Tod’s se despide de la cotización con una caída en ventas del -6,7 por ciento
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Madrid – Completada ya su exclusión de la Bolsa de Valores de Milán como resultado de la OPA, voluntaria, presentada por L Catterton —con el beneplácito de los hermanos Della Valle—, el Grupo Tod’s se ha despedido de sus obligaciones como empresa cotizada presentando las cuentas del primer trimestre de su nuevo ejercicio fiscal de 2024. Periodo de tres meses que la compañía cerró, el pasado 31 de marzo, con una caída en ventas del -6,7 por ciento.
En base de este modo a los estados financieros hechos públicos por la dirección del grupo multinacional italiano, y en lo que es más que probable que pase a ser una información que se trate de manera confidencial y menos pública una vez que el Grupo Tod’s ha pasado a ser ya nuevamente una empresa privada y no cotizada, y por extensión ajena a las obligaciones que el regulador italiano impone a toda compañía cuyos títulos se mantienen negociando sobre el parqué, la compañía cerró el primer trimestre de su nuevo ejercicio fiscal de 2024 registrando unas ventas totales por valor de 252,3 millones de euros. Cantidad que supone una caída de un -6,7 por ciento frente a los 270,5 millones de euros facturados durante el mismo periodo de hace un año, y en lo que deja a la compañía manteniéndose no obstante un +16,58 por ciento por encima de los 216,4 millones de euros facturados durante el mismo periodo del 1 de enero al 31 de marzo de 2019, último ejercicio que llegó a completarse al margen de los efectos de la pandemia por coronavirus.
“Con el éxito de la oferta pública de adquisición, el Grupo Tod's sale de la bolsa”, no ha dudado en querer salir a celebrar Diego Della Valle, presidente y director ejecutivo, a demás de principal accionista mayoritario, de la multinacional italiana, a lo largo de unas declaraciones difundidas por parte de su misma dirección. “Tomamos esta decisión con el claro objetivo de poder desarrollar todo el potencial de nuestras marcas individuales, realizando todas aquellas inversiones necesarias” para tal fin, pero desde “el cronograma que consideramos más adecuado”, y no el que terminan por imponer los mercados, defiende por enésima vez Della Valle. Desde ese propósito, “contamos con una gran oportunidad de crecimiento y trataremos de aprovecharla, operando desde una perspectiva asentada sobre el largo plazo”. “Hemos decidido compartir esta decisión estratégica con dos socios globales, que tienen una gran experiencia en nuestro sector: L Catterton y LVMH”, empresas “con quienes compartimos nuestra salida a bolsa hace más de 20 años, y que sin duda serán unos valiosos compañeros de viaje”, valora el principal accionista de Tod’s, durante esta nueva etapa a la que se abre ahora la compañía como, nuevamente, compañía no cotizada. Una condición de la que ahora Tod’s se despide, no sin antes, apostilla Della Valle, “agradecer tanto a Borsa Italiana como a Consob (la Comisión Italiana de Bolsa y Mercados de Valores) la disponibilidad y la colaboración mostrada durante estos años de trabajo juntos”.
Con las colecciones de moda en un alza del +4 por ciento
Entrando a desgranar, en mayor detalle, este último balance trimestral presentado por el Grupo Tod’s, por líneas de negocio, la firma Tod’s se mantiene como la principal fuente de ingresos de la multinacional italiana, registrando unas ventas totales trimestrales por valor de 121,7 millones de euros (-6,6 por ciento). Facturación que se ha terminado de completar con la registrada por Hogan, por 61,5 millones (+8,2 por ciento); por Roger Vivier, por 52,7 millones de euros (-23,2 por ciento); y por Fay, por 16 millones de euros (+12,7 por ciento). Una evolución desigual que, defienden desde la dirección de Tod’s, no deja de ser reflejo de la diversidad geográfica sobre la que se desarrolla su cartera de marcas propias, y en lo que ha terminado reflejando una mayor caída de Tod’s y de Roger Vivier como consecuencia de su mayor exposición al mercado chino, mientras que el conjunto de las marcas, puntualizan, habrían mostrado unos sólidos desempeños en los mercados de Europa y de América.
