Desigual lanza su segunda colección bajo demanda generada por IA

Madrid – Tras el buen sabor de boca que terminó por dejar en la firma, al igual que en el conjunto de todos nosotros, la primera de estas propuestas disruptivas y de vanguardia, desde la multinacional española de la moda Desigual se han decidido a repetir la experiencia, y acaban de presentar y de “lanzar” al mercado su segunda colección diseñada a partir de herramientas de inteligencia artificial generativa. Una propuesta para la que enfatizamos esas comillas que adjuntamos al verbo “lanzar”, dado que, al igual que ocurriese con la primera colección, se tratan estas de unas piezas que única y exclusivamente se van a producir bajo demanda.

Tal y como defendieran desde los mismo equipos de Desigual a la razón de la presentación, el pasado mes de julio, de su primera colección diseñada a partir de herramientas de IA generativas, se trata esta de una segunda propuesta que sigue guardando un valor especialmente estratégico para la compañía, en la medida que les permite empezar a implementar y a testar sobre dos innovaciones y cambios, que guardan todo el potencial de llegar para revolucionar, por entero, los fundamentos de su modelo de negocio. Terminando por encontrar así, de un lado, a unas herramientas de inteligencia artificial generativas, cuyo uso permite a la compañía de moda mantenerse a la vanguardia del sector, introduciendo un conjunto de soluciones como base de sus operaciones que, todo hace prever, estarían llamadas a revolucionar por entero la manera por las que se guían los procesos de diseño de todas las empresas del sector. Y todo ello, mientras, del otro lado, se ponen a dialogar estas mismas herramientas revolucionarias en IA, con unos métodos de fabricación exclusivamente bajo demanda, que del mismo modo permiten a Desigual comenzar a desarrollar y a evaluar un modelo productivo mucho más eficiente, en términos tanto de recursos como de sostenibilidad, con el que consiguen mantener en unos indicadores igualmente bajos las cifras de acumulación de stock y de generación de residuos.

“Para Desigual, ir un paso más allá es irrenunciable” a su propia identidad y esencia como marca, y así “lo demuestra, por ejemplo, colección a colección, utilizando materiales y procesos cada vez más sostenibles”, sostienen a este respecto desde la misma firma de moda española. Siguiendo por esa máxima, “la empresa está comprometida con la toma de decisiones responsables”, para lo que “este proyecto, concretamente”, ha terminado suponiendo “un reto interesante”, sostienen, dado que les ha permitido a un mismo tiempo “testar un proceso de desarrollo de producto innovador, que utiliza tecnología de máxima actualidad”, como lo son las herramientas en IA generativa, pero y que “concluye además con mínimo stock de cada referencia”, gracias a esa producción bajo demanda de las piezas que integran esta segunda colección, con la que prácticamente desde Desigual están terminando por inaugurar una nueva línea independiente dentro de sus colecciones de moda.

“Esta colección bajo demanda es la combinación de nuestros casi 40 años de historia”, y de “la continua innovación transversal que impulsamos desde la compañía”, defiende en esta misma línea Thomas Meyer, fundador de Desigual, a lo largo de unas declaraciones que nos hacen llegar desde la propia dirección de la compañía. “Estamos muy ilusionados en testar estos diseños realizados por nuestro equipo y apoyados por la inteligencia artificial”, y en “la producción de prendas y complementos que se fabrican a petición de los clientes”. Unas innovaciones que, combinadas, añade Meyer, permitirán a Desigual “experimentar con la reducción de stock de producto”, así como investigar en “nuevas formas de llegar a los consumidores”, aproximándose ya prácticamente a un proceso de producción llevado a cabo “casi de manera conjunta” junto a los miembros de su comunidad de clientes.

La IA como “herramienta” de diseño

Como base de esta nueva y segunda colección de producción bajo demanda, y al igual que ocurriese como ya apuntábamos durante la primera propuesta presentada en julio, nos encontramos con una sucesión de piezas que han sido diseñadas por el conjunto de los miembros del equipo de diseño de Desigual, a partir de imágenes generadas por herramientas de inteligencia artificial. Un proceso que se ha decidido seguir e implementar, como vía desde la que poder evaluar el potencial que encierran, o no, estas herramientas para la hora de contribuir a los procesos de diseño de la compañía, y proceso que culminaba con la selección de una serie de imágenes, de entre todas las generadas, que ya desde Desigual se decidieron a compartir entre los miembros de su comunidad para evaluar el interés que los diseños —irreales— despertaban entre sus seguidores en redes sociales.

