Lanvin cierra ejercicio registrando “récord” de ventas

Madrid – La multinacional china del lujo el holding internacional Lanvin Group, compañía surgida a partir de la filial Fosun Fashion Group de Fosun International Limited y grupo matriz de una diversificada cartera de marcas compuesta por las firmas de lujo Lanvin, Wolfrod, Sergio Ross, St. John y la italiana Caruso, presentaba este 20 de abril las cuentas concernientes a su último ejercicio fiscal de 2022. Periodo anual completo finalizado a fecha del pasado 31 de diciembre de 2022, que la compañía llegó a cerrar registrando unos niveles “récord” de facturación, en lo que no obstante no sirvió para llevarla a terreno positivo en términos de beneficios. Un “punto de equilibrio” que desde su dirección confían en alcanzar para el ejercicio de 2024, a medida que siguen mejorando sus márgenes, y todo ello mientras continúan mejorando su red comercial y estudiando el mercado en busca de nuevas oportunidades con las que seguir ampliando y diversificando su portafolio de marcas en cartera.

Pasando a poner el foco de atención ya sobre las cuentas presentadas por la dirección de la multinacional china del lujo, cuyos títulos cotizan en la Bolsa de Valores de Nueva York desde el pasado mes de diciembre de 2022, desde el Grupo Lanvin informan de un último ejercicio de 2022 que la compañía ha alcanzando a cerrar generando unas ventas totales por valor de 422,31 millones de euros. Una cifra que supone un incremento de un +37,11 por ciento sobre los 308 millones que la compañía alcanzaba a facturar a lo largo de 2021; así como de un +89,72 por ciento frente a los 222,6 millones de euros en ventas que la compañía ingresaba a lo largo de todo el ejercicio de 2020.

Frente a esta tendencia al alza de su volumen de ingresos, en el terreno de la rentabilidad la compañía ha dado cuenta de una igualmente mejora de su beneficio bruto, que ha cerrado el ejercicio en los 237,94 millones de euros. Cantidad que representa por su parte un aumento de un +40 por ciento frente al beneficio bruto de 169,9 millones de 2021, así como de un +102 por ciento sobre los 117,39 millones de beneficio bruto de 2020. Un inmejorable comportamiento, que se ha visto replicado sobre un Ebitda Ajustado que logra situarse en un -17 por ciento, frente al -19 por ciento de 2021 y el -40 por ciento de 2020, pero aún así todo ello no obstante siendo insuficiente como para compensar los costes a los que ha debido hacer frente el grupo, que termina el año recogiendo unas pérdidas anuales por valor de -239,75 millones de euros. Cantidad un +213 por ciento superior a las pérdidas de -76,45 millones en las que incurría a lo largo de 2021, así como un +77,59 por ciento sobre las de -135 millones de euros con las que llegaba a cerrar el ejercicio de 2020.

“Estamos encantados con el progreso experimentado en 2022”, explica Joann Cheng, presidente y director ejecutivo del Grupo Lanvin, a lo largo de unas declaraciones hechas públicas por la dirección de la misma multinacional china. Durante este último ejercicio, “no solo logramos unos ingresos récord, también conseguimos grandes avances en la mejora de nuestra estructura de costes y en la optimización de nuestras operaciones”. A este respecto, “nuestro progresos en 2022 ha sentado una sólida para 2023, y, a pesar de las actuales condiciones macroeconómicas, seguimos mostrándonos optimistas para este nuevo ejercicio, especialmente con la continua reactivación de la Gran China”.

Con Wolfrod como primera marca, por volumen de ventas

Pasando a analizar brevemente el comportamiento experimentado por el Grupo a lo largo de este último ejercicio fiscal, por marcas comerciales, fue Wolford la que consiguió seguir posicionándose como la principal marca de la compañía, por volumen de negocio, reportando ventas por valor de 125,51 millones de euros (+15 por ciento frente al año anterior). Mientras que por su parte Lanvin, casa que sigue colocándose como la firma-imagen de la compañía, alcanzó a registrar unos ingresos totales de 119,84 millones de euros (+64 por ciento). Terminando de completar este registro, St. John, con unas ventas por 85,88 millones de euros (+17 por ciento); Sergio Rossi, con una facturación de 61,92 millones de euros (+116 por ciento); y terminando por una casa Caruso que contribuyó a las cuentas de la compañía con ventas totales por valor de 30,81 millones de euros (+37 por ciento).

De manera más detallada, y en lo que respecta a cada una de ellas, por mercados, Wolfrod generó 86,5 millones de euros en la región de Emea (+9 por ciento), con América del Norte sumando 31,53 millones (+44 por ciento) y con China retrocediendo hasta los 6,79 millones de euros de facturación (-7 por ciento). Mientras que por canales, las ventas directas al consumidor (DTC) ascendieron hasta los 90,4 millones de euros (+21 por ciento), y las mayoristas bajaron hasta los 34,42 millones de euros (-1 por ciento).

Para el caso de Lanvin, la casa francesa registró ventas de 61 millones de euros en Emea (+93 por ciento), con América del Norte aportando 28,52 millones (+79 por ciento) y con la Gran China, a pesar de las restricciones, sumando otros 25,74 millones de euros en ventas (+9 por ciento). Mientras que por canales mostró un comportamiento muy equilibrado, con unas ventas DTC que totalizaron en los 58,53 millones de euros (+27 por ciento), y unas ventas mayoristas que lo hicieron en los 51,89 millones de euros (+145 por ciento).

En cuanto a St.John, Sergio Rossi y Caruso, experimentaron todas ellas unos interesantes comportamientos por mercados, destacándose el extraordinario crecimiento de Sergio Rossi del +1.004 por ciento en América del Norte y del +135 por ciento en la Gran China, hasta los 1,18 y los 10,8 millones de euros, respectivamente. O la caída del -20 por ciento experimentando por St. John en la región de la Gran China, hasta los 5,15 millones de euros.

En busca de “nuevas oportunidades” de inversión y de compra

De cara a este nuevo ejercicio de 2023 en el que se encuentra ya embarcada la multinacional china, desde el Grupo Lanvin contemplan este 2023 como un ejercicio de “transición” que le permitirá seguir mejorando sus índices y parámetros, a medida que consiguen alcanzar su tan ansiado “punto de equilibrio” entre ventas y costes. Una meta que confían en poder alcanzar para el ejercicio de 2024, en un avance hacia la rentabilidad que llevarán cabo mientras siguen explorando el mercado en busca de nuevas oportunidades para seguir creciendo.

“A pesar de los continuos problemas macroeconómicos, el Grupo espera mantener el impulso de 2022 en 2023 y lograr una sólida mejora de sus márgenes a medida que avance el año”, entran a detallar desde le Grupo Lanvin. “Muchas de las iniciativas” estratégicas “iniciadas en 2022 se completarán en 2023, lo que dará como resultado una mejora continua de los márgenes”. “Además”, puntualizan, “se ha llevado a cabo una parte importante de la optimización de las tiendas, y, aunque el Grupo continuará mejorando su red minorista en 2023, creemos que se han colocado ya las bases para impulsar de manera correcta su huella comercial”, a medida que la compañía “sigue en su rumbo hacia la rentabilidad y hacia el punto de equilibrio, en el ejercicio de 2024”.

A este mismo respecto, “el Grupo se construye sobre un ecosistema colaborativo” de empresas, y “continúa trabajando con socios estratégicos para constituir su plataforma”. De modo que, respondiendo a esa naturaleza, “el Grupo continúa buscando y revisando posibles nuevas oportunidades de inversión y adquisición para mejorar aún más sus marcas y su plataforma” comercial.