España no es país para Pymes: la gran empresa tira del empleo y de la generación de los puestos de trabajo

Madrid – Desde el Gobierno de España han hecho públicos, este 2 de julio, los datos relativos al mes de junio de 2024 de evolución del paro y de afiliados a la Seguridad Social. Indicadores ambos que han ofrecido sus mejores valores de sus respectivas series históricas desde julio de 2008, pero que desde la patronal CEOE han querido poner en su justo contexto, advirtiendo sobre el afianzamiento de un nuevo modelo en el que es ya la gran empresa, y no el extenso tejido de pequeñas y medianas empresas, la que está tirando de esas mejoras en términos de trabajo y de afiliación.

Empezando primeramente por desgranar los datos facilitados este mismo martes, 2 de julio, desde el Ejecutivo, desde el Ministerio de Trabajo y Economía Social hacían públicos los datos de los registros del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) sobre demandantes de empleo, paro, contratos y prestaciones por desempleo al cierre del mes de junio de 2024. Un mes especialmente significativo para terminar de comprender de qué manera y en qué punto el país se prepara para el arranque de la siempre estratégica campaña de verano, y en cómo, a la finalización de la misma, el conjunto de su entramado industrial y empresarial es capaz de mostrarse más o menos temporal y vinculado a los efectos de la estacionalidad. Y desde esa perspectiva, los datos de empleo han terminado ofreciendo la mejor cifra en un mes de junio desde el año 2008, tras situarse en los 2 561 067 millones de parados, tras caer en -46 783 personas (-1,79 por ciento) frente a los registros del mes de mayo, y en 127 775 personas (-4,75 por ciento) frente a los del mismo mes de junio de 2023.

Como datos igualmente de interés, en lo que respecta a la evolución del paro, desde el Ministerio de Trabajo destacan el que, por sectores, el paro desciende en todos los sectores de actividad con respecto al mes de mayo, cayendo en el sector Servicios en -37 025 personas (-1,98 por ciento); en Industria en un -4 388 personas (-2,15 por ciento); en Construcción en -2954 personas (-1,47 por ciento); en Agricultura en 267 personas (-0,29 por ciento); y entre el colectivo sin empleo anterior, en 2 149 personas (-0,89 por ciento). Siendo igualmente reseñable el que, por géneros, el desempleo femenino ha descendido un -1,57 por ciento frente al -2,13 por ciento del paro masculino en junio, pero manteniéndose en el conjunto del año liderando la reducción del paro, con una caída del -4,81 por ciento del paro femenino, hasta las 1 546 204 paradas mujeres, frente a la caída del -4,67 por ciento del paro masculino, hasta los 1 014 863 parados hombres. Mientras que por edad, el paro entre los jóvenes menores de 25 años ha descendido en junio en 3 939 personas respecto al mes anterior (-2,20 por ciento), situándose en 175 136 parados. Unos indicadores ambos, tanto el del paro femenino como el del paro entre los jóvenes, que igualmente pasan a situarse en sus valores más bajos desde 2008.

Aumento de afiliaciones a la Seguridad Social

Junto a los datos del desempleo, desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, hacían públicos por su parte los datos de afiliados a la Seguridad Social al cierre del mismo mes de junio de 2024. Un dato que, como reflejo de esa caída registrada del paro, se ha terminado también situando en unos registros de máximos, liderado por el crecimiento del empleo femenino, entre los jóvenes y, sí, también entre los autónomos.

Poniendo en valor estas apreciaciones, en su cómputo total, desde el Ministerio apuntan a que durante el último mes se han llegado a registrar 71 095 nuevas afiliaciones a la Seguridad Social, que, sumándose a los incrementos previos, terminan por alcanzar la cifra de las 522 949 nuevas afiliaciones con respecto a hace un año, llevando a registrar, al cierre del mes de junio, un total de 21 392 889 afiliados. Un desempeño que lleva a la cifra a elevarse hasta un +9,1 por ciento frente a su valor previo a la irrupción de la pandemia por coronavirus, crecimiento que se situaría, valoran desde el Ministerio, muy por encima de los datos de generación de empleo de las grandes economías europeas de Francia (+5,2 por ciento), Italia (+3,9 por ciento) y de Alemania (+1,5 por ciento) para el mismo periodo, en el que el resto de los países de la Unión Europea han seguido un desempeño prácticamente plano (+0,1 por ciento).

