Las estadounidenses Tailored Brands y Lord & Taylor se declaran en quiebra
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Madrid – Continúan llegándonos nuevas muestras de las dificultades por las que atraviesa el sector del retail en Estados Unidos. Y es que tras las declaraciones de quiebra de Neiman Marcus, JC Penney o Brooks&Brothers, otra histórica compañía del sector Lord&Taylor, considerados los grandes almacenes más antiguos del país, habría solicitado la declaración de bancarrota y la protección del denominado como “Capítulo 11” de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos. Apartado que, como siempre recordamos desde FashionUnited, permite a las compañías norteamericanas poder reorganizar su deuda financiera bajo reguladas garantías legales, y que hay que distinguir del conocido “Chapter 7”, que por su parte se encarga de reglar los procesos de liquidación de las empresas.
La decisión de Lord&Taylor no ha sido sin embargo la única en este sentido que hemos conocido en las últimas horas, después de que también haya solicitado la declaración del “Capítulo 11” la compañía Tailored Brands. Propietaria de las cadenas de moda masculina Men’s Wearhouse, Jos. A. Bank, K&G Fashion Superstore y Moores Clothing for Men. Desde donde por su parte confirmaban la noticia a través de un comunicado oficial, junto a su decisión de continuar operando su extensa red comercial y un principio de acuerdo para la refinanciación de su deuda, que espera ver reducida en cerca de 630 millones de dólares, después de haber logrado el apoyo de más del 75 por ciento de sus principales acreedores.
“Tailored Brands y algunas de sus subsidiarias anuncian hoy que han firmado un acuerdo de reestructuración de su deuda (RSA) con más del 75 por ciento de sus acreedores”, anunciaban este pasado 2 de agosto desde la propia compañía a través de un comunicado; en relación a un plan con el que “espera que se reduzca la deuda financiera de la Compañía en al menos 630 millones de dólares y que proporcione una mayor flexibilidad que permita a Tailored Brands continuar con su estrategia orientada a genear un crecimiento rentable y un mayor valor añadido para clientes y accionistas”. Para poder implementar esta estrategia, “la Compañía ha presentado una petición voluntaria para la aplicación del Capítulo 11 en el Tribunal de Quiebras de los Estados Unidos para el distrito del Sur de Texas”. Iniciándose un proceso a lo largo del cual “la Compañía espera que sus cuatro marcas minoristas, Men’s Wearhouse, Jos A. Bank, Moores Clothing for Men y K&G Fashion Superstore, continúen brindado a los clientes sus servicios”. Un objetivo para el que se servirá de los 90 millones de dólares con los que cuenta actualmente en efectivo, así como de unos 500 millones de dólares procedentes una línea de financiación DIP (debtor-in-possession) que se convertirá en una línea de crédito “revolving” una vez que la compañía abandone la protección del Capítulo 11. Aspectos todos ellos que ya han sido aprobados por parte del Tribunal de Quiebras, tal y como confirmaba la propia compañía ayer mismo en un nuevo comunicado, en lo que calificaba, de boca de su presidente y director ejecutivo Dinesh Lathi, de “hito importante en nuestro camino para mejor la posición de nuestras marcas”.
Dos nuevas incorporaciones a la larga lista de quiebras del retail en EE.UU.
Tailor Brands es una compañía minorista especializada en el sector de la moda masculina, público la que ofrece desde trajes y ropa formal a propuestas sport, bajo el paraguas de sus marcas comerciales Men's Wearhouse, Jos. A. Bank, Moores Clothing for Men y K&G. La compañía se fundó en 1973 a partir de Men's Wearhouse, establecimientos en los que el Grupo comercializa una amplia selección de prendas masculinas de firmas como Joseph Abboud, Calvin Klein, Tommy Hilfiger o las líneas exclusivas JOE by Joseph Abboud, Awearness de Kenneth Cole o Black by Vera Wang. En 1999 ampliaría su portafolio de marcas con la adquisición de la canadiense Moores Clothing for Men, en la que emplea a día de hoy a más de 1.200 trabajadores, y con la estadounidense K&G. A las que sumaba en 2014 a la centenaria Jos. A. Bank, cuyos orígenes se remontan a 1905.
Fundados en 1826, por su parte Lord&Taylor están considerados los grandes almacenes más antiguos de todo el país. Actualmente la compañía es propiedad de la compañía francesa especializada en alquiler de prendas Le Tote Inc., quien la adquirió hace apenas un año de la canadiense Hudson’s Bay por 75 millones de dólares y un pagaré adicional por valor de otros 25 millones de dólares en efectivo pagaderos en dos años, así como una participación en Le Tote y dos puestos en la junta directiva de la empresa.
Tal y como se encargan de publicar desde medios estadounidenses como la NBC, a la difícil situación que ya vivía el retail en Estados Unidos se ha terminado por sumar los efectos de esta pandemia por coronavirus. Unas circunstancias que han hecho que hasta el 23 de julio sean ya cerca de 40 compañías minoristas, incluidas tanto grandes como pequeñas, las que hayan declarado su bancarrota y solicitado la protección del “Capítulo 11”. Una cifra en la que se incluyen desde Neiman Marcus hasta JC Penney, Brooks&Brothers, Ascena retail group —matriz de Ann Taylor y de la cadena Lane Bryant—, y ahora Tailored Brands y Lord&Taylor, que excede ya el número de todas las declaraciones de quiebra presentadas a lo largo de todo el año pasado. Con cerca de dos docenas de ellas habiéndolas presentado una vez ya declarada la pandemia por coronavirus.
Photo Credits: Tdorante10, Shinya Suzuki, Flickr.