El hotel Karl Lagerfeld de Macao: el último sueño del “Kaiser” de la moda
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Madrid – Inaugurado y abierto al público desde comienzos de este pasado mes de junio de 2023, el suntuoso hotel de lujo Karl Lagerfeld de Macao, construido como parte del exclusivo complejo Grand Lisboa Palace Resort de esta particular “Las Vegas” asiática, se descubre, ya no solamente como el único establecimiento hotelero del mundo diseñado por el legendario diseñador alemán, sino también como el último de los proyectos que emprendiese y al que focalizase todo su singular talento el ya desaparecido “Kaiser” de la moda. Unos trabajados que no obstante Lagerfeld no pudo terminar de disfrutar, al no alcanzar a poder ver completada la construcción de las instalaciones del hotel antes de su fallecimiento, el pasado 19 de febrero de 2019.
Superados ya los fastos organizados con motivo de su inauguración, pasamos ahora a tratar de descubrir las singularidades que encierra este hotel diseñado, de principio a fin, desde su ambientación más general al más minucioso de sus detalles, por el legendario diseñador alemán. Un Karl Lagerfeld que se encargó de este modo de perfilar la única y personal atmósfera que se respira desde el interior de cada uno de los rincones de este hotel, erigido como una de las tres torres hoteleras con las que cuenta el complejo del Grand Lisboa Palace Resort de Macao. Unas instalaciones de las que ha pasado a formar parte, completando con ello a las distintas “experiencias” que tratan de brindarles a los huéspedes del resort —dotado también de casino y con un igualmente exclusivo centro comercial— desde la torre Grand Lisboa Palace Macau, con sus 1.350 habitaciones rindiendo honores al rico patrimonio cultural, histórico y artesanal de la región de Macao; y desde la torre Palazzo Versace Macau, construido bajo la dirección creativa de Donatella Versace como el primer hotel de una firma de moda en abrir sus puertas en Asia, y ofreciendo a sus huéspedes, desde el pasado 26 de abril de 2023, la posibilidad de disfrutar de una estancia rodeados de unos interiores primorosamente decorados con muebles de la línea Versace Home Collection, y con los exclusivos textiles y toda otra clase de elementos de su línea de hogar.
A renglón seguido así pues de la apertura del “Palazzo Versace”, es como terminó por abrir sus puerta este 9 de junio el The Karl Lagerfeld Macau, a diferencia del de la firma de origen italiano, siendo el primero con el que ha pasado a contar la firma de moda creada por el diseñador alemán, como vía desde la que dar “alas” a su personal estilo y manera de entender la moda, más allá de las revisitaciones que practicaba, desde su papel como director creativo, a los universos de casas como Chanel o Fendi. Una visión por tanto íntima y personal la que Lagerfeld trató de imprimirle a los interiores y a la experiencia de alojarse en este primer, y único, hotel Karl Lagerfeld de Macao diseñado por el “Kaiser” de la moda, a través de un ejercicio desde el que buscó seguir manteniéndose fiel a sus principios y a su máxima de que jamás diseñaría ningún espacio en el que no sintiera que él mismo podría llegar a vivir.
“La inmensa pasión de Karl Lagerfeld por el diseño lo acompañó toda su vida y este impresionante hotel es un claro ejemplo de ello”, apuntan desde la dirección de la casa de modas a través de un comunicado. “El hotel y su diseño fueron para él un proyecto muy personal”, para el que “se mantuvo firme en su idea de que nunca diseñaría un espacio en el que no viviría él mismo”, puntualizan. En respuesta, y haciendo honor a su fama de perfeccionista, “los pequeños detalles están impregnados de su influencia, desde las sillas similares a las de su despacho de París”, hasta con una “decoración con motivos de orquídeas”, la flor favorita del diseñador, repartidos “por todo el edificio”.
“Fue el último proyecto de diseño que emprendió y en él han quedado evidenciados, una vez más, su descomunal talento y compromiso con el detalle”, añaden a este mismo respecto, y es que Lagerfeld “escogió a mano cada elemento, desde la extravagante decoración de las habitaciones y las grandes instalaciones” que terminan de completar el complejo, hasta “los detalles más minúsculos como albornoces y sábanas”. “El resultado es un sublime espacio interior en el que se entrelazan de forma singular el diseño oriental y occidental”, en una genuina “representación acorde a la genialidad y grandeza del difunto diseñador”.