“Generadas con herramientas de inteligencia artificial, estas evocadoras imágenes son las únicas disponibles de cada una de las potenciales piezas”, disponibles ya ahora para su compra y producción bajo demanda. “Como ocurrió con la primera colección, la intención del equipo de diseño era poner a prueba la utilidad de la inteligencia artificial como recurso creativo y, después de diferentes tentativas”, se “consiguieron desarrollar estas propuestas, que les resultaron increíblemente atractivas”, sostienen desde la firma de moda española. “El siguiente paso estaba claro”, añaden, y pasaba por “implicar a la comunidad alrededor de la marca en el proceso y lanzarle una pregunta… ‘¿Queréis que las produzcamos?’”. Una cuestión que finalmente se ha saldado recibiendo el visto bueno de seguidores y de marca, y como muestra de la “acogida fabulosa por parte de los y las fans de la marca” que terminaron por recibir las piezas de la primera colección. Un éxito que “sin duda”, destacan desde Desigual, “ha sido decisivo para dar luz verde a esta segunda tanda” de productos.

Una colección con piezas de indumentaria y complementos

Completadas ya todas las fases previas del proceso que se ha vuelto a seguir para dar lugar a esta nueva colección de piezas, es como ahora ya finalmente podemos detenernos frente a unas instantáneas generadas por IA, desde las que se descubren una serie de diseños que, recordamos, ni existen, ni existirán ni se producirán, hasta el momento en el que cada cliente se decida a hacerse y adquirir uno de los diseños. Punto a partir del cual empezará ya a ponerse en marcha el proceso de producción para cada uno de estos modelos, de los que por el momento únicamente podemos saber cómo lucen gracias a estas imágenes “irreales”, y que son las que encontraremos en la misma página oficial de Desigual desde la que ya pueden adquirirse cada uno de los diseños que integran esta colección.

Sosteniendo a esta propuesta, en esta ocasión nos encontraremos con una serie de piezas tanto de indumentaria como de complementos, para las que desde Desigual se ha puesto un especial cuidado para la hora de garantizar el valor “premium” de los diseños. Una característica para la que se ha apostado por el uso de materiales de gran calidad, entre cueros y sedas, en lo que ha llevado como respuesta a la colección a mantenerse en una horquilla de precios a la altura, con valores de entre 129 y 449 euros.

Entrando ya a desgranar la naturaleza de cada uno de los modelos que integran la colección, dentro de la categoría de prendas de indumentaria, la propuesta alberga dos vestidos, un vestido camisero de algodón con bajo asimétrico y estampado efecto mármol (159 euros), y un segundo vestido en terciopelo devoré con estampado de motivos orgánicos y detalles plateados con brillos (169 euros). Terminándose de completar la categoría con una chaqueta de piel de líneas oversize (449 euros) y pantalón de piel a juego con apliques metálicos (399 euros); con un abrigo de lana y poliéster de corte oversize con cinturón y cierre de botones oculto (499 euros); y con dos jerséis efecto “patchwork”, uno en base de lana (199 euros) y otro en mohair (199 euros).

Cerrando la colección, y en unas piezas igualmente de producción únicamente bajo demanda, nos encontramos con una línea de complementos formada por cuatro modelos de bolsos, todos ellos confeccionados en piel —tres de ellos en España—, de la que forman parte un diseño de bolso tipo “shopper” en tamaño XL, un bolso de mano rígido “Clea” de piel, un bolso bandolera, y un cuarto y último diseño de bolso de estilo saco, con cadenas, todos ellos a un mismo precio de venta único, por modelo, marcado en los 299 euros la pieza. Diseños a los que ya, y como broche de oro de la colección, se suma un fular de seda en tamaño extra grande (129 euros), con estampado efecto mármol en una combinación cromática de blanco, negro y marrón arcilloso, confeccionado en Italia bajo el sello de la marca “Made in Italy”.