Inditex se alía a Atlas Air y Repsol para impulsar la descarbonización del sector aéreo

Madrid – Después de cerrar un acuerdo con la naviera Maersk para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para el transporte de mercancías por vía marítima, y de poner en marcha, junto a la misma compañía logística, una iniciativa piloto con la que empezar a hacer lo propio por tierra, vía transporte ferroviario, desde Inditex ahora miran al cielo, en una alianza con Atlas Air y Repsol dirigida a impulsar la descarbonización del sector aéreo. Objetivo sobre el que desde Inditex entran a escalar, cerrando un acuerdo en virtud del cual Atlas Air, como compañía aérea encargada de suministrar servicios de logística a la multinacional española, empezará a alimentar sus vuelos con combustible sostenible para la aviación (SAF, por sus siglas en inglés) suministrado por Repsol.

A pesar de que ha sido ahora, y de manera más exacta este pasado 5 de diciembre de 2023, cuando ha terminado de hacerse pública la alianza entre estas tres gigantes, de sus respectivos ámbitos, la medida empezó a ponerse en marcha, como arranque a modo de una iniciativa piloto, a comienzos de este pasado mes de noviembre. Fecha desde la cual Atlas Air, unas de las aerolíneas de carga, junto a Aviation Holdings, en cartera de la compañía neoyorquina Atlas Air Worldwide, a su vez principal accionista mayoritaria de Polar Air Cargo Worldwide, ha empezado a utilizar en todos sus vuelos un 5 por ciento del SAF suministrado por Repsol. Vuelos, entre los que se encuentran todos los que la compañía aérea realizar de manera regular para Inditex desde el aeropuerto de Zaragoza, desde donde se termina de completar el centro logístico que la multinacional de la moda cuenta en la provincia aragonesa, en lo que ha llevado a convertir a Atlas Air en la primera aerolínea de carga en España en pasar a usar combustible SAF de manera regular en sus vuelos para el transporte de mercancías. Un verdadero hito para el conjunto de sector aéreo, que empieza a tomar así impulso en su necesario camino hacia la descarbonización, logrando con ello además ya no solo acercar a cada una de las compañías a sus respectivos objetivos de reducción de huella de carbono, sino también incluso anticipar y situar a Atlas Air por encima de las exigencias marcadas en la nueva normativa “ReFuelEU Aviation” de la Unión Europea. Iniciativa aprobada por el Parlamento Europeo, con el visto bueno de la industria del sector aéreo, el pasado miércoles 13 de septiembre de 2023, y que empezará a entrar en vigor el próximo 2025, exigiendo el uso de un 2 por ciento de combustibles renovables por parte de las compañías aéreas para todos sus vuelos. Porcentaje que, siguiendo con el cronograma establecido como parte de la misma normativa, se elevará hasta un +6 por ciento en 2030, y hasta un +70 por ciento para 2050.

“Con este acuerdo damos un paso más en la descarbonización de la aviación”, no ha dudado en salir a defender Óliver Fernández, director del departamento de Aviación Internacional de Repsol, a lo largo de unas declaraciones ofrecidas de manera conjunta por las tres compañías. Como resultado de esta asociación, “demostramos que el SAF es el futuro, pero también el presente”, apunta Fernández. Y es que “con la próxima puesta en marcha de nuestra nueva planta de biocombustibles avanzados en Cartagena”, apostilla, “estamos listos para suministrar al sector el SAF que necesita para hacer realidad sus ambiciones de descarbonización”.

“Estamos comprometidos a contribuir a la sostenibilidad del sector de la aviación y apreciamos esta oportunidad de trabajar con nuestros valiosos socios Inditex y Repsol”, ha apuntado por su parte Richard Broekman, director del departamento comercial y de sostenibilidad de Atlas Air Worldwide. “Es fundamental para nuestro sector trabajar juntos para impulsar una mayor adopción y disponibilidad de SAF, lo que en última instancia tendrá un impacto positivo en nuestra industria y en el medio ambiente”.

Impulso a la producción en España de biocombustibles 100 por cien renovables

Contado además de con la alianza de las tres compañías con la participación de Aena, empresa responsable de la gestión del Aeropuerto de Zaragoza, como responsables de promocionar la integración de combustibles SAF, impulsando así su producción y fomentando su mayor consumo, desde la firma de este acuerdo también se pretende impulsar la producción local, a nivel de España, de combustibles SAF. Un propósito para el cual, y siguiendo con las palabras ofrecidas por Fernández, Repsol se dispone a poner en marcha en estas próximas semanas, en Cartagena, en la Región de Murcia, su primera planta dedicada exclusivamente a la producción de biocombustibles avanzados de la Península Ibérica, y una de las primeras de toda Europa.

