Kering lanza un “profit warning” y advierte de una caída en Gucci del -20 por ciento de las ventas

Madrid – A las puertas de cerrar el primer trimestre de su nuevo ejercicio de 2024, desde la multinacional francesa del lujo el grupo Kering han querido salir a ofrecer una primera estimación de los datos preliminares recogidos hasta la fecha en este arranque de su nuevo año fiscal. Periodo para el que advierten a inversores y mercados de un desempeño en negativo del ritmo de la evolución de sus ventas, tendencia alimentada por un especialmente mal comportamiento de Gucci, la principal marca en cartera de la compañía.

En base de este modo a los resultados recogidos hasta el momento durante los primeros meses y semanas de este primer trimestre de su nuevo año fiscal de 2024, desde la dirección de Kering estiman llegar a cerrar el trimestre con una caída de aproximadamente un -10 por ciento de las ventas, en términos comparables, con respecto a las registradas durante el primer trimestre del pasado ejercicio, por valor de 5 077 millones de euros. Una caída que se enfrentará, de darse finalmente en ese grado, al estancamiento de las ventas experimentado durante el mismo periodo de hace un año, durante el que las ventas del conjunto de la multinacional lograron mantenerse en un ligero crecimiento en positivo del +2 por ciento, del +1 por ciento en términos comparables.

Como principal motivo de esta disminución de sus niveles de facturación prevista para este primer trimestre del año, cuentas que la compañía terminará de dar a conocer el próximo 23 de abril de 2024, desde Kering argumentan que se encontrará principalmente el pobre desempeño registrado por Gucci, y especialmente el protagonizado sobre la región de Asia-Pacífico. Un comportamiento que prevén que termine por materializarse en una caída interanual de las ventas trimestrales de Gucci de cerca de un -20 por ciento, en términos comparables, con respecto a los 2 616 millones de euros facturados por la firma durante el mismo periodo de hace un año. Momento en el que, marcando nuevamente el ritmo de crecimiento del conjunto de Kering, y en lo que hace que en estos momentos todavía sea buena la afirmación de que cuando Gucci pierde, Kering pierde, Gucci se mantuvo en plano, con ventas que únicamente alcanzaron a elevarse en un rango cercano a un +1 por ciento, tanto en términos totales como comparables.

A la espera de consolidar la nueva visión creativa de Gucci

Antes de terminar de atribuir el deterioro que se contempla que alcance a experimentar Gucci de sus niveles de facturación a la nueva identidad y al giro sobre su imaginario creativo que está tratando de impulsar y liderar Sabato De Sarno, nuevo director creativo de Gucci desde el pasado mes de enero de 2023, desde Kering señalan y ponen en su justo contexto el que las nuevas creaciones del diseñador napolitano a penas están comenzando a comercializarse. Cuestión que no evitaría el comenzar a apreciar una más que posible disminución de las ventas, tanto de Gucci como del resto de marcas de Kering, dentro del canal mayorista, caída que de otro lado podría seguir ajustándose a los planes de la compañía de seguir potenciando su red de venta directa, al tiempo que controla la exposición de sus marcas en cartera dentro del canal mayorista.

Sobre esta misma cuestión, puntualizan desde Kering que las primeras piezas de la colección de debut de De Sarno para Gucci, colección de mujer para la temporada Primavera/Verano de 2024 con la que, bajo el título de “Ancora”, debutaba como director creativo de la firma durante la Semana de la Moda de Milán del pasado septiembre de 2023, únicamente han empezado a estar disponibles en una lista de tiendas y puntos de venta seleccionados desde mediados del pasado mes de febrero. Siendo los suyos unos diseños que, defienden, están despertando un elevado interés, en lo que debería de este modo se deduce de terminar más pronto que tarde de corregir la nueva aguda tendencia hacia la baja que vienen protagonizando sus niveles de facturación más pronto que tarde, y en especial a medida que vaya avanzando el calendario y vayamos entrando en el segundo semestre de este ejercicio fiscal de 2024. Año para el que desde Kering ya advertían el pasado mes de febrero, coincidiendo con la presentación de sus cuentas anuales, que la multinacional iba a primar sus estrategias e inversiones a largo plazo, por encima del buen desempeño a corto plazo en términos de ventas y de rentabilidad.

“Los primeros productos, principalmente de prêt-à-porter, de la colección ‘Ancora’ se ofrecen en tiendas Gucci seleccionadas desde mediados de febrero”, apuntan a este respecto desde Kering. “La nueva colección, cuya disponibilidad se irá ampliando progresivamente en los próximos meses, está teniendo una acogida muy favorable”, defienden, en lo que sería de esperar, señalamos, que de ser así, termine por contribuir a corregir esta aguda caída de la facturación que prevén desde Kering para la casa en este arranque de ejercicio, a medida que la nueva visión de De Sarno para Gucci termina por llegar a las tiendas, y de generalizarse como la nueva estética de esta nueva Gucci.

A pesar de ello, se trata esta de una cuestión que no obstante no debe de dejar de alejarnos del deber de señalar, una vez más, que más allá de su obligación, para sus propios intereses, de seguir consolidando la “desabilidad” de Gucci, desde Kering también deben de seguir esforzándose y trabajando por compensar la extremadamente alta dependencia que el conjunto de toda la compañía sigue guardando hacia la icónica casa italiana. Y es que a pesar de contar en su cartera con firmas de la talla de Balenciaga, Yves Saint Laurent o Bottega Veneta, al cierre de su último ejercicio fiscal de 2023, Gucci alcanzó a representar con sus 9 873 millones de euros de facturación hasta el 50,4 por ciento del total de toda la facturación de Kering, que terminó el ejercicio con unas ventas por valor de 19 566 millones de euros.