Mango calienta su escalada en Estados Unidos con una cápsula junto a Simon Miller

En su enésima muestra de proximidad hacia con el mercado y el público estadounidense, desde la multinacional española de la moda Mango han anunciado la creación de una nueva, y próxima, colección cápsula, desarrollada junto a la reconocida firma de moda estadounidense Simon Miller. Casa de moda con base en Los Ángeles enfocada a una oferta dirigida a la categoría de artículos de moda-lujo, cuya esencia, asentada en una aproximación tan divertida como disruptiva hacia con esos mismos valores, se ha buscado poner a dialogar con los valores mediterráneos de los que tanto gusta hacer valer como propios la firma española, dando lugar como resultado a una propuesta veraniega, que no verá la luz hasta el próximo mes de mayo.

Según a este respecto se han encargado de empezar a detallar desde la propia cadena de moda española, se tratará esta de una colección cápsula integrada dentro de la oferta de Mango de esta próxima campaña de Primavera/Verano de 2023. Temporada para la que van a tratar de reforzar su oferta con una colección que tratará de mostrarse como un puente de unión entre las orillas del mar Mediterráneo cuya luz inunda la propia naturaleza de Mango, y la de esa tan lejana, pero a la vez tan cercana gracias a esa infinidad de tantos puntos en común, costa de California en la que ahonda sus raíces Simon Miller. Irreverente casa de moda cofundada en 2008 por Daniel Corrigan y Jake Sargent, y a día de hoy bajo la dirección, tanto ejecutiva como creativa, de Chelsea Hansford.

“Simon Miller personifica el estilo de vida de su consejera delegada y directora creativa, Chelsea Hansford, quien defiende una propuesta brillante, moderna e inclusiva” de la moda a través de “un enfoque lúdico” de acercamiento “al lujo clásico”, entran a explicar desde Mango a través de un comunicado. De este modo, adelantan, “uniendo el estilo de la costa californiana de Simon Miller con el mediterráneo de Mango, el resultado es una colección veraniega inspirada en el mundo místico que se esconde debajo del mar”, suma de sensaciones que terminarán por impregnar y proyectarse desde esta próxima colección cápsula, que se mostrará como una “colección completa de prendas, calzado, bolsos y accesorios” confeccionada sobre “una paleta de colores cálida y llamativa”, y en la que no faltará la presencia de esos “estampados dibujados a mano” tan “característicos tanto de Simon Miller como de Mango”.

Objetivo: posicionar a Estados Unidos entre sus 5 principales mercados

Esta nueva cápsula viene a tomar el testigo de las distintas propuestas colaborativas que desde Mango han venido perfilando y lanzando a lo largo de estos últimos años, especialmente en colaboración de unas embajadoras de marca a las que no ha dudado de dar su lugar permitiéndolas explorar su lado más creativo firmando y participando de la ideación de cuidadas propuestas de edición limitada. Una oferta esta de entre la que se han destacado las colecciones cápsula colaborativas desarrolladas junto a Leandra Medine, Sofía Sánchez de Betak y su firma de moda Chufy, Pernille Teisbeak o, de manera más reciente, Camille Charrière. Una política colaborativa en la que ahora da un considerable salto adelante, haciendo coprotagonista de una de sus cápsulas, ya no a una reconocida influencer o prescriptora de tendencias, sino a una firma bien consolidada dentro de la industria de la moda.

Desde una perspectiva mucho más amplia, no deja de escapársenos las claras intenciones que, al parecer, guarda la multinacional de la moda española a la hora de reforzar sus lazos con una marca de moda estadounidense, estadounidense y asentada en Los Ángeles, en un momento en el que Mango se encuentra embarcada en mitad de su plan estratégico de crecimiento, expansión y consolidación en los Estados Unidos. Un mercado al que la compañía española entraba a operar en el año 2006, y sobre el que iniciaba una renovada ofensiva tras la apertura de su nueva flagship store, de más de 2.000 metros cuadrados, el pasado mes de mayo de 2022 en plena Quinta Avenida de Nueva York.

Desde entonces y hasta ahora, desde Mango no han cesado de seguir avanzando en su conquista del mercado estadounidense, mediante la aplicación de un plan estratégico estructurado en 3 fases, cuya última fase arrancaba precisamente con la entrada en este nuevo año de 2023. Un ejercicio que, siguiendo con los planes previstos y trazados por la dirección de la compañía española, deberá significar el de su expansión hacia los estados del este de los Estados Unidos, sumando a su actual presencia en el estado de Nueva York y en el de Miami, su próximo desembarco en ciudades como Atlanta, en el estado de Georgia; en Phoenix y Tucson, en el estado de Arizona; en Houston y Dallas, en Texas; en Las Vegas, Nevada; o en Los Ángeles, San Diego y San José, tres localidades pertenecientes al mismo estado de California en el que mantiene su sede operativa Simon Miller.

A este mismo respecto, “en cuanto a los planes de la compañía para 2023, Mango seguirá creciendo en Florida con tiendas nuevas en ciudades como Boca Ratón y ampliará su presencia hacia el oeste con la apertura de nuevos establecimientos en Georgia (Texas) y California”, se encargaban de entrar a pormenorizar desde Mango tras la inauguración, a finales del pasado mes de noviembre, de su nueva tienda en el centro comercial Aventura Mall de Miami. “El objetivo es llegar a 2024 con unos cuarenta puntos de venta en los Estados Unidos, lo que situaría al país entre los cinco principales mercados de la compañía en cuanto a ingresos para el grupo”, y “para lograrlo”, explicaban, “además de la expansión de las tiendas físicas, el grupo tiene previsto impulsar su actividad online en Mango.com y en otros marketplaces”.