De un restaurante comida-fusión al “Book Lounge” para tomar el té
Dotado con 271 habitaciones y suites, el hotel se describe como un alojamiento “multisensorial” desde cuyo interior se invita a sus huéspedes a poder terminar de imbuirse con toda la magia creativa y con todo el estilo personal que caracterizaban al legendario diseñador alemán, quien se mantuvo durante más de 35 años como director creativo de Chanel. Una experiencia para la que, más allá de las propias habitaciones, para las que actualmente —y hasta el próximo 27 de septiembre— pueden reservarse unas estancias en un paquete “Gran Celebración” exclusivamente diseñado con motivo de la inauguración del hotel, el establecimiento ofrece una serie de distintos espacios, como su restaurante “Mesa”, dirigido por el galardonado chef portugués José Avillez; un singular “Book Lounge” desde el que disfrutar de un momento íntimo de lectura; o una espectacular zona de spa y de baño.
Ahondando en los detalles que presentan esta serie de ambientaciones del hotel, todas ellas, y al igual que las habitaciones, personalmente diseñadas por el difunto Lagerfeld, desde la tercera planta de la torre del hotel se puede acceder al restaurante “Mesa by José Avillez”. Un espacio decorado por Lagerfeld en una ostentosa combinación de oros y negros, desde donde el chef portugués, reconocido con una estrella Michelin, ofrece a sus comensales una propuesta gastronómica de comida fusión entre la típica gastronomía local de Macao y los sabores más característicos de la gastronomía portuguesa.
En cuanto a ese “Book Lounge”, ubicado en la planta baja de la torre del hotel, el espacio se descubre como un gracioso salón de té y bar, desde el que se ofrece una cuidada selección de platos y de postres inspirados en el Palacio de Versalles, en mitad de un entorno desde el que se rinde homenaje a la basta biblioteca personal con la que contaba el “Kaiser” de la moda. Aspecto al que se termina de dar forma con la ayuda de más de 4.000 libros, todos ellos seleccionados, uno a uno, por la dirección de la librería 7L de París, fundada por el mismo Karl Lagerfeld en la capital francesa en el año 1999.
Para terminar este particular recorrido que hemos venido practicando por las instalaciones del complejo, terminamos por “refrescarnos” en la zona de spa del The Karl Lagerfeld Macau. Un elegante espacio situado en la planta tercera del hotel, desde el que se ofrece una experiencia holística mediante tratamientos de última generación ofrecidos por la reconocida marca londinense 111Skin. Una oferta que se termina de completar con la opción de acceder al gimnasio del hotel, parte de un área “The Health Club” desde la que se invita a los huéspedes tanto a mimar su piel como a ejercitar su cuerpo, así como a disfrutar del baño desde las distintas piscinas, una interior y otra exterior, de las que dispone el hotel.
“El majestuoso Book Lounge es un reflejo de la pasión de Karl Lagerfeld por los libros”, mientras que el spa del hotel “fusiona moda, sofisticación y belleza para que sus huéspedes puedan disfrutar de lo último en cuidado personal”, destacan desde la firma de modas fundada por el diseñador alemán. Debiendo de ensalzar a este mismo respecto, y más allá de las “delicias gastronómicas del galardonado chef José Avillez”, el valor de ese “Book Lounge” que “encarna la cultura francesa del té e incluye un menú divertido y refinado, a partes iguales, de té, sándwiches, confitería francesa y éclairs” diseñador por la casa Karl Lagerfeld; así como “los detalles de mármol negro y mosaico dorado” que “fusionan la estética china y las influencias del Art Déco” como elementos protagonistas de la zona de spa, donde “una singular instalación de jade única en su género, inspirada en una pequeña pieza de jade que Karl encontró en una tienda de antigüedades, consigue completar el espacio con un toque elegante y llamativo”.
Junto a esta suma de elementos, también subrayan desde la firma de modas la “atrevida disposición de los mosaicos y la decoración de las piscinas interiores y exteriores”, apuntando especialmente a esas “enormes columnas de piedra” y al “cautivador motivo Art Déco” que puede descubrirse plasmado sobre la pared de lateral de la piscina interior. Y es que, destacan, “Karl se aseguró de que su amor por el arte estuviera presente en todo el proyecto”, razón por la que además encargó unas “magníficas esculturas al artista holandés Marcel Wanders y al francés Jean-Michel Othoniel”.