Golden Goose dispara ventas un +12 por ciento, mientras calla ante nuevos intentos de salida a Bolsa
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Madrid – La multinacional de la moda italiana Golden Goose acaba de informar de sus resultados financieros al cierre del primer semestre de 2024. Periodo de seis meses finalizado a fecha del pasado 30 de junio, durante el que la compañía logró impulsar su crecimiento elevando ventas un +12 por ciento, pero en lo que no obstante, y al menos por el momento, no va a servir para reactivar sus recientemente frustrados planes para acometer una próxima salida a Bolsa.
Siguiendo de este como con las informaciones compartidas desde la dirección de la multinacional italiana, desde Golden Goose han informado de un primer semestre del año que la compañía ha logrado completar registrando unas ventas totales por valor de 307 millones de euros. Una cantidad que supone un incremento de un +12 por ciento sobre los niveles de facturación registrados durante el mismo periodo de hace un año, desde un desempeño que se ha descubierto como especialmente positivo durante el segundo trimestre del ejercicio. Un periodo este de tres meses durante el que la compañía llegó a generar ingresos por valor de unos 174 millones de euros, una cifra superior a los 133,3 millones que alcanzó a facturar durante el primer trimestre del ejercicio, manteniéndose en consecuencia en la misma tasa de aumento de las ventas con respecto a hace un año, que ya demostró durante el primer trimestre, con un crecimiento igualmente de un +12 por ciento de las ventas, a tipo de cambio constante, con respecto a las del año anterior.
Mientras tanto, y en cuestión de rentabilidad, desde la dirección de la compañía italiana han dado cuenta de un Ebitda ajustado, semestral, que igualmente logra experimentar un alza de un +12 por ciento, hasta los 109,2 millones de euros. Cifra esta que termina por reflejarse en un Ebit ajustado cuyo crecimiento aumenta hasta solamente en su caso un +9 por ciento, hasta los 80,5 millones de euros, con respecto a su valor al cierre de la primera mitad del ejercicio de 2023.
“Nuestro sólido desempeño en el primer semestre de 2024 es muestra del vínculo sentimental de la marca con nuestra comunidad de ‘Dreamers’, y que hemos fortalecido a través de nuestro enfoque basado en la experiencia”, no ha dudado en querer salir a destacar Silvio Campara, director ejecutivo de Golden Goose, a lo largo de unas declaraciones facilitadas por su dirección. “Mientras continuamos expandiendo nuestro canal de venta directa al cliente final, mejorando nuestra oferta de productos y fomentando unas conexiones más profundas con nuestra comunidad joven, apasionada y comprometida de seguidores, me siento increíblemente orgulloso de nuestra familia Golden, por su dedicación y pasión”, apostilla. Valores que son los que, esgrime Camapara, “impulsan nuestro continuo éxito”.
Aumento de un +18 por ciento de las ventas en el cantal DTC
Entrando en mayores detalles sobre los aspectos de los que han informado hoy desde Golden Goose, por canales de distribución y de venta, desde la compañía italiana apuntan al canal de DTC, ya no solamente como a su principal fuente de ingresos, sino también como al responsable de impulsar el crecimiento de las ventas experimentado por la compañía italiana. Cuestión que se ha terminado de poner de manifiesto con unas ventas semestrales por valor de 226,8 millones de euros, un +18 por ciento más que frente a los ingresos del mismo periodo de hace un año, y el 73 por ciento del total de los ingresos de la compañía durante este primer semestre de 2024. Un notable crecimiento, y positivo rendimiento, que en su caso llegó alimentado por un desempeño positivo de las ventas en términos comparables, afianzado por la política de nuevas aperturas estratégicas seguida por la compañía, que cierra el semestre con una red comercial, propia, integrada por más de 200 tiendas. Un parque comercial al que, a lo largo del semestre, sumaron nuevas aperturas significativas en Ciudad de México, Bangkok, Kuala Lumpur y Roma.
Completando a esta facturación, y rendimiento, a través de sus operaciones para el canal mayorista, la compañía llegó a ingresar ventas por valor de 74,6 millones de euros. Una cifra que en su caso ha supuesto una contracción de un -5 por ciento de las ventas en el canal mayorista, que reduce su peso hasta un 24 por ciento del total de las ventas semestrales de Golden Goose, contribuyendo con ello al objetivo estratégico de la multinacional italiana de reducir su exposición en el canal mayorista y en el multimarca, para garantizar los valores y la imagen de la marca, al tiempo que se fortalecen las operaciones de ese canal DTC de venta directa al cliente final, y que también, aseguran, habría experimentando un rendimiento positivo, ya no solamente en físico, sino también en online.
En cuanto ya a su evolución, por mercados, desde Golden Goose vuelven a subrayar ese crecimiento del 18 por ciento de las ventas del canal de DTC, y que la compañía habría llegado a experimentar tanto en sus operaciones en Emeia como en las Américas. Regiones en las que llegó a concentrar el 48 y el 38 por ciento de todas sus ventas, respectivamente, mientras que la región de Asia-Pacífico lo hizo en su caso del 14 por ciento restante, datos de los que han informado pero sin concretar de qué manera las ventas en cada mercado han evolucionado a lo largo de este primer semestre de 2024.
Con una salida a Bolsa que continúa paralizada “sine die”
Mirando ya de cara a lo que resta de ejercicio, desde la dirección de Golden Goose no se han abierto a compartir ninguna clase de guía o de estimación sobre cuál confían en que sea su comportamiento en este segunda mitad de su año fiscal. Un ejercicio para el que eso sí han reconocido, y destacado, el entorno todavía marcado por la incertidumbre y por la volatilidad en el que va a tener que tratar de desempeñarse la compañía, y en el que, por ahora, lo ha logrado hacer “demostrando un sólido crecimiento en mitad de un volátil panorama para los mercados”.
Precisamente esta misma “volatilidad”, e incertidumbres, eran las que conducían a la compañía a abortar, a ultimísima hora, su oferta pública inicial (OPI). Una operación de la que la compañía informaba a finales del pasado mes de mayo, y que debía de haberse completado con las acciones de Golden Goose entrando a debutar en la Bolsa de Valores de Milán, a un precio de entre 9,50 a 10,50 euros la acción, el pasado 21 de junio, pero que no obstante se terminaba frustrando a escasas horas de llegarse a la fecha anunciada para su esperado debut como compañía cotizada. En concreto, en torno a una jornada del 19 de junio durante la que desde Golden Goose hacían pública su decisión de suspender “sine die” su salida a Bolsa; suspensión de una OPI que defendían como resultado del “importante deterioro de las condiciones del mercado tras las elecciones al Parlamento Europeo” y de la “convocatoria de elecciones generales en Francia”, cuestiones que alegaban por entonces que habían “impactado en el desempeño de los mercados europeos, y, en particular, dentro del sector del lujo”.
Completando a esa declaración, desde Golden Goose defendían el que “la dirección y los accionistas” propietarios de la compañía “siempre han estado decididos a garantizar una exitosa OPI para todas las partes interesadas, con un rendimiento sólido y sostenido en el mercado”, objetivo para el cual “creemos que el contexto actual del mercado no es el entorno adecuado para convertir a la compañía en una compañía cotizada”, para lo cual “la OPI de Golden Goose se reevaluará a su debido tiempo”. Un tiempo que, por el momento, todavía no habría llegado, como evidenciaría el silencio que desde Golden Goose han decidido mantener sobre esa frustrada OPI, desde la que ha sido la primera comunicación de resultados que ha realizado la compañía después de acordar paralizar su salida a bolsa a mediados de este pasado mes de junio.