Para la construcción y el desarrollo de la nueva planta, la compañía multienergética ha llevado a cabo una inversión superior a los 200 millones de euros, destinados a unas instalaciones que contarán con una capacidad anual de producción de 250 000 toneladas de SAF y de diésel renovable. Combustibles todos ellos producidos a partir de varias tipologías de residuos, pero principalmente de aceite de cocina usado y de residuos procedentes de la industria agroalimentaria, en lo que permitirá reducir unas 900 000 toneladas de CO2 anuales. Una capacidad la de esta nueva planta que, para ponerla en su justo contexto, superará por sí sola, y a pleno rendimiento, a las 240 000 toneladas de SAF que, según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo, se llegaron a producir en todo 2022; adelantándose además a la demanda de 120 000 toneladas que necesitaría España en 2025, para terminar de cubrir la obligación de ese 2 por ciento mínimo de SAF que necesitaría el sector, fijado por la RefuelEU Aviation.

De este modo, “con la producción de la nueva planta de Repsol en Cartagena, será posible cubrir la totalidad de la demanda de SAF en la Península Ibérica, cumpliendo con la obligación hasta que el mandato europeo suba al 3 por ciento”, ponen de manifiesto desde Repsol. Compañía que sigue así avanzando sobre sus últimos 25 años como compañía volcada en la fabricación de biocombustibles 100 por cien renovables, que presentan ya como una alternativa real, y disponible, para “todos los segmentos de transporte”, representando además, valoran, “la principal solución para la aviación, el transporte marítimo y el transporte pesado por carretera que no tienen actualmente una alternativa viable en la electrificación”.

Inditex, una compañía “cero emisiones”, para 2040

Además de para fomentar, de manera especialmente concreta, el escalado de SAF y de para impulsar la descarbonización en el conjunto del sector aéreo, este singular acuerdo entre las tres compañías permitirá a cada una de ellas, siguiendo con lo ya señalado, avanzar sobre sus respectivos objetivos de reducción de huella de carbono. Unos compromisos para los que desde Repsol y desde todo el conjunto del sector aéreo, en una ambición asumida por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) y por la Airlines for America (A4A), aspiran a alcanzar las cero emisiones netas para el año 2050, siendo este un objetivo que desde Inditex se encuentran volcados y trabajando por alcanzar 10 años antes, para 2040.

En busca precisamente de ese propósito, la multinacional de la moda española, compañía matriz de cadenas tan populares como Zara, Massimo Dutti o Pull&Bear, presentaba a mediados del pasado mes de julio de 2023 sus nuevos objetivos y su nueva hoja de ruta en sostenibilidad. Una guía encaminada a terminar de destapar y de impulsar su valor como una compañía más plenamente comprometida con la circularidad, la sostenibilidad y unos modos de operar más comprometidos con el entorno y con las personas, cuyo último objetivo se situaba justamente en llegar a alcanzar las cero emisiones, para el año 2040. Una ambición para la que han planteado una serie de objetivos intermedios, entre los que destaca el de llegar a emplear para 2030 hasta un 100 por cien de fibras de menor impacto ambiental como materia prima de todas sus colecciones. Un porcentaje para el que cifraban en cerca de un 25 por ciento la utilización de fibras de última generación que ni tan siquiera son a día de hoy una realidad, formando todo ello parte de una ofensiva por etapas y desde distintos frentes, para la que precisamente ya han anunciado, como parte de esa misma estrategia, la inminente expansión a 14 nuevos mercados europeos, entre ellos España, de la plataforma de revalorización de prendas de segunda mano “Zara Pre-Owned”. Una plataforma omnicanal que empezará a estar operativa en esta serie de nuevos mercados a partir de este 12 de diciembre de 2023, como una pata principal de sus estrategias dirigidas a adoptar un modelo de negocio más sostenible y comprometido.

“Esta nueva plataforma se enmarca en la estrategia de desarrollo sostenible del Grupo Inditex”, dentro de la que se destaca como “una de sus prioridades con el fin de avanzar hacia una cadena de valor cada vez más sostenible”, explicaban desde la multinacional española coincidiendo con el anuncio, hace escasamente unos días, de la expansión del servicio. En esta apuesta, explicaban desde Inditex de manera más detallada, “además de Pre-Owned, entre los objetivos de sostenibilidad del Grupo” se destacan, en línea con lo ya señalado, la “utilización de materiales textiles con menor impacto medioambiental”; el “impulso al plan de transformación de la cadena de suministro”, tanto “en la parte social” como “en la parte medioambiental, con proyectos centrados en agua, vertidos, gestión de productos químicos y energía”; o el “apoyo a proyectos para proteger, restaurar o regenerar hasta 5 millones de hectáreas y contribuir a mejorar la biodiversidad”. Gracias a “estas y otras iniciativas”, como la de esta alianza con Repsol y con Atlas Air, apostillaban desde la dirección de la multinacional de la moda, se estima que se lograrán “reducir las emisiones más de un -50 por ciento en 2030”, consiguiendo así poner rumbo “hacia el objetivo de conseguir las emisiones neutras en 2040, con al menos un -90 por ciento de reducción”.