Inditex pone fin al encierro y fuerza el desalojo de su sede

Madrid – Vía Guardia Civil, los delegados y delegadas sindicales de la Confederación Intersindical Galega (CIG), la organización sindical mayoritaria entre los trabajadores de tienda de Inditex en la provincia de La Coruña, fueron finalmente desalojados, durante la noche de este lunes, 17 de junio de 2024, de la sede central de la multinacional en la localidad gallega de Arteixo. Instalaciones en las que permanecían atrincherados desde el pasado viernes, y de las que habían mostrado ya su firmeza de no llegar a abandonar hasta que la compañía atendiese a sus demandas.

Siguiendo de este modo con las informaciones que ya nos encargábamos de recoger desde FashionUnited a comienzos de esta misma semana, tras “tomar” el pasado viernes la sede central de Inditex, los delegadas y las delegadas de la CIG terminaron la jornada del viernes nuevamente en sus respectivas camas, después de que, tal y como desde la misma organización sindical han querido relatar, desde la dirección de la multinacional de la moda española, propietaria de cadenas de moda tan populares como Zara, Bershka, Massimo Dutti, Pull&Bear o Stradivarius, procedieran a solicitar la asistencia de la Guardia Civil para forzar el desalojo de las instalaciones. Una llamada que fue atendida por miembros del instituto armado, quienes, una vez ya personados en las dependencias de Inditex, en torno a las 21:30h de la noche, y según detallan desde la CIG, informaron a los delegados y delegadas allí apostados que debían abandonar el recinto, o que, de negarse a hacerlo por su propio pie, serían desalojados por la fuerza.

Según defienden desde la organización sindical, continuando con su relato de los hechos, ante esta disyuntiva, los delegados accedieron a abandonar voluntariamente la protesta, sin tan siquiera haber logrado ser recibidos por miembros de la dirección, y ni mucho menos haber logrado que la compañía accediera, en base a sus reclamaciones, a retomar las negociaciones de mejora de las condiciones laborales de los trabajadores de tienda de La Coruña, en el marco de una mesa de negociación provincial. Un compromiso al que según la CIG se comprometió Inditex, por escrito, el pasado mes de diciembre, pero y del que ahora la multinacional española se estaría desdiciendo, en favor de impulsar una negociación a nivel estatal que garantice unas mismas condiciones laborales a todos sus trabajadores de tienda, independientemente del lugar de España en el que lleven a cabo su actividad. Una postura que rechazan de extremo a extremo desde la CIG, entre veladas acusaciones de connivencia con las posiciones de la empresa lanzadas contra las principales organizaciones sindicales de ámbito nacional, y una firme defensa de buscar defender sus posiciones en nombre de los trabajadores a quienes representan. Unas máximas para las que argumentan el haber perdido ahora una batalla, pero no la guerra en defensa de sus reivindicaciones, para las que están decididos a enfrentarse al “indignante” comportamiento que habría una vez más mostrado la compañía, así lo califican, hacia sus dependientas y dependientes de tienda, tras forzar la expulsión de su sede central de sus representantes sindicales.

Así pues, valoran desde la CIG, resulta “indignante”, señalan a través de una nota, “la insistencia recalcitrante de Inditex de no cumplir los compromisos adquiridos por escrito”, más aún en “una multinacional como esta, con multimillonarios beneficios”, pero que opta “por denunciar a sus propias trabajadoras, antes que por respetar el texto de los acuerdos”. Una cuestión para la cual, adelantan ya desde la CIG, el sindicato advierte de que no renuncian “a seguir peleando por el derecho a una negociación colectiva en proximidad, y a que la tabla reivindicativa” que defienden frente a la dirección logre terminar estando “plenamente vigente”.

Huelga para el 27 de junio, arranque de la campaña de rebajas

El desalojo de los delegados y delegadas sindicales de la CIG se producía de este modo este lunes, más de 72 horas después de que diera comienzo su encierro en las instalaciones de la sede central de la multinacional, y tras hasta dos concentraciones de “solidaridad” organizadas por otros miembros de la misma organización sindical a las mismas puertas de las instalaciones. La última, en el mediodía de la misma jornada de este pasado lunes, día 17, desde una acción desde la que los delegados y delegadas de la CIG volvían a enarbolar sus demandas, a defender su compromiso de no abandonar las instalaciones —tal y como finalmente sí ha ocurrido— hasta ser escuchados por la dirección, y a lanzar nuevamente un llamamiento a la huelga, desde el que han invitado nuevamente a todos los trabajadores de la multinacional a sumarse a la huelga del personal de tiendas que han convocado en la provincia de La Coruña para el próximo jueves, 27 de junio, fecha de arranque de la nueva campaña de las rebajas de verano.

Desde su encierro, los sindicalistas buscaban “retomar las negociaciones a nivel provincial, tal y como la multinacional se comprometió por escrito ante la CIG, y abordar aquellas cuestiones laborales y sociales que quedaron pendientes” desde el último acuerdo, y que, “reiteran”, “solo afectan a la provincia de La Coruña”, se encargaban de argumentar desde la CIG este mismo lunes, escasas horas antes de que sus delegados fueran desalojados de la sede de Inditex. Por esto mismo, sostenían, y sostienen, no comprenden “la excusa que pone la empresa” para retomar las negociaciones desde una mesa de negociación provincial, y que pasa por señalar el que “ya hay una negociación en Madrid y que el sindicato mayoritario en el estado no lo ‘permite’”. “Un argumento absurdo”, censuran, y que “los delegados de la CIG rechazan”, puesto “que implica ignorar a la representación legal de las trabajadoras y trabajadores de la provincia de La Coruña”.

En consecuencia, denuncian el que la suya no deja de ser una actitud de “desprecio” hacia “todos los empleados de la provincia, tanto por su negativa a sentarse a negociar unas reivindicaciones legítimas, como por el ninguneo y el pasotismo con el que están tratando a la representación legal de las trabajadoras”, por parte de una CIG que “lleva años reclamando estas mejoras”. No obstante, y frente a ello, Inditex tomó “la decisión de llevar las negociaciones a Madrid”, en lo que “solo responde al interés de Inditex de dejar sin efecto la capacidad de lucha que demostraron las trabajadoras de la provincia en las históricas movilizaciones de hace dos años, y por buscar un marco en el que la central sindical nacionalista no sea la fuerza mayoritaria”. Pero “ante esto, y a pesar de las dificultades y el esfuerzo personal que implica, las compañeras están dispuestas a continuar con el cierre”, argumentaban antes del desalojo, y “ya avanzan que las movilizaciones en defensa de las condiciones laborales seguirán adelante”. Un próximo capítulo del enfrentamiento entre la dirección y las trabajadoras y trabajadores de sus tiendas en la provincia de La Coruña que, si no hay ningún último cambio de guión, llegará con la huelga que ya se ha convocado en todas las tiendas de Inditex de la provincia de La Coruña, “para el próximo 27 de junio, coincidiendo con el inicio de la campaña de rebajas”.