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Marypaz se acerca a la liquidación y presenta un ERE para el cierre de sus 54 tiendas y el despido de 276 trabajadores

Por Jaime Martinez

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Tienda de calzados Marypaz en el centro comercial Nevada Shopping de Armilla, Granada (España). Credits: Nevada Shopping.

Madrid – Nuevo y turbulento episodio el que vuelve a afectar a la otrora icónica y celebrada cadena de zapaterías sevillana “low cost” Marypaz, en concurso de acreedores desde el pasado mes de mayo. Y es que siguiendo con ese mismo procedimiento, sus administradores concursales acaban de solicitar la apertura de un expediente de regulación de empleo (ERE) para el cierre de todas sus tiendas y el despido de sus 276 trabajadores.

Fundada en Sevilla hacia el año 1972 por el empresario sevillano Ángel Aguaded y tremendamente popular a comienzos y hasta mediados de la década de 2010, fechas para las que se estima que Marypaz alcanzó a sumar una red comercial integrada por más de 400 tiendas, con puntos de venta en mercados como Francia, Guatemala, República Dominicana, Egipto o Catar, apoyados por una fuerza laboral de unos 1 500 trabajadores, y desde los que alcanzaban a facturar cerca de unos 140 millones de euros anuales. Indicadores todos estos que fueron desvaneciéndose hasta mostrarse como un lejano espejismo en menos de cinco años, después de que un cúmulo de malas decisiones terminasen conduciendo a la compañía a tener que acogerse, por primera vez, a concurso de acreedores, en 2016. Momento en el que podemos situar el comienzo del lánguido proceso de desintegración de la en otros tiempos envidiada cadena de zapaterías, desde un primer amago de liquidación que no obstante lograba salvarse con la entrada en la compañía de Black Toro Capital. Fondo de inversión del que actualmente ya nada se sabe, más allá de contar con una página online fuera de servicio, y que por entonces irrumpía tomando una participación mayoritaria del 60 por ciento del capital de Marypaz, con la inversión de 10 millones de euros y la promesa de invertir otros 20, para financiar las operaciones y el crecimiento de la cadena, mientras los Aguaded lograban conservar una participación minoritaria y las riendas de la dirección para la gestión del día a día de Marypaz.

A pesar de los buenos propósitos con los que se lograba sellar ese acuerdo con Black Toro, siguiendo con la estrategia de desinversiones en moda-retail que el fondo trataba de sacar adelante hacia finales de 2019, desde el mismo buscaron formalizar un acuerdo para la venta de su participación mayoritaria en Marypaz. Unas conversaciones para las que se barajaron nombres como los del fondo de inversión australiano Macquarie como el potencial nuevo propietario de la cadena, pero que no obstante no terminaron de llegar a buen puerto. Una circunstancia que, sumándose a las igualmente infructuosas negociaciones que el fondo había tratado de dirigir para acometer una reestructuración de la deuda de la cadena de zapaterías, volvía a dejar a Marypaz en declaración de concurso de acreedores a fecha de octubre de 2019. Un proceso el de entonces desde el que igualmente Marypaz, y por segunda vez, volvía a esquivar su liquidación, después de que desde el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Sevilla terminasen por acordar su venta, bajo el mismo concurso, a favor de la sociedad Crocea Mors, dirigida por el directivo Álvaro Pellón, pero realmente apoyada por Juan y Carlos Aguaded, expresidente y director ejecutivo, respectivamente, de Marypaz, que volvía a pasar así a manos, en su totalidad, de la familia Aguaded. Una realidad que estaría a punto de volver a cambiar, después de que nuevamente la cadena haya pasado a encontrarse bajo administración judicial, después de que Crocea Mors decidiese acogerse a la figura del concurso de acreedores el pasado mes de mayo.

Con una potencial oferta sobre la mesa para salvar (una vez más) a Marypaz

Poniendo ya el foco de atención sobre este último concurso de acreedores que vuelve a amenazar el presente, y futuro, de Marypaz, siguiendo con el obligado procedimiento dirigido a gestionar la situación de insolvencia a la que ha vuelto a incurrir la cadena de zapaterías, han sido sus administradores concursales los que han solicitado la ejecución de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) concursal. Procedimiento que ya han comunicado a la representación legal de los trabajadores de la cadena, y que afecta a un total de 54 tiendas y 276 trabajadores. Número de establecimientos que se estima que terminarán cerrando sus puertas, y número de empleados que llegarán a perder su puesto de trabajo, una vez que sea autorizada la aplicación del ERE, y de que Marypaz no vuelva a lograr salvarse, una vez más, en tiempo de descuento, con la entrada de un nuevo socio inversor. Cuestión para la cual ya se ha señalado a que sí existe una propuesta sobre la mesa de un potencial comprador que permitiría mantener, sino todo, sí una parte de los empleos que, de caso contrario, se van a terminar de ver afectados por este ERE concursal.

Según a este mismo respecto se han encargado de detallar desde la organización sindical de Comisiones Obreras, la administración concursal de Crocea Mors ya ha facilitado a los representantes de los trabajadores toda la documentación concerniente a este ERE concursal. Documentación que ya se encuentran analizando desde el sindicato, y desde la que se plantearía como principal motivo para la solicitud del ERE el “deterioro en la demanda de sus productos y el aumento de pérdidas económicas”, que justamente han terminado a Crocea Mors a acogerse a la figura del concurso de acreedores. Unas causas que sindicato y administradores concursales se van a encargar de analizar en mayor detalle a lo largo de la reunión que habían programado para este mismo 8 de agosto, encuentro desde el que es de esperar que desde la administración concursal ofrezcan mayores detalles a los trabajadores sobre esa potencial oferta que se habría presentado para la adquisición de Marypaz, y el mantenimiento de parte de los puestos de trabajo.

“La administración concursal ha comunicado a la plantilla la intención de acometer un procedimiento de despido colectivo en la empresa Crocea Mors”, mediante un “ERE concursal” que “afecta a un total de 54 tiendas —incluida la tienda online— y 276 personas”, han notificado, a modo de síntesis, desde CCOO a través de un comunicado. Como única alternativa a este procedimiento, añade, y “por el momento, se ha recibido una oferta por parte de un comprador que posibilitaría el mantenimiento del empleo de parte de la plantilla de Calzados Marypaz”. Una oferta sobre la que no obstante desde CCOO han buscado mantenerse en “prudencia para preservar la negociación del proceso”, pero para la que la tiempo desde el sindicado han querido manifestar “su preocupación”, para en lo que de manera más concreta pueda afectar a una plantilla que ha debido de saber hacer frente hasta a “tres concursos de acreedores y tres expedientes de regulación de empleo desde 2020”, con todo lo que ello significa para una persona trabajadora; motivos por los que, apostillan, “mantendremos nuestra atención a todos los pormenores” de las negociaciones que puedan llegar a darse, “para garantizar el respeto a todos los derechos de las personas trabajadoras”.

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