Custo Barcelona, un “outsider” de la moda, en Milán
cargando...
Madrid – Después de desfilar en Nueva York y en Madrid, en este caso como parte del calendario oficial de la pasarela Mercedes-Benz Fashion Week Madrid (MBFW Madrid), la firma Custo Barcelona aterriza ahora en Milán, para presentar su última colección para Otoño/Invierno FW24. Una propuesta que han presentado desde un desfile organizado en paralelo al calendario oficial de esta nueva edición de la Semana de la Moda de Milán.
Si algo saben y tienen claro los hermanos Dalmau, Custo y David Dalmau, que se mantienen al frente de la dirección y de la dirección creativa de la icónica firma de moda española Custo Barcelona desde su fundación en 1981, es que la moda es moda, pero la moda es también negocio. De ahí precisamente el que mantengan en todo momento como eje vertebrador de su “proyecto” de casa de modas, como gusta de denominarlo especialmente Custo, una estrategia dirigida a facilitar la divulgación de sus distintas propuestas, y a que sus colecciones puedan terminar quedando al alcance, ya no solamente de los consumidores, sino igualmente de los mismos responsables de compra y prescriptores de tendencias que se encargan de allanar ese camino de las propuestas de moda que va, desde las pasarelas, a los armarios de los amantes del diseño en el vestir. Una estrategia clara, cuyo principal punto de partida debemos de situarlo en Nueva York. Ciudad de la que, a pesar de hacerlo desde fuera del calendario oficial de presentaciones de su Semana de la Moda, de manera ininterrumpida Custo Barcelona ha venido valiéndose como plataforma para, año a año, desde 1996, presentar en primicia sus nuevas colecciones de temporada. Un compromiso hacia el público estadounidense, y hacia los compradores que se agolpan en la Gran Manzana a la llegada de cada nueva edición de su Semana de la Moda, frente al que Custo Barcelona volvía a responder este pasado mes de febrero, presentando desde Nueva York la primera parte de su colección “We Are Custo”, para la próxima temporada Otoño/Invierno de 2024/2025.
Oficializada ya su presentación desde Nueva York, los diseños terminaban poniendo acto seguido rumbo a España, desde donde, componiendo la misma selección de piezas que las presentadas en la Gran Manzana, terminaban por desfilar durante la Semana de la Moda de Madrid, en esta ocasión ya sí dentro del calendario oficial de la pasarela MBFW Madrid. Un desembarco sobre la pasarela madrileña que Custo Barcelona practicaba como uno de los desfiles más destacados de la jornada del sábado, la última reservada a las grandes figuras de la actual escena de la moda española. Una cuestión que respondía más a la constatada trayectoria de la firma, y de Custo Dalmau como figura más representativa de su equipo creativo, que a los propios gustos e intenciones del mismo equipo, cuyos miembros hay que reconocer que se sienten completamente cómodos desde su posición de “outsiders” de la moda, más enfocados y preocupados a tratar de armar una propuesta de valor, y de presentarla a quienes la tienen que presentar, como merece, que en buscar contar con una presencia “noble” dentro del calendario oficial de ninguna semana de la moda. Un perfil como marca “contestataria” que forma parte del mismo ADN de Custo Barcelona desde su misma fundación, que es el mismo que les condujo a revolucionar la industria dotando de un valor, hasta entonces desaprovechado, a la camiseta como prenda de indumentaria; y perfil del que ahora vuelven a hacer gala como casa de moda que se sitúa al margen del calendario oficial de esta nueva edición de la Semana de la Moda de Milán. Acción que no ha impedido el que la casa, a diferencia de lo acontecido en Madrid, se hayan decidido en esta ocasión por presentar la segunda parte, con nuevas creaciones, de esta colección “We Are Custo”, para la próxima temporada Otoño/Invierno de 2024/2025.
Entre tonalidades metálicas y combinaciones “imposibles” de tejidos
Bajo el título, en respuesta, de “We Are Custo - Part Two”, Custo Barcelona aterrizaba de este modo a Milán este mismo martes, 20 de febrero de 2024, para celebrar el arranque de su Semana de la Moda, mediante la realización de un desfile de presentación de una última propuesta, desde la que volvieron a ponerse de manifiesto los códigos y el ADN más genuino de la marca española. Un lenguaje y un estilo cuya piedra angular pasa por incorporar y por tratar como un elemento propio de la firma la misma renovación, continua y constante, de su universo creativo y formal. Característica que, materializada y llevada al terreno cromático, al de los patrones y al de la materialidad, es el que termina por conformar el carácter “avant-garde” por el que viene siendo reconocida la casa.
Desde estas líneas generales de lo que se reflejan como eje central de sus metodologías de trabajo, en lo que respecta ya a esta propuesta concreta, la colección, completando las prendas del “capítulo primero”, presentado en Nueva York y en Madrid, se ha descubierto sobre la pasarela armada sobre una colorida y “electrizante” paleta cromática, en la que azules aguamarina, Klein y agua, daban dando paso a corales, rojos, violetas y verdes, para ir terminando en distintos acentos de blancos, grises y negros. Una horquilla cromática de entre la cual volvieron a tomar un destacado protagonismo las terminaciones metálicas, en acabados bronce, verde esmeralda, oro y plata. Tonalidades que toman cuerpo, al abrazo de esta colección, a partir del uso y la combinación de distintos materiales, en unos igualmente diferentes acabados y estampados, de entre los que se destacan los usos de fibras técnicas, junto a fibras naturales de tejidos como la seda y el algodón.
