El “lujo” se hunde en bolsa arrastrado por LVMH

Madrid – Las malas cifras de crecimiento que el gigante del lujo francés LVMH ha presentado esta misma semana, con respecto a la evolución de las ventas del conjunto del Grupo durante el tercer trimestre del año, han terminado por provocar un efecto tsunami en el conjunto de la industria del lujo. Sector cuyas principales espadas han terminado por ver cómo se hundían la cotización de sus títulos durante la sesión de este pasado miércoles, 11 de octubre de 2023, en respuesta a lo que ya se apunta que va a ser un próximo e inminente periodo de “corrección” y de “normalización” para el sector, tres estos últimos años de exorbitado crecimiento durante el que había logrado mostrarse inmune tanto a los efectos de la pandemia, como a los de las tensiones inflacionistas o de conflictos bélicos como la guerra abierta entre Rusia y Ucrania.

Como principal protagonista, y responsable en buena parte, del creciente clima de incertidumbre y cautela que ha pasado ya a dominar en el conjunto de la industria del lujo, era la multinacional del lujo francesa LVMH la que terminaba saliendo peor parada de la jornada de cotización de este miércoles, 11 de octubre de 2023. Primer día en el que entraban a cotizar sus acciones tras la presentación, un día antes, de los resultados registrados por la compañía durante los nueve primeros meses de su actual ejercicio fiscal. Unos estados financieros desde los que se destapaba un brusco enfriamiento de las ventas del holding multinacional francés, tras un último tercer trimestre de ejercicio en el que el conjunto de las ventas del Grupo únicamente habían alcanzado a crecer un +1 por ciento, frente al +16,8 y el +13,2 por ciento que habían seguido experimentando frente al ejercicio anterior, durante, respectivamente, el primer y segundo trimestre de este mismo ejercicio de 2023. Un más que pobre desempeño con el que no conseguían responder a las previsiones de los mercados, y que en consecuencia terminaba hundiendo sus títulos a lo largo de esta pasada sesión del miércoles hasta un -6,46 por ciento, desde los 733,5 euros por acción a los que habían abierto la jornada, hasta los 686,10 euros por título a los que cerraban la sesión las acciones de LVMH en la Bolsa de Valores de París.

Efecto arrastre ante el temor a una “normalización” o “corrección” del sector

Ante la alerta que ya ha provocado el que el enfriamiento de las ventas del Grupo francés no deje de ser más que la primera muestra de la “normalización”, o hasta incluso “corrección”, a la que va a pasar a tener que saber hacer frente el sector de manera inminente, un panorama que se deberá de terminar de concretar a medida que vayan publicándose los estados financieros del resto de las compañías de referencia de la industria, han sido prácticamente todas las multinacionales del sector que se han visto arrastradas por la caída de las acciones de LVMH. Todas las grandes, con la prácticamente única excepción de Prada. Compañía que lograba terminar cerrando en positivo la jornada, liderando así la evolución de un sector del lujo italiano, que junto a Zegna, Tod’s y Ferragamo ha terminado mostrándose más resistente al efecto “arrastre” provocado por el holding internacional francés.

De este modo, y siguiendo en la evolución de las compañías que, de mayor a menor, más se han terminado por ver afectadas ante los posibles riesgos para sus negocios que podrían venir a evidenciar las cuentas de LVMH, a lo largo de esta pasada jornada de miércoles 11 de octubre, las acciones de la multinacional suiza del lujo Richemont terminaron dejándose un -4,04 por ciento, tras pasar de los 113,90 francos suizos a los 109,30 francos suizos por acción. Una aguda caída, tras la que la han seguido Burberry, con una bajada de un -2,98 por ciento de sus acciones, tras pasar de los 1 835,50 peniques a los 1 780,74 peniques por título; Hermès, que no ha logrado librarse del efecto arrastre acumulando una caída de un -1,50 por ciento, con sus acciones pasando de los 1 777,60 euros a los 1 750 euros por título; y Kering, que tras la pronunciada caída provocada por la recomendación negativa del Bank of America a finales de octubre, volvía a ver hundirse sus títulos en hasta un -3,56 por ciento, en una caída que consiguió terminar de corregirse a lo largo de la sesión, pasando de los 434,10 a los que abrían la jornada, hasta marcar un mínimo de 418,65, y terminar repuntando hasta los 427,95 euros, acumulando un caída al cierre de la sesión de un -1,42 por ciento sobre el valor de sus acciones.

Marcando un punto de inflexión en la evolución de las acciones de las multinacionales del lujo, nos encontramos finalmente así frente a las principales representantes del “lujo italiano”. Firmas para en cuyo caso su “corrección” ha venido liderada por una Ermenegildo Zegna, cuyos títulos cotizan en la Bolsa de Valores de Nueva York desde el pasado mes de diciembre de 2021, que ha terminado acumulando una caída de un -1,36 por ciento del valor de sus acciones, tras pasar de los 13,24 a los 13,06 dólares el precio de sus títulos al cierre de la jornada. Una todavía considerable caída, tras la que la han seguido Tod’s, con unas acciones que han pasado de los 32,56 a los 32,20 euros por título, con una caída de un -1,11 por ciento; Ferragamo, con sus acciones acumulando una caída de apenas un -0,5 por ciento, pasando de los 12,09 a los 12,03 euros por título; y encontrando finalmente a Prada como el valor más “resistente” al efecto provocado por LVMH, con unas acciones que en la misma jornada terminaron por revalorizarse un +1,92 por ciento, pasando de los 44,35 a los 45,20 dólares de Hong Kong.