Inditex vende su negocio en Rusia y abandona el país

Después de paralizar, y mantener desde entonces suspendidas, todas sus operaciones en suelo de la Federación Rusa desde el pasado 5 de marzo, y siguiendo con los crecientes rumores que apuntaban en esta misma dirección que comenzaban a circular a finales de la pasada semana, la multinacional de la moda española Inditex acaba de confirmar oficialmente que abandona definitivamente el mercado ruso. Punto que se alcanzará una vez que se termine formalizando el acuerdo inicial que la propietaria de cadenas tan conocidas como Zara, Massimo Dutti, Bershka, Pull&Mear, Oysho o Stradivarius, y multinacional líder del sector de la moda, a escala global, acaba de alcanzar con el grupo emiratí Daher.

Según recoge la nota remitida por la propia multinacional española a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, en función de los términos del acuerdo Inditex pasa a vender todo su negocio en Rusia a la compañía con sede en los Emiratos Árabes Unidos, en base a un acuerdo que sigue pendiente de las requeridas autorizaciones por parte de los órganos reguladores. Siendo esta la mejor salida que habría encontrado la multinacional española a la compleja situación en la que se encontraba tras su decisión de paralizar temporalmente sus operaciones en Rusia, como consecuencia del estallido de la guerra en Ucrania, y la que, valoran desde la dueña de Zara, la que permitirá garantizar el mantenimiento de la mayoría de los puestos de trabajo de sus equipos en suelo de la Federación. Un punto que habría sido el que más habría estado pesando en los órganos de dirección de Inditex a la hora de tomar la decisión de emprender su definitiva salida de Rusia, y para el que habrían encontrado ahora la solución en manos de un grupo Daher que pasará a partir de este momento a tomar el control de todo el negocio en Rusia de Inditex, incluida la mayoría de los locales comerciales que hasta ahora habían venido operando bajo alguna de las distintas marcas de la multinacional, en el que se mantenía hasta el pasado mes de marzo como su primer mayor mercado a nivel global, solamente por detrás del mercado español. Un país que Inditex pasará a abandonar ahora de manera definitiva, puntualizando a este respecto el que los locales que venía hasta ahora operando y que pasarán a manos de Daher, pasarán a albergar puntos de venta de productos totalmente ajenos a los confeccionados por las marcas del Grupo Inditex.

“Inditex ha alcanzado un acuerdo inicial para la venta de su negocio en la Federación Rusa al grupo Daher, que cuenta con participaciones relevantes en los sectores de la distribución e inmobiliario”, entran a explicar desde la multinacional española a través de su nota remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. “Los términos de esta operación, sujeta a autorización administrativa previa”, entran a detallar desde la propietaria de Zara, “permitirán preservar una parte sustancial de los puestos de trabajo que mantenía el Grupo Inditex en Rusia, al incluir la transferencia de la mayoría de los locales ocupados hasta ahora por sus tiendas”. Unos locales que, “previo acuerdo con los propietarios”, añaden, “albergarán los futuros puntos de venta de marcas propiedad del grupo comprador, totalmente ajenas a Inditex”.

Puerta abierta al regreso al mercado ruso, bajo el régimen de franquicias

Pese a suponer una tajante y totalmente sin ambages salida de la multinacional española del mercado de la Federación Rusa, entre los términos del mismo acuerdo se habrían no obstante incluido una serie de cláusulas que permitirían a Inditex mantener una puerta abierta a un posible regreso de la compañía española a suelo ruso. Un punto que quedaría a libre disposición y juicio de sus órganos de dirección, y que se llevaría a cabo, añaden, de la mano de un mismo grupo Daher que pasaría en ese futuro supuesto a operar como el socio licenciatario de las distintas cadenas de la compañía española dentro de la Federación Rusa.

“La transacción supondrá el cese de las operaciones de Inditex en la Federación Rusa tras la suspensión de su actividad comercial el pasado 5 de marzo”, puntualizan desde la multinacional a este respecto. Mientras que “en el supuesto de que se dieran en el futuro unas nuevas circunstancias que, a juicio de Inditex, permitieran el retorno de las marcas del Grupo a este mercado”, añaden, “Inditex y el grupo Daher contemplan en su acuerdo la posibilidad de una colaboración entre ambos a través de un contrato de franquicia”.

Como último punto de la nota, y entrando ya en el terreno de los balances económicos de la compañía, desde Inditex se estima que “la provisión registrada en los estados financieros en el primer semestre de 2022 cubre sustancialmente el impacto del cese de actividad del grupo en la Federación Rusa”, en unos términos que, a la vista de sus últimos resultados, en máximos históricos, no amenazan ni ponen en entredicho el buen rendimiento económico ni el dulce momento por el que atraviesa la compañía española desde la llegada a su presidencia de Marta Ortega.