El Corte Inglés vende a Repsol el 45 por ciento de su “joint venture” de gasolineras

Madrid – El Corte Inglés sigue reduciendo su exposición a las operaciones realizadas de manera conjunta junto a otras empresas, y ha procedido a la venta a Repsol del 45 por ciento de la “joint venture” que compartía con la petrolera para la explotación de estaciones de servicio. Una operación que le ha repercutido un beneficio de 3,1 millones de euros.

Siguiendo con las informaciones que sobre esta misma cuestión empezaban a circular ya a mediados del pasado mes de febrero de 2024, pero sobre las que por entonces ni desde El Corte Inglés ni desde Repsol entraron a confirmar o a desmentir a través de alguna clase de comunicado oficial, no ha sido ahora, hasta la publicación de los resultados consolidados de El Corte Inglés relativos a su último ejercicio completo de 2023, finalizado a fecha del pasado 29 de febrero, y cuentas que la compañía de grandes almacenes no ha hecho públicas hasta finales de este pasado mes de junio, cuando desde la compañía presidida por Marta Álvarez han terminado por oficializar la operación. Un trato que ha consistido, según recogen en los citados estados financieros, en la venta del 45 por ciento, del 50 por ciento del capital que poseían, de la compañía conjunta fundada junto a Repsol en 1998, Gestión de Puntos de Venta, Gespevesa, en lo que resultó en un resultado positivo para la compañía de grandes almacenes de 3,1 millones de euros.

Siguiendo con las maneras, ciertamente cuestionables y opacas, con las que, ya no solamente desde El Corte Inglés, sino desde una gran parte y desde un elevado número de las grandes compañías españolas tratan de manejar, limitar y controlar la información que difunden y que afecta a sus operaciones, ni tan siquiera desde las cuentas de El Corte Inglés se aclara de manera meridiana el punto sobre a favor de qué tercero se ha procedido a formalizar la venta del 45 por ciento de la participación con la que contaban en Gespevesa. Dato que, aún siendo fácilmente estimable dada la naturaleza de la compañía, se termina ya de aclarar desde las cuentas de Repsol, de cierre del mismo ejercicio de 2023. Unos estados financieros desde los que se apunta a que, entre sus principales inversiones, entre otras, la compañía petrolera pasó a adquirir durante su último año fiscal un 45 por ciento adicional de Gespevesa. Una operación que, completada a fecha del pasado 22 de diciembre de 2023, deja a la petrolera tomando el control de la sociedad, con un 95 por ciento de su capital, y a El Corte Inglés manteniéndose dentro de la misma, pero desde un simbólico y mínimo 5 por ciento.

Nueva reestructuración de una “joint venture” participada por ECI

Poniendo esta operación en el contexto de las últimas iniciativas empresariales que han venido impulsando desde El Corte Inglés, parecen claros los intentos de su directiva por tratar de ir dando forma al nuevo El Corte Inglés que poco a poco va tomando un perfil y un tono propio, bajo la presidencia, ya en la práctica ejecutiva, de Marta Álvarez. Un nuevo capítulo para la histórica compañía española de grandes almacenes, para el que desde El Corte Inglés parecen decididos a redirigir todos sus esfuerzos y recursos a tratar de crecer sobre las que son las tres principales patas, y las que mayores niveles de facturación y de beneficios aportan a la compañía, como lo son retail, viajes y alimentación.

Desde esa ambición, es como terminan de ponerse en sintonía las últimas operaciones lideradas desde la dirección de El Corte Inglés, incluida esta de dejar en manos de Repsol la gestión y todo el desarrollo de Gespevesa. Una venta de su participación que se espera que no termine de afectar al papel de la compañía como distribuidora de los puntos de venta adheridos a las estaciones de Repsol, incluidos los que venían operándose bajo el paraguas de esta “joint venture”, en lo que justamente refuerza esa estrategia que apreciamos, impulsada desde su dirección, para tratar de reforzarse, tanto en distribución como en venta minorista y en alimentación. Unas ambiciones para las que podrán así pues redoblar sus esfuerzos, una vez ya cedido el control de algunas de las mayores líneas de negocio sobre las que había logrado tomar impulso la compañía, pero que se situaban claramente mucho más allá de su naturaleza como compañía de venta minorista y de distribución, como sus filiales para los negocios de seguros, de las que cuentan desde El Corte Inglés con un 49,99 por ciento, estando la mayoría de las participaciones en manos ya de la aseguradora Mutua Madrileña; y para el negocio de la financiación, contando con el control del 49 por ciento de sus dos sociedades, y estando el resto, y por extensión su control real, en manos de la entidad financiera Banco Santander desde febrero de 2014.

Tras esta “desinversión” en el negocio de las gasolineras, y de sus puntos de venta adheridos, y que, en línea con lo expuesto y según adelantan desde el medio económico 5 Días, se encargarán de seguir explotando como parte de su asociación a largo plazo con Repsol, por al menos un mínimo de un año, pasan a ser solamente cuatro las compañías participadas por El Corte Inglés en las que la compañía se mantiene con una participación al 50/50 con otro grupo empresarial. En concreto, las compañías destinadas a la comercialización de joyería y relojería Lecius y Citorel, cuyo control mantiene junto a Joyería Unión Suiza y junto al grupo Tous, respectivamente; la compañía Kio Networks España, especializada en servicios de infraestructura y procesamiento de datos en la nube cuya propiedad comparte con la mexicana Kio Networks; y Sephora Cosméticos España, empresa destinada a la venta de productos de perfumería y cosmética, y cuya propiedad comparte con el holding multinacional francés especializado en artículos de lujo LVMH.