Los sindicatos advierten: “La huelga en el textil parece inevitable”

Madrid – Tras el final del periodo estival, se han terminado por retomar las negociaciones para el acuerdo de un nuevo Convenio Colectivo para los trabajadores de la industria del Textil y de la Confección. Unas conversaciones que no han terminado por avanzar ni un centímetro desde las posiciones enfrentadas que patronales y sindicatos ya mostrasen durante su última reunión, allanando así el camino hacia lo que los representantes de los trabajadores ya apuntan a que es una “inevitable” huelga de los trabajadores de la industria textil española.

Poniéndonos brevemente en situación, en el marco de las negociaciones para la redacción del nuevo Convenio General de la Industria Textil y de la Confección que se abrían a finales del pasado mes de febrero de 2024, con de un lado las principales asociaciones empresariales de la industria textil española, lideradas por el Consejo Intertextil Español (CIE) y por la Unión Nacional de Fabricantes de Alfombras y Moquetas, con un 50 por ciento de la representación, y por la Federación Española de Empresarios de la Confección (FEDECON) y la Agrupación Española del Género de Punto (AEGP), con el 50 por ciento restante; y del otro con Comisiones Obreras (CCOO), con el 56,75 por ciento de la representatividad, la Unión General de Trabajadores (UGT), con el 38,37 por ciento, y la Confederación Intersindical Galega (CIG), con el 4,86 por ciento, en representación de los trabajadores, las partes se reunían en una última reunión de trabajo que tenía lugar el pasado 22 de julio. Un encuentro desde el que se entraba a valorar una última propuesta de redacción de convenio presentada por la parte patronal, que era tildada de “insuficiente” por los principales representantes de los trabajadores de la industria. Quedando para entonces pospuestas las negociaciones hasta mediados de este mes de septiembre, durante el que regresaban desde una séptima reunión de trabajo celebrada el pasado jueves, 19 de septiembre. Reunión que volvía a cerrarse sin los avances en materia salarial que reclaman los representantes de los trabajadores, desde donde ya han advertido a las organizaciones empresariales de que, a la vista del ritmo y de los nulos avances que se están consiguiendo, ya perciben como “inevitable” que termine por convocarse una huelga en todo el sector.

Durante la reunión, “lamentablemente, se puso de manifiesto que la huelga sectorial parece inevitable porque a las patronales le dan igual las condiciones en las que trabajan miles de personas”, esgrimen desde CCOO a través de un comunicado. Y es que, prosiguen, “se niegan a entender que la gente está harta, cansada y cabreada”, y que “no puede más”, como se demostró, alegan, durante “un momento de la reunión”, en la que “quienes representan al empresariado consideraron inasumible, imposible, inalcanzable e inabordable la propuesta sindical de unificar las diez tablas salariales”. Un requisito que defienden como esencia, pero ante el que “se negaron a entender que consensuar una tabla salarial permitirá subir los salarios de la gente y acabar con los salarios de miseria que se pagan en el sector, los peores de la industria española”. Siendo este un avance que igualmente “acabaría con la discriminación que sufren las mujeres, que cobran menos que los hombres aunque realizan trabajos de igual valor”.

“Ante esta situación, y para conseguir que la patronal cambie su rácana y cicatera posición”, censuraban desde CCOO, la organización sindical con mayor representatividad en estas negociaciones, el sindicato “ha decidido poner en marcha un calendario de asambleas y de concentraciones”. Unas acciones que vienen a seguir a aquella advertencia lanzada por la organización sindical antes del verano, y desde la que ya alertaban, y así lo subrayábamos desde FashionUnited, de que “el otoño sería caliente si las patronales no desbloqueaban la negociación colectiva”.

Frente a estas aguerridas posiciones, más conciliadora, al menos públicamente, se ha mostrado UGT. Segunda organización sindical con mayor representatividad en estas negociaciones, y desde la que en su caso si bien reconocían el que durante la reunión “se debatieron artículos específicos del actual convenio”, la misma se cerró “sin que pudieran desbloquearse algunos de los que desde UGT FICA consideramos de mayor importancia para las personas trabajadoras del sector, como son los incrementos salariales, la unificación en una sola tabla de los actuales diez anexos en cumplimiento del principio de ‘a igual trabajo, igual salario’, y el capítulo sobre absorción y compensación”. Frente a estos “escasos avances en la negociación”, apuntaban, por el momento desde la UGT todavía no ha querido hacer mención a huelgas y concentraciones, manteniéndose a la espera de una próxima reunión, “pendiente todavía de concretar”, y durante la que “confiamos en poder debatir a fondo el capítulo de las tablas salariales y en seguir avanzando hacia un convenio digno para el conjunto de las personas trabajadoras del sector”, para lo que, apuntaban, “es imprescindible un aumento considerable de los salarios, así como la reducción de la jornada laboral”.

Primeras concentraciones, para el 26 de septiembre

Como primera entrega de ese “otoño caliente” que preparan ya desde CCOO, y también desde UGT de manera coordinada, y solidaria, a lo largo de estas últimas jornadas del mes de septiembre ambos sindicatos están promoviendo diferentes asambleas, como parte de su campaña de movilizaciones encaminada a impulsar el desbloqueo de las negociaciones para Convenios Colectivos como el de la industria Textil y de la Confección, así como para el acuerdo sobre la reducción de la jornada laboral. Cuestiones ambas intrínsecamente ligadas, y para las que saldrán a movilizarse este próximo 26 de septiembre, con concentraciones organizadas frente a las sedes de las principales organizaciones empresariales de todo el país. Unos actos de protesta que, en lo que respecta a la industria textil, podrían terminar por convertirse en la antesala de esta huelga hacia la que no dudan ya en señalar desde CCOO.

Con respecto a estas mismas cuestiones, “no es de recibo que ahora la CEOE se ampare en que la reducción de jornada solo se tiene que canalizar a través de los convenios colectivos”, puesto que “no estamos hablando aquí de convenios colectivos, sino de modificar la ley”, declaraba Unai Sordo, actual Secretario General de CCOO en unas declaraciones realizadas antes de su participación en la asamblea organizada por el sindicato y por UGT en Zaragoza a finales de la pasada semana. El último de una serie de encuentros con los que, añadía, “CCOO y UGT queremos denunciar esta actitud de la patronal”, y desde los que “estamos planteando a las trabajadoras y trabajadores la necesidad de movilizarse para salir de esta situación de bloqueo”. Un “impasse” del que tratarán de salir convocando esta primera serie de movilizaciones y concentraciones por todo el país, para este próximo jueves 26 de septiembre, actos que no dudarán en intensificar y en “fortalecer”, con el objetivo de “exigir a CEOE que cambie su actitud en la mesa de negociación”, o bien “hacer un llamamiento al Gobierno” para “que si el acuerdo se ve inviable en la mesa de negociación, se atreva a presentar un proyecto de Ley”. Objetivo para el que “también nos vamos a dirigir al conjunto de los grupos políticos con presencia en el Parlamento para que tomen posición en este asunto”. Y es que, para lograr los fines que persiguen, concluye el dirigente sindical, “hay que politizar esta cuestión”, y “aquí se tiene que mojar todo el mundo”, porque “queremos saber qué opinan los grupos políticos sobre la reducción de la jornada laboral”.