En cuanto a la evolución experimentada por líneas de producto, calzado se mantuvo como la principal categoría de artículos del grupo, con ventas por 189,7 millones de euros (-8,3 por ciento). Seguida en esta relación por el peso de los accesorios y de los artículos en piel, por 41,6 millones de euros (-3,7 por ciento); y por las ventas de las colecciones de moda y de prendas de vestir, categoría que logra imprimir uno de los pocos datos positivos de la trayectoria de Tod’s durante este primer trimestre, firmando una evolución al alza hasta los 20,6 millones de euros (+4 por ciento).
Con respecto a las ventas, por canales de distribución, ambos se mantienen a la baja, con un canal minorista y operado de manera directa de la compañía que se vio especialmente afectado por la debilidad del mercado chino, registrado una caída total de las ventas, en físico y en online, hasta los 175,9 millones de euros (-8,9 por ciento). Una facturación que se terminó de completar con la registrada dentro del canal mayorista y de las tiendas operadas por terceros en régimen de franquicias, con unas ventas ya en mínimos por 76,4 millones de euros (-1,4 por ciento).
Mientras tanto, y por mercados, destaca cierto es el “equilibrado” peso que mantiene la compañía repartido por las principales regiones en las que opera, y de entre las que China se mantiene como su principal fuente de ingresos, a pesar de unas ventas que se han hundido hasta los 67,3 millones de euros (-24 por ciento). Un registro seguido en esta relación por las ventas registradas en Italia, por 59,6 millones de euros (-0,6 por ciento); en el conjunto del resto de mercados de Europa, por 60,2 millones de euros (+5,1 por ciento); en la región de las Américas, donde se han disparado hasta los 20 millones de euros (+19,6 por ciento); y en el resto de mercados menores en los que opera el Grupo Tod’s, y que han contribuido con unos 45,2 millones de euros a las cuentas del grupo (-5,8 por ciento).
Una empresa privada, en manos de los hermanos Della Valle
De cara a lo que resta de ejercicio, desde Tod’s no se han abierto a compartir ninguna clase de estimación ni perspectiva, haciendo con ello valer más que nunca su nueva condición como empresa no cotizada. Una condición en la que se estrenaba nuevamente a fecha del pasado 8 de marzo, una vez ya completada la fase establecida para la culminación de la OPA voluntaria lanzada por L Catterton a mediados del pasado mes de febrero de 2024. Una operación que finalmente se ha completado con el apoyo del 96,885 por ciento del capital social del Grupo Tod’s, porcentaje alcanzado tras la adquisición por parte de L Catterton, a través de su compañía instrumental Crown Bidco, de un total de 5 027 792 acciones del Grupo Tod’s, representativas del 15,193 por ciento de su capital social, en el mercado, y de otro total de otras 5 854 561 acciones, representativas del 17,691 por ciento del capital de Tod’s, en el marco de la OPA. Cantidades y porcentajes que, sumados a las acciones en manos de los hermanos Della Valle, y al 10 por ciento del capital de la empresa en manos de LVMH a través de su compañía filial Delphine S.A.S, han llevado a que la OPA se haya podido completar con el apoyo del 96,885 por ciento de todo el capital social de Tod’s.
Una vez completada ya la operación, con el abono de los títulos y la compra del resto de las acciones residuales, por el 3,115 por ciento de su capital social, que quedaban en manos de otros inversores que no habían participado de la OPA, el Grupo Tod’s seguirá en manos de unos hermanos Diego y Andrea Della Valle que, siguiendo con lo ya adelantado, se seguirán manteniendo como los principales accionistas y propietarios de la compañía, conservando el 54 por ciento de todo su capital social. Mientras que el resto del capital de la empresa pasa a quedar bajo el control de L Catterton, a través de Crown Bidco, nueva propietaria del 36 por ciento del capital del Grupo Tod’s, y de LVMH, a través en su caso de una Delphine S.A.S, que mantiene inalterado el porcentaje del 10 por ciento del capital social que ya contaba la compañía antes de la presentación de la OPA, voluntaria, lanzada por L Catterton, con el único objetivo de, siguiendo con las aspiraciones de los hermanos Della Valle, forzar la exclusión de la cotización del Grupo Tod’s.