Con esta suma de elementos como “arcilla” desde la que pasar a modelar la propuesta, y siguiendo con la metodología que rige para ello en el interior del departamento creativo de Custo Barcelona, y que pasa por un proceso que puede resumirse a bien en tres etapas —color, materialidad y diseño de prendas—, pero que avanza para después volver sobre sus mismos pasos, es como nos terminamos ya encontrando con las prendas de esta colección presentada en Milán. Una propuesta de entre la cual, como piezas clave, se destacan como protagonistas los vestidos, tanto largos como cortos, los conjuntos de ascendencia deportiva e inspiración “chándal”, y las chaquetas. Unas prendas de abrigo que son tratadas como auténticas piezas de orfebrería, y que encontraremos construidas a partir de una tan rica como variada e impactante selección de materiales.
La colección, analizan desde la misma dirección de Custo Barcelona, “se sumerge en el lenguaje de moda avanzado, con piezas dirigidas a mujeres que buscan expresar seguridad e individualidad”. Para ello, la paleta de colores escogida se muestra “vibrantes”, mientras que “el grafismo refuerzan la identidad distintiva de la marca”, dando forma a una sucesión de vestidos que “toman protagonismo” en el conjunto de la colección, “junto a conjuntos sport, abrigos y chaquetas de vanguardia que representan el ADN de la firma”. Unas prendas que “destacan”, apostillan, “por la fusión de tejidos naturales como la seda y el algodón”, en combinación “con fibras tecnológicas, dando lugar a piezas” como resultado descaradamente “innovadoras”.
¿Milán o París?
Para el desfile de presentación en Milán, la firma barcelonesa ha recurrido a una selección multiétnica de modelos, de tallaje real, de entre las que se ha destacado la participación en el desfile de la modelo cordobesa Agueda López, conocida además de por sus trabajos como modelo y presentadora, por ser, desde septiembre de 2014, la segunda mujer del reconocido cantante y bailarín puertorriqueño Luis Fonsi. Una presencia que ya se encargaba de poner por sí misma en evidencia la decidida apuesta que desde Custo Barcelona se han decidido a realizar desde la capital de la Lombardía, para la presentación de esta segunda parte de su colección para la próxima temporada Otoño/Invierno FW24.
Terminando justamente de completar esa estrategia a la que apuntábamos al comienzo de estas líneas, y que parte de entender, como entienden en Custo Barcelona, que la moda es moda, y también es un negocio que debe funcionar para poder seguir alimentando la rueda de la creación, es como no podemos dejar de señalar el que el desembarco de la firma en Milán, se ha llevado a cabo al tiempo que están teniendo lugar las últimas ediciones de los salones especializados Micam, Mipel, The One Milano, Milano Fashion&Jewels y Lineapelle Milan. Ferias que, junto a las celebraciones de la nueva edición de la Milan Fashion Week, son las que están haciendo de Milán la capital indiscutible mundial de la moda durante estas jornadas, reuniendo en la capital de la Lombardía a miles de prescriptores y compradores, de las principales compañías y multinacionales de la industria, procedentes de todos los rincones del mundo. Un público que es al que en buena parte, cuando no en su práctica totalidad, ha ido dirigida esta presentación, desde la que Custo Barcelona vuelve a salir a tomar el pulso al poder de convocatoria de la escena de la moda italiana. País desde el que justamente estaba previsto que la firma española terminase de asentar su estrategia de internacionalización y su relanzamiento, de la mano de un acuerdo con la compañía Velmar, propiedad del grupo internacional Aeffe (Moschino), formalizado en julio de 2019, que no obstante terminaba por convertirse en papel mojada a raíz de la irrupción de la pandemia por coronavirus.
A pesar de que no obstante aquel acuerdo no llegase a poder dar sus frutos, queda claro con esta presentación en Milán que Custo Barcelona sigue fiel a su naturaleza como proyecto internacional, y que en consecuencia, sigue mostrando sus propuestas a un público internacional, y a unos compradores internacionales. Cuestión sobre la cual también resulta de interés señalar cómo, a pesar de hacerlo desde su naturaleza de “outsiders” de la moda al margen del calendario oficial de Milan Fashion Week, Custo es la única firma española, que nos consta, que se ha decidido a presentar su última colección de temporada en Milán. Siendo esta una estrategia que en su mayor parte las firmas españolas, las firmas españolas de autor, se deciden a realizar, apostando principalmente para ello por París. Una decisión que contrasta frente a la estrategia escogida por Custo Barcelona de hacer de Italia, y de Milán, su principal plataforma en Europa desde la que impulsarse a nivel internacional, y que justamente es la misma por la que en su mayor parte apuestan las compañías españolas del sector. Empresas que, como bien se pone de manifiesto a cada nueva edición de Pitti Uomo y de los salones Micam o Lineapelle, salen en tromba a exhibir sus últimas colecciones desde las ferias italianas, a las que mantienen como sus principales citas internacionales. Una clarísima diferenciación de este modo entre las estrategias de las empresas del sector, apostando por Milán, y las de las firmas de autor nacionales —a excepción de Custo Barcelona—, en su apuesta por París, que nos lleva a preguntarnos si no estarán precisamente fallando aquí las casas de moda de autor nacionales en sus estrategias de internacionalización, al tratar de querer abrazarse a los laureles de París, antes de buscar el éxito comercial desde los ambientes de Milán.