LVMH vuelve a contraer ventas y hunde sus beneficios un -15 por ciento
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Madrid – El holding multinacional francés especializado en el sector del lujo LVMH ha terminado de hacer públicas sus cuentas concernientes al conjunto de todo el primer semestre de su nuevo año fiscal de 2024. Periodo finalizado a fecha del pasado 30 de junio, que la compañía propietaria de casas de moda de la talla de Louis Vuitton, Christian Dior o Loewe alcanzó a completar registrando una leve caída de facturación, que además llegó acompañada de un hundimiento de sus beneficios de un -15 por ciento, frente a las cuentas de hace un año.
En base así pues a los estados financieros compartidos por la dirección del holding francés, desde LVMH han informado de una primera mitad de ejercicio que la multinacional cerró registrando ventas por valor de 41 677 millones de euros. Una cantidad que supone una caída de un -1,33 por ciento frente a los 42 240 millones de euros facturados durante el mismo periodo de hace un año, y en lo que termina dejando a la compañía aún con todas creciendo hasta un +66,16 por ciento frente a los 25 082 millones de euros que llegó a facturar durante el primer semestre de 2019; el último año como ya sabemos en completarse al margen de los efectos de la pandemia por coronavirus.
Para terminar de poner en contexto este desempeño, los registros de las ventas de este nuevo ejercicio fiscal de 2024 de LVMH llegaron precedidos de una facturación durante el primer trimestre del año de 20 694 millones de euros (-1,62 por ciento). Una leve caída de las ventas, a la que se ha sumado un nuevo ajuste, a la baja, durante el segundo trimestre del ejercicio, que desde la multinacional francesa del lujo han terminado por cerrar con ventas por 20 983 millones de euros (-1,04 por ciento). Una leve caída, además algo más atenuada, que no obstante termina de llegar para cuasi constatar el agotamiento que actualmente mostraría el modelo, presente en estos momentos, sobre el que se desempaña la compañía francesa, desde donde ya se estarían preparando para tratar de renovar y relanzar algunas de sus principales marcas en cartera.
Lejos de despejar estas dudas, y llegando más bien para terminar de refutarlas, en términos ya de rentabilidad, desde la dirección de LVMH han informado de una primera mitad del ejercicio que la compañía ha completado recogiendo un beneficio neto total por valor de 7 564 millones de euros. Una cifra que refleja una caída de un -15 por ciento frente al beneficio neto de 8 902 millones de euros recogido durante el mismo periodo de hace un año, pero aún así un +109,81 por ciento más que con respecto a los 3 605 millones de euros de beneficio neto que la compañía llegó a generar durante la primera mitad de su año fiscal de 2019.
“Los resultados del primer semestre del año reflejan la notable resiliencia de LVMH, respaldada por la fortaleza de sus ‘maisons’ y por la capacidad de respuesta de sus equipos en un clima generalizado de incertidumbre económica y geopolítica”, no ha dudado en querer salir a defender Bernard Arnault, presidente y director ejecutivo de LVMH, a lo largo de unas declaraciones hechas públicas por parte de la dirección de la misma compañía francesa. “Impulsados como siempre por nuestro doble enfoque hacia la deseabilidad y la responsabilidad”, más allá de las cuentas, “hemos seguido trabajando para alcanzar los objetivos establecidos en nuestros programas de acción ambiental y social”, destaca Arnault. Todo ello además, “en un año marcado por nuestra asociación con los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024”, para los que “nos sentimos honrados de compartir nuestra creatividad, excelente artesanía y profundo compromiso con la sociedad, para hacer de este evento un éxito rotundo y una oportunidad para que Francia brille en el escenario mundial”.
Con una caída de las ventas en Asia de un -12,58 por ciento
Entrando a desgranar en detalle, brevemente, las cuentas que ha dejado tras de sí esta primera mitad de ejercicio para LVMH, por líneas de negocio, las empresas de moda y artículos de marroquinería volvieron a suponer la principal fuente de ingresos de la compañía, registrando aún así una ligera caída hasta los 20 771 millones de euros (-1,84 por ciento). Mientras que, y siguiendo con la relación de mayor a menor volumen de facturación, los ingresos aportados por los negocios de cadenas minoristas de la compañía, como Sephora o las galerías parisinas Le Bon Marché, crecieron ligeramente hasta los 8 632 millones de euros (+3 por ciento); los de las casas de alta joyería y alta relojería del grupo cayeron hasta los 5 150 millones (-5 por ciento); los de las líneas de perfumería y cosmética crecieron hasta los 4 136 millones de euros (+3 por ciento); y los ingresos de las empresas de licores y de las bodegas del grupo cayeron hasta los 2 807 millones de euros (-12 por ciento).
Mientras tanto, por mercados, Asia sigue manteniéndose como la región en la que LVMH genera la mayor parte de sus ingresos, con unas ventas que en el conjunto de toda la región, con la exclusión de Japón, llegaron no obstante ha contraerse hasta los 12 367 millones de euros (-12,58 por ciento), mientras que en el mercado nipón repuntaron con fuerza hasta los 3 770 millones de euros (+27,53 por ciento). Siguiendo en esta relación, los Estados Unidos se mantienen como la segunda región más importante para la compañía por volumen de negocio, con unas ventas que han terminado por reducirse ligeramente hasta los 10 256 millones de euros (-0,6 por ciento); mientras que en Europa han cerrado al alza, con unas ventas en Francia, principal plaza europea de la compañía, que se han elevado hasta los 3 289 millones de euros (+3,42 por ciento), mientras que en el resto de los mercados europeos han terminado por totalizar en los 6 628 millones de euros (+1,64 por ciento). Concluyendo ya esta relación de ingresos con una partida sobre los otros mercados menores en los que opera igualmente LVMH, y en los que, en su conjunto, las ventas llegaron a registrar una leve alza para totalizar en los 5 366 millones de euros (+4,82 por ciento).
Avanzando “con confianza” hacia la segunda mitad de 2024
De cara a la segunda mitad de este nuevo año fiscal de 2024, como viene siendo de otro lado ya natural y constante entre las compañías del sector del lujo, desde la dirección de LVMH no han entrado a concretar cuáles son sus perspectivas y por dónde pasan sus estimaciones para lo que falta de ejercicio. Cuestión sobre la cual se han limitado a volver a señalar a las consabidas posiciones que defienden como base de su estrategia de crecimiento para el medio y largo plaza, y que pasan por potenciar la calidad de todas las operaciones que llevan a cabo, al tiempo que combinan esta con la creatividad “incomparable”, subrayan, de sus equipos. Puntales ambos que, defienden, volverán a servir para continuar reforzando la posición de la compañía dentro del sector del lujo, también en 2024.
“Si bien permanece alerta en el contexto actual, el grupo afronta la segunda mitad del año con confianza”, señalaba al respecto el mismo Bernard Arnault. Y es que para hacer frente a esa serie de incertidumbres y de turbulencias económicas y geopolíticas que están llenando de incertidumbre los mercados, y a los consumidores, el multinacional francesa como principal palanca, destacaba el presidente y director ejecutivo de LVMH en línea con lo ya señalado, “contará con la agilidad y el talento de sus equipos para fortalecer aún más su posición de liderazgo global en artículos de lujo en 2024”.