Como datos de interés, se destaca el crecimiento de las afiliaciones de las trabajadoras mujeres, con 8 310 nuevas afiliadas más con respecto al mes de mayo, y en lo que termina dejando la cifra en un total de 10,1 millones de mujeres afiliadas, el valor más alto de toda la serie, frente a los 11,3 millones de afiliados hombres. Mientras que por edad, los jóvenes se mantienen a la cabeza del aumento de las afiliaciones, protagonizando un aumento de un +15,5 por ciento desde 2019, frente al +9,6 por ciento en el que se sitúa la media total. Terminando ya por un número de afiliaciones de trabajadores autónomos que ha terminado por su parte situándose igualmente en su registro más alto desde diciembre de 2008, con un total de 3 386 432 trabajadores autónomos, un 36,9 por ciento de ellos mujeres, también su mayor registro histórico, tras un incremento en el mes de junio de 166 452 trabajadores autónomos.

“Desde la entrada en vigor de la reforma laboral, la afiliación entre los menores de 30 años ha aumentado a un ritmo mucho más elevado que el crecimiento medio”, como se refleja desde una serie histórica en la que se recoge que “el empleo entre los más jóvenes ha aumentado un +16,3 por ciento, frente al +7,9 por ciento que lo hizo el conjunto”, no ha dudado en remarcar la misma ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, a lo largo de unas declaraciones difundidas desde el Ministerio.

Con la gran empresa “tirando” de la generación del empleo

Queriendo por su parte analizar y poner en contexto este último registro de evolución del empleo y de afiliaciones a la Seguridad Social, desde la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) no han dudado a la hora de reconocer que se han registrado “mejoras generalizadas” de la afiliación en todos los territorios y sectores de actividad; cuestión nada baladí para un mes durante el cual lo habitual había venido siendo que fuera solamente el sector servicios el que tirase de la economía y del empleo, como adelanto del arranque de la campaña de verano. Siendo esta una evolución que ha terminado dejando tras de sí, y como veíamos, la suma de +71 095 cotizantes de media más a la Seguridad Social, y el descenso del desempleo en -46 783 personas. Unos buenos datos, sobre los que no obstante desde la CEOE advierten, primero, de la tasa de desempleo estructural igualmente alta sobre la que sigue desempeñándose la economía española; y segundo, del hecho de que está siendo la gran empresa la que se está encargando de tirar de esos datos y de la generación del empleo, mientras que la pequeña y mediana empresa siguen languideciendo y diluyendo su peso dentro de la economía española. Un hecho que, argumentan, no dejaría de ser reflejo de las continuas dificultades que encuentran para la hora de seguir desarrollando su actividad.

“Pese a lo alentador de los datos, nos movemos aún en cifras elevadas de desempleo, con un evidente carácter estructural”, por lo que “reforzar la eficacia de las políticas activas de empleo resulta prioritario y, en especial, la formación permanente”, que “será más relevante si cabe con la transformación digital y ecológica y la carencia de profesionales en diferentes sectores, para dar respuesta a las necesidades actuales y futuras del mercado de trabajo”, analizan desde la CEOE. Mientras que “en cuanto a las condiciones laborales, la temporalidad se mantiene en niveles significativamente bajos”, a la vista de las últimas publicaciones realizadas por el Ejecutivo, “con especial descenso en las mujeres y claramente en los jóvenes, situándonos en el entorno de los 14 millones de ocupados con contratos indefinidos, de los que más de 9,6 lo son a tiempo completo”.

Teniendo todo esto en consideración, aún así, y “pese a la resiliencia y fortaleza de nuestro mercado laboral y el esfuerzo y compromiso de las empresas con la economía y el empleo, nuestro tejido productivo, especialmente las pymes y micropymes, que componen la inmensa mayoría de nuestro tejido empresarial, está fuertemente afectado por el incremento de los costes, el exceso de burocracia y la incertidumbre derivada de los continuos anuncios sobre cambios normativos”, advierten desde la CEOE. Y lo estarían hasta el punto de que “de hecho”, advierten, es “la gran empresa” la que “está compensando la caída de trabajadores en las microempresas, donde el peso del empleo sobre el total ha descendido del 21,6 por ciento en 2019 al 18,7 por ciento en mayo de 2024”. “En este contexto”, y desde una postura desde la que parecen dirigir un certero mensaje hacia el Ministerio de Trabajo y hacia su decisión de seguir firmes en su decisión de aprobar, con o sin apoyo de la patronal, la reducción de la jornada laboral, “la predictibilidad es esencial para estimular la inversión y avanzar en la senda del crecimiento y la creación de empleo, los únicos que pueden garantizar la sostenibilidad de nuestro sistema de protección social”.