Los autónomos lanzan un nuevo SOS al Gobierno: “Estamos destruyendo generadores de empleo”

Madrid – Desde la Federación Nacional de Trabajadores Autónomo ATA, unas de las principales organizaciones de trabajadores autónomos de ámbito nacional, han salido al paso de los últimos datos recogidos por la Encuesta de población activa (EPA) del cuarto trimestre de 2020, hecha pública en el día de ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), para reclamar nuevamente al Gobierno el lanzamiento de unas ayudas directas que permitan garantizar el funcionamiento de las empresas y la preservación de los puestos de trabajo. Unas medidas que de no adoptarse podrían terminar haciendo de este 2021 nada más que un reflejo de los malos datos sobre el empleo que ha dejado tras de sí el año de 2020.

“Pésimos datos para el empleo los que nos deja hoy la EPA”, manifestaba Lorenzo Amor, presidente de ATA, a través de unas declaraciones difundidas desde la propia Federación de trabajadores autónomos, con más de “622.000 empleos destruidos, más de 500.000 parados en el año 2020, 750.000 trabajadores en Erte, que si bien no figuran como desempleados sí figuran como ocupados aún teniendo el empleo suspendido”, con más de “350.000 autónomos en cese de actividad, que no sabemos si van a volver a levantar las persianas de sus negocios”, y lo que resulta “más dramático” y el dato “que más nos preocupa, 97.000, casi 100.000 autónomos empleadores menos en 2020”. “Estamos destruyendo generadores de empleo”, enfatizaba Amor.

La necesidad de unas ayudas directas que contribuyan a superar un 2021 repleto de incertidumbres

Frente a estos datos, “se nos presente un año de 2021 con incertidumbre, estamos en una tercera ola, con nuevas restricciones y limitaciones” que “nos llevarán a un primer trimestre que va a ser complicado”. Es por ello que ha llegado el momento de “las ayudas directas”, reclama el presidente de ATA. “Se han prorrogado los Erte, se ha prorrogado el cese de actividad, pero es el momento de poner en marcha ayudas directas”. “Instamos al Gobierno” a que ayude a las empresas, para con ello “ayudar al empleo”, mediante unas “ayudas directas” que se presentan, según amor, como la única garantía para poder salvar tanto a las empresas como al tejido empresarial, a los autónomos y el empleo.

Una petición que constituye “un SOS al Gobierno”, porque “o se articulan ayudas directas como las que se han puesto en marcha en otros países europeos, o desgraciadamente muchos trabajadores en Erte no van a poder recuperar su puesto de trabajo” y “muchos autónomos no van a poder volver a sus negocios tras el cese de actividad extraordinario”, expresaba. “Es el momento de impulsar ayudas que puedan salvar a autónomos, empleos y empresas”. Unas “ayudas directas que sirvan para mantener el empleo, para mantener la actividad económica, para mantener el tejido productivo”. “Estamos en un momento muy complejo y muy duro”, apostilla Amor, pues “son ya 10 meses de pandemia, 10 meses en los que hay fatiga” en los empresarios y autónomos “financiera”, “económica” y “psicológica”. Por todo ello ha llegado “el momento de impulsar las ayudas”, antes de que “vemos destruir otros 100.000 generadores de empleo como los que hemos visto perderse en el año 2020”.

Medidas insuficientes

Las manifestaciones arrojadas por Amor no suponen más que el último reclamo a favor de mayores ayudas que vienen realizando las diferentes asociaciones de trabajadores autónomos y de empresarios. Unas demandas que se situarían en línea de las defendidas por otras organizaciones como la Asociación autónomos unidos para actuar AUPA. Entidad que se encuentra entre las impulsoras del “Paro Nacional” organizado en España para el próximo 24 de febrero, desde donde ha comienzos de la pasada semana ya exigían la concreción de mayores ayudas más allá de la prórroga de los Ertes y de los ceses de actividad acordados por el Gobierno.

“Los autónomos necesitan mayores garantías para que su futuro no esté abocado al cierre”, manifestaban desde AUPA a través de un comunicado inmediatamente después de acordarse la prórroga de los Erte y de las ayudas a los autónomos hasta el próximo 31 de mayo. “Las nuevas prórrogas son un pequeño balón de oxígeno, pero que ni de lejos atienden a las verdaderas necesidades de todo el colectivo”. “Es indiscutible que la ampliación de ERTEs y ceses era necesaria, pero no es lo único que los autónomos necesitan”, ya que “sin medidas que garanticen nuestro futuro y que nos ayuden a remontar esta situación, sólo conseguirán mandar a la ruina a los autónomos”. Además, de las prestaciones por cese se “ha dejado fuera a muchos compañeros” que “ya venían exigiendo una revisión” de algunos de los requisitos. Unas dificultades para poder acceder a beneficiarse de esta serie de ayudas, a lo que además habría que sumar “que los gastos del negocio no son los únicos gastos que los autónomos tienen que sufragar, ya que los gastos personales, de nuestras casas y familias también hay pagarlos”.

“Nuestro objetivo no es cobrar prestaciones, sino reactivar nuestras actividades y con ello la economía”, se encarga de remarcar Pedro García, vicepresidente de Aupa. Quien, en línea de lo argumentado por Amor defiende que “deben ofrecerse medidas de ayuda directas que nos permitan salvaguardar nuestros negocios y a nuestros empleados, por lo que necesitamos que si nuestro trabajo se ve limitado, restringido o prohibido, se formulen medidas acordes a estas limitaciones, y no se nos obligue a pagar los gastos e impuestos íntegros”. “Los autónomos somos, y seguiremos siendo la única fuerza capaz de levantar el país y sacarlo adelante”, apostilla, “pero si no invierten en nosotros, también podemos acabar siendo la losa que hunda la economía de España. Sin ingresos no podemos pagar, y esto es algo que deben entender ya”.

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