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Balenciaga, en Shanghái: un modelo ¿agotado?

Por Jaime Martinez

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Moda |Opinión
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.

Madrid – Desde el que se vislumbraba como el primer desfile en toda la historia de la casa en tener lugar en China, desde la histórica Balenciaga presentaban este 30 de mayo, desde la ciudad de Shanghái, su colección para la temporada de Primavera de 2025. Una propuesta que llegaba de la mano, y desde la misma pasarela, de sendas colaboraciones con Under Armour y Alibaba, últimas muestras de un modelo de dirección para la casa de modas que empieza a dar claros signos de agotamiento.

Para terminar de dibujar el contexto en el que actualmente se desenvuelve la firma, una de las casas de moda “menores”, por volumen de facturación, del grupo multinacional francés Kering, en primer lugar nos trasladamos hasta la ciudad de Shanghái, desde donde, y rodeada de la máxima expectación, cuestión habitual para eventos de esta índole, en la noche de este jueves 30 de marzo terminaba por presentarse la última colección de la casa de ascendencia española, para la temporada de Primavera de 2025. Una propuesta que terminaba por desfilar sobre la improvisada pasarela en la que quedó convertida la explanada que se expande a los pies del Museo de Arte de Pudong. Una obra firmada por el estudio de arquitectura de Jean Nouvel que abrió sus puertas al público en 2021, y ambiente de excepción, con unas envidiables vistas sobre la ciudad desde la orilla este del río Yangtsé, cuya postal terminó sirviendo así, aunque con matices, de marco incomparable para la presentación de la colección. Y apuntamos con lo de “con matices”, porque el desfile al aire libre terminó por contar con una invitada no prevista, en forma de una contundente lluvia primaveral que lejos de amainar aguantó durante toda la presentación. Y es que lejos de sucumbir frente a la adversidad, y haciendo de las dificultades virtud, la firma, y todos sus invitados, abogaron por continuar impasibles ante las circunstancias meteorológicas, en forma de una lluvia que, para que negarlo, terminó por aportar de un extra de autenticidad y de dramatismo a la ya de por sí dramática estética de la colección.

Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.

Hasta aquí, hasta todo lo apuntado, nada que objetar a la celebración de un desfile que, atendiendo a la propia singularidad y gustos de la actual Balenciaga, bajo la dirección creativa del georgiano Demna Gvasalia desde el año 2015, sí que es cierto que parecía amoldarse en exceso a los cánones que se esperan de una casa de moda vinculada a la industria del lujo. Mucho más que en sus, hasta ahora, únicos dos anteriores desfiles organizados “fuera de casa”, como lo fueron el celebrado en la Bolsa de Nueva York, en mayo de 2022, y en las calles de Hollywood, el pasado diciembre de 2023. Un primer, aunque leve, “pero”, que no obstante terminó por agrandarse a partir de todo lo que terminó trayendo tras de sí la presentación de la colección; una propuesta en la que terminaron prácticamente por quedar al desnudo todas las faltas en las que parece estar empezando a caer la Balenciaga de Demna…

Una estética asimilada

Lloviendo así sobre mojado, nunca mejor aludida la expresión que en esta ocasión, a medida que fueron sucediéndose las prendas de la colección desde esa improvisada pasarela en la que terminó por convertirse el exterior del Museo de Arte de Pudong, comenzando por lo más evidente, empezaremos por apuntar a la misma naturaleza de la propuesta. Una colección que volvió a descubrirse sobre la ya tradicional paleta cromática de la Balenciaga de Demna, sostenida a partir de azules océano, grises piedra y con el negro como gran protagonista, mientras acentos en azules eléctricos, rosas y rojos se encargan de aportar la nota de color, y los acabados metalizados en oro y plata el extra de “solemnidad” a la paleta. Un “A,B,C” del universo cromático de esta Balenciaga, que Demna al parecer volvió a decidir volver a aplicar a pies juntillas, como en el resto de sus últimas colecciones.

Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.

Frente a este prácticamente nulo cambio en el espectro cromático de la casa, igualmente nulos se percibieron los cambios introducidos desde esta propuesta en materia de hechuras, patrones y ajustes. Cuestión que puede defenderse desde la reivindicación de la casa por tratar de mantenerse fiel a su legado y a un marcado carácter atemporal, en una perspectiva defendida, en el contexto de esta propuesta, desde una enésima reinterpretación de algunas de las piezas principales de la casa extraídas de sus propios archivos. Una reinterpretación que defendemos y celebramos, reconociendo además la fina y brillante labor que Demna ha logrado practicar a lo largo de todos estos años desde sus innumerables revisitaciones y reinterpretaciones del trabajo del maestro español y fundador de la casa, Cristóbal Balenciaga. Unos trabajos que no obstante en su momento se descubrían estimulantes, controvertidos, arriesgados… Adjetivos que en ningún caso podríamos terminar de atribuir al conjunto de esta colección. Una colección que sigue descubriéndose asentada sobre unas piezas de excepción, sí, y que vuelven a hacer honor al trabajo del diseñador español, sí, pero que ya no sorprenden ni resultan ni inspiradoras ni sugerentes.

