El LCI Barcelona presenta a sus nuevos talentos
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A lo largo de un desfile celebrado a finales de esta pasada semana, desde el LCI Barcelona, una de las principales instituciones académicas de todo el país dedicadas a la enseñanza de estudios en diseño y moda, además de uno de los 23 campus con los que cuenta la red canadiense LCI Education repartidos por los 5 continentes, terminaron por presentar las colecciones de final de curso de su nueva promoción de recién graduados en el Grado en Diseño de Moda. Estudiantes que salieron a poner así el broche de oro a su más reciente y última etapa académica, descubriendo ante el público congregado una sucesión de propuestas desde las que trataron de poner en valor todo el conocimiento, y la práctica, adquiridos durante estos últimos años de formación en el centro.
Bajo la sugerente atmósfera ofrecida por el nuevo campus, todavía sin finalizar, que la escuela tiene programado abrir y poner en marcha a lo largo del próximo 2024, y a cuya construcción se han terminado por destinar cerca de unos 35 millones de euros, se terminaron por descubrir sobre la improvisada pasarela un total de 43 colecciones de moda. Propuestas firmadas por otros tantos estudiantes recién graduados, quienes mostraron un total de 32 colecciones de prendas pensadas para la mujer, 10 de hombre y 1 de naturaleza genderless. Una tipología de indumentaria que, como bien venimos poniendo de manifiesto desde FashionUnited desde hace ya un largo tiempo, parece contar con una larga proyección dentro de la producción de moda de la industria, mostrándose en una tendencia en alza alimentada por las nuevas generaciones y su cada vez más inclinada manera de afrontar la concepción del género como una terminología inclusiva y no binaria capaz de abrirse para abrazar las sensibilidades de cualquiera, sean estas las que sean.
A pesar de la clara amplitud del espectro estético con el que terminaron por descubrirse todas y cada una de las colecciones de los recién graduados, todas ellas terminaban de responder ante el concepto de “anhelar” que, como leitmotiv de todo el desfile, los mismos estudiantes terminaron escogiendo como hilo argumental para la presentación de sus colecciones de final de curso. Un concepto, una idea y un sentimiento, que terminó por pasar así a generar el título final del desfile, “Hâlô”, inspirado en la raíz etimológica latina del mismo término, manifestándose físicamente una vez ya iniciada la presentación, a partir de los tejidos y de las puntadas con las que cada uno de los estudiantes había terminado por dar forma a sus diseños, como reinterpretación misma que cada uno de ellos trató de hacer del mismo significado de la palabra.
“Cada año les pedimos que intenten encontrar un concepto que les explique como promoción”, y “este año escogieron la idea de anhelar”, no ha dudado en salir a explicar Estel Vilaseca, directora del Área de Diseño de Moda de LCI Barcelona, a través de unas declaraciones difundidas desde la misma institución académica. “Es un concepto de mirar hacia el futuro, que habla de su pasión por la profesión y de todo lo que está por delante”, detalla Vilaseca. “Ahora tienen un nuevo comienzo y habrá nuevos anhelos”, en lo que no resta un ápice a la impresión de todo lo vivido a lo largo de todos estos últimos años, y hasta desembocar en este desfile de final de curso, por cada uno de los estudiantes, ya recién graduados.
“Había muchos nervios, emociones”, y es que “el desfile son meses de trabajo” y fruto de “un esfuerzo colectivo muy grande”, añade Vilaseca. “Hay mucha emoción”, y es que “a nivel académico es la culminación de cuatro años, en algunos cinco, de estudios”, por lo que no cabe duda de que el evento terminar por descubrirse como “un momento muy especial” para todos los estudiantes. “Para la mayoría es el momento esperado, más allá de la presentación en el tribunal”, apostilla la directora de moda del LCI Barcelona. “Es muy emocionante”.
Con la de Julia Crusells premiada como la mejor colección
Y si las emociones y los nervios se podían sentir a flor de piel entre los nuevos graduados, quienes debían de presentar sus propuestas de final de curso ante una audiencia en la que no faltaron familiares, amigos, compañeros de estudios, miembros del equipo docente del LCI y destacados profesionales de la industria de la moda, sin duda que a ellas terminaron por contribuir la tradicional entrega de premios a las propuestas más destacadas de las presentadas por las nuevas promesas formadas en el centro educativo. Una entrega de premio que terminó por practicarse una vez finalizado el desfile de presentación de todas las colecciones, y que sirvió para reconocer las 10 mejores colecciones de las presentadas, con una mención especial para la mejor colección, y la entrega de los premios patrocinados Blend Showroom y Towanda Models.
Para llevar a cabo la elección de las propuestas ganadoras, esta fue una decisión que se terminó por poner en manos de un jurado de expertos profesionales, del que terminaron por formar parte Zoel Hernández, editor y periodista especializado en moda; Carlos Marán, editor de moda y coordinador de la publicación Herdes Magazine y responsable de comunicación del showroom Blend Showroom; la periodista y consultora de moda Charo Mora; Jordi Campo, director ejecutivo de Barcelona Fashion Press; Marta Marín, consultora y doctora en estética; el diseñador de moda Josep Abril; la fotógrafa y directora creativa Joana Poulastrou; la editora en jefe de Metal Magazine, Yolanda Muelas; y Claudia Englmann, estilista y editora de la revista Vogue.
Desde sus deliberaciones, y atendiendo a las singularidades y a la identidad propia y genuina que, aún con todas, cada una de las propuestas supo a bien defender desde la pasarela, como las 10 propuestas más valoradas de esta promoción, se terminaron por escoger a las firmas por Julia Crusells, Annabel Pulido, Marta Cebrián, Pilar Crespo, Laia Alargé, Mapi Pascual, Anna Salvador, María Solé, Marta Salazar y María Unzueta. Un reconocimiento al que se sumaron el de Marta Cebrián, Julia Crusells y Annabel Pulido como ganadoras del premio Blend Showroom, y el de Andrés Moscoso como ganador del premio Towanda Models. Menciones ambas con las que, desde su posición como empresas colaboradoras con el LCI Barcelona, tanto Blend Showroom como Towanda Models se comprometen a dar apoyo a los ganadores de sus premios en esta difícil etapa que ahora se les presenta por delante como recién graduados, de una promoción para la que se terminó por escoger a la colección de Julia Crusells como la mejor propuesta del año por los miembros del jurado.
“Cada colección es un mundo, un microuniverso”, que representa “la identidad del diseñador”, apunta Vilaseca, a través de un mensaje desde el que nos invita a valorar cada una de las colecciones presentadas, más allá de gustos y afinidades, como esa manifestación genuina a la que apuntábamos de las interioridades, inquietudes e impresiones de todos y cada uno de estos creativos. “Hay que mirar con detalle y dejarte embriagar con la colección”, añade en esta misma dirección la directora de moda del LCI Barcelona, aprendiendo a mirar “más allá de lo bonita, extravagante o rara que te parezca”. “Hay colecciones más clásicas, más atrevidas”, pero “lo interesante es estar abiertos de mente y ver qué sensaciones tenemos”. “Saber qué se ha querido contar”.