Nike mantiene plano su beneficio pese a elevar ventas en un +17 por ciento

La multinacional estadounidense Nike, compañía líder, a escala global, del sector de la moda y del equipamiento deportivo desde su posición como matriz de las marcas Nike y Converse, hacía públicas a última hora de este 20 de diciembre las cuentas del segundo trimestre de su actual ejercicio fiscal de 2022-2023. Periodo finalizado el pasado 30 de noviembre, que la compañía logró completar, en línea con lo que viene siendo el comportamiento habitual ofrecido por la mayor parte de las corporaciones multinacionales como respuesta a los efectos de las tensiones inflacionistas que vienen experimentándose a lo largo de todo este último año natural, reflejando un considerable aumento de sus niveles de facturación. Crecimiento que no obstante no ha llegado acompañado de un mismo incremento de su partida de beneficios, afectada tanto por el aumento de los costes operativos de la compañía como por sus elevados niveles de inventario.

Entrando a poner ya en valor las cuentas de la multinacional, desde Nike informan de un segundo trimestre del año durante el que la compañía llegó a registrar unas ventas totales por valor de 13.315 millones de dólares, unos 12.544 millones de euros al cambio actual. Una cifra que supone un aumento de un +17,24 por ciento frente a los 11.357 millones de dólares de facturación generados durante el mismo periodo de hace un año; así como de un +18,43 por ciento con respecto a los 11.243 millones obtenidos durante el mismo periodo del disruptivo ejercicio de 2020, y de un +28,95 por ciento con respecto a los 10.326 millones obtenido durante el mismo segundo trimestre, cerrado a fecha del 30 de noviembre de 2019, último año que llegó a completarse al margen de los efectos de la pandemia.

En línea no obstante con lo ya indicado, a pesar de esta sostenida tendencia hacia el crecimiento y al aumento de sus niveles de facturación, la multinacional deportiva ha cerrado este segundo trimestre de ejercicio recogiendo un beneficio neto por valor de 1.331 millones de dólares, unos 1.253,94 millones de euros al cambio actual. Cantidad que por su parte supone una caída “plana” de un -0,45 por ciento frente a los 1.337 millones de dólares de beneficio recogidos hace un año; pero manteniéndose no obstante sólidamente un +6,39 por ciento por delante de los 1.251 millones de beneficios de 2020, así como en un +19,37 por ciento por encima de los 1.115 millones de dólares de beneficios del mismo periodo de 2019.

“Los resultados trimestrales de Nike son un testimonio de nuestra profunda conexión con los consumidores”, no dudaba en remarcar John Donahoe, presidente y director ejecutivo de Nike, a lo largo de unas declaraciones hechas públicas por la propia multinacional deportiva. “Nuestro crecimiento ha sido amplio y se ha visto impulsado por el crecimiento de nuestro liderazgo digital y por la fortaleza de la marca”, destaca Donahoe. Siendo así, apostilla, el que “estos resultados nos dan confianza para cumplir con nuestros objetivos anuales, en la medida que nuestras ventajas competitivas continúan alimentando nuestro impulso”.

Caída de las ventas en China

Analizando el comportamiento experimentando por la multinacional, por marcas comerciales, Nike volvió nuevamente a generar el grueso del volumen de negocio total de la multinacional, levantando ventas por valor de 12.724 millones de dólares (+18 por ciento con respecto a los niveles de hace un año). Una cantidad que, por mercados, fue principalmente obtenida gracias a su buen rendimiento en Norteamérica, con unas ventas por valor de 5.830 millones de dólares (+30 por ciento); mientras que en la región de EMEA se conseguía unas cifras de facturación por 3.489 millones de dólares (+11 por ciento); en la Gran China de 1.788 millones (-3 por ciento); y en Asia-Pacífico y Latinoamérica unas ventas totales por valor de 1.599 millones de dólares (+19 por ciento).

Completando estas cantidades, pero ya sin un desglose por mercados, Converse terminó por su parte participando de las cuentas de la multinacional aportando un total, a escala global, de 586 millones de dólares en ventas (+5 por ciento).

Más rebajas para dar salida a un inventario que se mantiene disparado en un +43 por ciento

En cuanto a los aspectos ya menos positivos de sus cuentas, desde Nike informan de una caída de 300 puntos básicos de su margen bruto, hasta marcar un 42,9 por ciento. Un ajuste provocado principalmente como consecuencia de las mayores rebajas que la compañía ha debido de realizar para liquidar parte de su elevado nivel de inventario, principalmente en los mercados de América del Norte; así como del aumento generalizado de unos costes operativos que se han terminado disparando un +10 por ciento durante este último trimestre, hasta los 4.124 millones de dólares. Un total al que 1.102 millones (+8 por ciento) corresponden los gastos destinados a acciones promocionales y de activación de la demanda; mientras que los 3.022 millones de dólares restantes (+10 por ciento), al aumento de sus costes operativos.

En cuanto a la controversia que rodea a los elevados niveles de inventario de la multinacional, al cierre del primer trimestre desde Nike anunciaban que la compañía, a fecha del 31 de agosto, contaba con un inventario disparado en un +44 por ciento por encima del que reunía la compañía un año anterior, por un valor de 9.700 millones de dólares. Siendo estos unos niveles que, a fecha del 30 de noviembre de 2022, la compañía solamente había logrado en parte compensar, en lo que tratan de justificar como el resultado de una decisión estratégica adoptada con el objetivo de evitar costes más altos de producción e interrupciones dentro de la cadena de suministros, como las registradas hace un año, en lo que no obstante ha terminado dejado a la multinacional contando con un inventario elevado en un +43 por ciento, por un valor de 9.300 millones de dólares.

“La demanda de los consumidores por las marcas del portafolio de Nike ha continuado generando un fuerte impulso comercial en mitad de un entorno altamente dinámico”, defiende Matthew Friend, vicepresidente ejecutivo y director financiero de la multinacional deportiva, desde una perspectiva ciertamente optimista hacia la valoración de las estrategias que vienen tratando de implementar desde Nike para hacer frente a las tensiones de los mercados. A este respecto, “nos mantenemos enfocados en aquello que podemos controlar”, apunta Friend, y “estamos en camino de cumplir con nuestros objetivos operativos y financieros, asentando las bases para un crecimiento sostenible y rentable”.