El que eso ocurra, ojo, no habla mal de la labor que ha logrado desempeñar, y que ha vuelto a desempeñar, el diseñador georgiano al frente de Balenciaga, sino más bien todo lo contrario. Y es que desde su entrada en la dirección de la casa en 2015, el hoy conocido solamente como Demna ha logrado instaurar y hacer valer una estética que, ya en este 2024, parece que finalmente nuestra mirada crítica ha logrado asimilar, hasta el punto de encontrar esas estéticas, ya no osadas ni desafiantes, sino prácticamente tan convencionales como lo puede resultar un traje de dos piezas. Demna no se ha movido, nos ha hecho movernos a nosotros y a nuestro sentido estético. Y en este actual momento en el que nos encontramos, en el que coincidimos ya y en el que coexistimos ya en un mismo plano, la pregunta que ahora surge es si Demna será capaz de a partir de aquí empezar a hacer evolucionar su trabajo, o si los gustos, siempre en mudanza, de la sociedad terminarán por superar y por descubrir a esta, su estética para Balenciaga, como una estética trasnochada.

Colaboraciones y cápsulas junto a Alibaba y Under Armour

Sin poner en duda la capacidad que de seguro mostrará el diseñador georgiano para volver a salir a reinterpretar el legado de la casa en formas, motivos y patrones hasta ahora no vistos, más dudas presenta la capacidad de la dirección de la casa para la hora de igualmente tratar de hacer evolucionar su maneras de proceder. Y es que si lo nuevo, por nuevo, resulta atractivo, seductor y fascinante, pasado el tiempo, que todo lo calma, es capaz de voltearse y de presentarse como algo aborrecible, bochornoso y cuasi que ridículo. Y así es precisamente como empiezan a presentarse las estrategias que están llevando a cabo desde la dirección de Balenciaga para la hora de dotar de mayor ¿profundidad? a sus colecciones de temporada.

Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.

Para terminar de ser más claros sobre esta cuestión, con motivo de la presentación de su colección de Otoño en Los Ángeles, Balenciaga seguía apostando por su estrategia de aliarse con diferentes marcas y proyectos, en lo que en su caso terminaba por dar paso a una cápsula colaborativa junto a la cadena de supermercados de lujo Erewhon de Los Ángeles. Una iniciativa que aplaudíamos desde estas páginas, principalmente por el atrevido matiz que lograba imprimirle al conjunto de la colección, en combinación con la estética “homeless” que respiraba toda la propuesta y de la presentación de las piezas de la primera colección de alta joyería de la casa. Y del mismo modo que, por novedosas y estimulantes, celebrábamos aquellas combinaciones de pulsiones, ahora se nos presentan como forzadas y antipáticas las que se descubren desde las colaboraciones que Balenciaga ha emprendido bajo el paraguas de esta colección de Primavera de 2025 de la mano de dos grandes compañías multinacionales: Alibaba, junto a la que ha colaborado en el lanzamiento de una camiseta ilustrada con el símbolo de su pasarela de pagos, Alipay; y Under Armour, empresa con la que, siguiendo con las iniciativas similares emprendidas con Adidas y con Erewhon, ha diseñado una colección cápsula colaborativa cuyas primeras piezas han salido a la venta tras la finalización del desfile.

Siguiendo con lo apuntado, ambas acciones, lejos de enriquecer el universo Balenciaga, al tiempo que permitir a las respectivas terceras compañías elevar su valor en su asociación con una casa histórica como lo es la firma francesa de ascendencia española, dejan la imagen y la sensación de una Balenciaga “vendida”, de una Balenciaga convertida en una suerte de plataforma publicitaria puesta al servicio del mejor postor. Y es que lejos de resultar ya en una atrevida apropiación de estéticas, de lugares y de puntos de encuentro del imaginario colectivo, que era como en un primer momento se nos presentaban esta serie de acciones ideadas por Demna, ahora solo parecen una muestra más de la compleja situación económica por la que atraviesa el grupo Kering, y de sus intentos por tratar de elevar sus niveles de facturación “vendiendo” cápsulas cuyo único atractivo está resultando de la imprimación de un tercer logotipo junto al nombre “Balenciaga”.

Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.
Balenciaga, colección de hombre y mujer para la Primavera de 2025. Credits: ©Launchmetrics/spotlight.

Con el nuevo tejido técnico (y biodegradable) Bananatex

Pero no obstante bajo este encapotado cielo gris plomizo desde el que empezamos a ver ensombrecerse los brillos de la Balenciaga de Demna, todavía percibimos, incluso desde esta colección, un haz de luz que nos da confianza sobre el futuro desarrollo de la casa. Y es que junto a esas frías asociaciones junto a Alibaba y Under Armour que, reconozcámoslo claramente, no presentan ningún atractivo estético de especial interés, bajo el paraguas de esta misma colección de Primavera de 2025 Balenciaga a presentado, y lanzado ya también al mercado, una edición limitada de su modelo de zapatillas “Triple S”. Unos diseños que como característica principal cuentan con la de haber sido fabricados a partir de Bananatex, un tejido técnico de altas prestaciones, biodegradable y sin presencia de plásticos, elaborado a partir de plantas de abacá cultivadas de forma regenerativa, sin pesticidas ni fertilizantes, en plantaciones de Filipinas.

“Ver el lanzamiento del icónico Triple S fabricado con nuestra innovación de próxima generación Bananatex es un verdadero honor”, no ha dudado en querer destacar Hannes Schoenegger, cofundador y director ejecutivo de Bananatex, a lo largo de unas declaraciones que nos han hecho llegar a FashionUnited desde la dirección de la misma compañía emergente de innovación textil. “Nos gustaría dar las gracias a todos los que han participado en este proyecto, del que esperamos que haya muchos más en el futuro”, añadía Schoenegger, en relación con una cápsula que ha sido “el resultado de varios años de desarrollo y estrecha colaboración” entre Bananatex y Balenciaga.

Balenciaga, zapatillas “Triple S” hechas con partes de fibra de Bananatex. Credits: Balenciaga.
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