IA” que les brindará MagiQeye.

“Por las pruebas realizadas hasta ahora en tienda, las personas que utilizan MagiQeye pasan hasta un +30 por ciento más de tiempo en tienda”, lo “que genera hasta un +12 por ciento más de incremento de ticket”, subraya Nadal. Unos datos más que sobresalientes, que se habrían logrado al tiempo que la misma solución tecnológica sirve para tratar de seguir haciendo atractiva la realidad minorista física a ojos de las nuevas generaciones de consumidores, que han nacido y están creciendo como nativos digitales, y con ello, contando con un mundo virtual que incluso tienden a tener más presente y a asimilar como “más real” que a la misma realidad de lo físico. A este respecto, analiza el español, “a día de hoy, las generaciones Z, Millennials y próximamente la Alfa, por el auge de la compra online, pasan cada vez menos tiempo en las tiendas”; y frente a esa nueva realidad, “con MagiQeye ponemos el foco muy especialmente sobre estas generaciones, que tienen a su teléfono móvil siempre presente y que requieren un 100 por cien de procesos no asistidos”.

Abriendo fase de comercialización, con los minoristas de moda como primer objetivo

Finalizada esa primera prueba piloto, puesta en marcha en Italia, a la que hemos hecho ya mención de la solución de MagiQeye, ahora, y desde España, la start-up italo-israelí se arranca con la fase de comercialización de la tecnología. Un nuevo capítulo, que en su primera etapa va a venir eminentemente dirigido y protagonizado por minoristas de moda, que además ya cuenten con tecnología RFID integrada en los procesos de compra de sus tiendas.

Esquema de una bolsa dotada con la solución SCO con tecnología RFID e IA de MagiQeye. Credits: MagiQeye.

Con respecto al proceso que, de manera más pormenorizada, se seguirá para la comercialización de la solución, desde la misma dirección de MagiQeye identifican un capítulo que se dará estructurado en tres fases, que se arrancarán con un “Retailer Test Program” (RTP) desde el que se encargarán de enviar un set de su solución de terminal de pago digitalizada portátil a las oficinas centrales de cada minorista interesado, que además sea identificado como un potencial socio comercial, para que puedan evaluarla de manera interna. Superado este primer acercamiento a la tecnología de MagiQeye, se iniciará una experiencia piloto en una selección de tiendas físicas, reales, en las que se integrará de manera completa la solución desarrollada por MagiQeye a través de un número inicial de unidades dotadas con su tecnología SCO con RFID e IA. Llegando ya al punto final de la comercialización de la tecnología, con su implementación en un mínimo de tiendas del socio comercial minorista. Unos establecimientos en los que el nuevo sistema/experiencia de compra desarrollado por MagiQeye pasará a quedar completamente integrado, a través de su incorporación a los dispositivos de bolsa/cesta/carro que el minorista escoja a su libre elección, y a los que el departamento de ingeniería de la start-up se encargará de adaptar la solución. Una nueva herramienta de la que el minorista entrará así a valerse, y cuya presencia en tienda se completará con un punto de carga por inducción “MagiQeye Station” desde el que los dispositivos quedarán a disposición de los clientes a la entrada de cada tienda.

“La comercialización en un primer periodo va a ir dirigida a retailers que ya tengan integrados los procesos RFID en tienda, considerando clave incorporar” en esta primera etapa además “partners tecnológicos” que vayan a asumir las tareas relacionadas con “la instalación, integración y soporte postventa” de la solución; funciones para las que “ya tenemos ‘partners tecnológicos’ en Iberia, Francia e Italia”, nos adelanta Nadal. Unos acuerdos que ya descubren las intenciones de MagiQeye de buscar centrar sus operaciones de comercialización, como punto de partida, ya no solamente en moda, sino en estos tres mercados; unos países entre los que España entra a jugar un papel principal y destacados, “por dos razones muy importantes”, destaca el vicepresidente global de ventas de MagiQeye. En primer lugar, por el “papel importantísimo en el tablero internacional” que juega España y las compañías “del ‘fashion retail’ español desde hace largos años”; y en segundo lugar, por la condición del país como puerta de entrada a Hispanoamérica, una región a la que la start-up confía en poder dar el salto como siguiente paso de sus estrategias de crecimiento, y para la que “estamos focalizándonos principalmente en acciones en México y Colombia”. De tal modo que, y a partir de esta hoja de ruta, España resulta “clave como base de operaciones comercial” para la compañía; que se inicia en la comercialización de su solución tecnológica con el foco puesto, siguiendo con lo señalado, sobre “el sector moda”, que “es el sector minorista que más avanzado está en la adopción de RFID operativa”, concreta Nadal, pero con el potencial de terminar por introducirse en otros sectores especializados de la industria retail, desde en tiendas de alimentación y supermercados, a farmacias.

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