De los derechos de los trabajadores al fin de la moda rápida: La UE toma medidas contra las malas prácticas de la moda
cargando...
En un intento de corregir los errores cometidos en el pasado por el sector de la moda y otros sectores, los legisladores, políticos y comités europeos han empezado a tomar medidas enérgicas contra diversas malas prácticas llevadas a cabo por la industria a través de nuevos proyectos de ley y reglamentos, muchos de los cuales abordan cuestiones de derechos humanos y errores medioambientales. El Parlamento Europeo ha empezado a discutir, debatir y, en ocasiones, aprobar nuevas normas que reconocen estas cuestiones y exigen a las empresas con sede en la UE que mejoren su actuación en estos asuntos.
FashionUnited ha resumido algunos de los proyectos de ley, propuestas y resoluciones más recientes que han salido a la luz en relación con la UE y su industria de la moda.
Explotación laboral y aplicación de prácticas éticas
La semana pasada, el Parlamento Europeo aprobó una normativa para integrar los derechos humanos y el impacto medioambiental en la gobernanza, que obligará a las empresas de todos los sectores a prevenir, poner fin o mitigar el impacto negativo de sus actividades en estos ámbitos cuando sea necesario. Según el proyecto de ley, que se aplicaría a las empresas que comercializan productos en el mercado de la UE y a las europeas que operan en otros países, también tendrán que vigilar y evaluar el impacto de sus socios en la cadena de valor, incluidos los de suministro, distribución, almacenamiento, gestión de residuos y otros. En relación con el medio ambiente, se exigirá además a las empresas que apliquen un plan de transición para limitar el calentamiento global a 1,5 grados.
Las que incumplan la normativa serán responsables de daños y perjuicios y podrán ser sancionadas por las autoridades nacionales de supervisión, lo que puede implicar " "señalar y avergonzar", retirar productos del mercado o recibir multas. Se basa en una propuesta similar presentada por la Comisión Europea para prohibir la venta en el mercado de la UE de productos fabricados mediante trabajo forzoso, legislación que está a la espera de una decisión de la comisión parlamentaria.
El fin de la moda rápida
Una parte fundamental de los esfuerzos actuales de la UE para hacer frente a los problemas de la moda vienen en forma de proyectos de ley y propuestas que buscan principalmente poner fin a la "moda rápida". El Parlamento Europeo ha aprobado recomendaciones para la estrategia de la UE sobre textiles sostenibles y circulares, que exige que los productos textiles vendidos en la UE sean "más duraderos, fáciles de reutilizar, reparar y reciclar". A lo largo de la cadena de suministro, la producción también debe respetar los derechos humanos, sociales y laborales, así como el bienestar medioambiental y animal.
La propuesta es una nueva estrategia esbozada por la Comisión dentro de su paquete europeo de medidas en favor del medio ambiente. Su objetivo último es conseguir que casi todos los bienes físicos del mercado de la UE sean más respetuosos con el medio ambiente, circulares y eficientes energéticamente a lo largo de su ciclo de vida. Otras propuestas del paquete incluyen el establecimiento de un marco regulador que garantice el cumplimiento de los objetivos climáticos y nuevas normas que proporcionen a los consumidores más información para tomar decisiones sostenibles.
Se basa en una resolución adicional adoptada por la Comisión Europea el año pasado, en el marco del nuevo Reglamento de Ecodiseño de Productos Sostenibles (ESPR), cuyo debate está previsto en el Parlamento de la UE y que podría entrar en vigor en 2025. El proyecto introduciría potencialmente pasaportes digitales para una serie de productos, incluida la ropa, y también prohibiría destruir la ropa no vendida.
La eurodiputada Delara Burkhardt se pronunció al respecto: "Los consumidores por sí solos no pueden reformar el sector textil mundial a través de sus hábitos de compra. Si dejamos que el mercado se autorregule, dejamos la puerta abierta a un modelo de moda rápida que explota a las personas y los recursos del planeta. La UE debe obligar legalmente a los fabricantes y a las grandes empresas de moda a operar de forma más sostenible. Las personas y el planeta son más importantes que los beneficios de la industria textil".
A pesar de los esfuerzos y procedimientos llevados a cabo por la UE, su Comisión publicó esta semana un informe en el que identificaba a los 18 Estados miembros que corrían el riesgo de incumplir uno o ambos de los objetivos de reutilización y reciclado de residuos de envases para 2025 y el objetivo de vertido para 2035. Entre ellos se encontraban Portugal, España, Suecia, Francia, Irlanda y Grecia. Mientras tanto, nueve Estados estaban en vías de cumplir los objetivos de 2025, entre ellos Austria, Bélgica, Alemania, Italia y los Países Bajos. El informe señalaba que existían diferencias "significativas" en la gestión de residuos en toda la UE, y añadía que eran necesarias reformas para mejorar los índices.
Textiles y deforestación
Otras nuevas leyes que busca el Parlamento Europeo se centran especialmente en el tratamiento de los textiles que tienen un impacto negativo en el medio ambiente. Un tema que lleva tiempo bajo su radar es el de los microplásticos, diminutas partículas de plástico que proceden de diversas fuentes, entre ellas la ropa y los textiles. Recientemente se impulsó el tema con un Libro Blanco publicado a principios de año en el que se pedía a la UE que obligara a poner filtros en las lavadoras, junto con una demanda más amplia de cambio sistémico en la industria textil. En abril, la Comisión también acogió con satisfacción el voto favorable a una propuesta presentada por la comisión Reach para restringir los microplásticos añadidos intencionadamente a los productos. La propuesta está actualmente sujeta a un examen de tres meses por el Parlamento Europeo y el Consejo antes de que pueda ser adoptada por la Comisión.
La Unión Europea ha acordado prohibir la importación de productos vinculados a la deforestación, medida que se aplica, entre otros materiales, al popular textil de la ropa y el calzado. La UE tiene previsto aplicar controles estrictos que garanticen que no se han dañado los bosques para crear los productos, con estrictas normas de diligencia debida que las empresas deberán cumplir si quieren que los artículos en cuestión entren en el mercado comunitario. De acuerdo con la ley, las empresas también están obligadas a recopilar información geográfica precisa sobre las tierras de cultivo de las que proceden sus materiales para poder comprobar su conformidad.
- De Inditex a Bestseller y H&M: la industria sale a defender una armonización europea de la gestión de los residuos textiles
- El Consejo de la UE aprueba su resolución sobre el Reglamento de Diseño Ecológico
- La Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo aprueba su dictamen contra el “fast fashion”
- La Comisión Europea abre nuevas investigaciones por prácticas contra la competencia en el sector de la moda
- Guía rápida para entender la nueva normativa medioambiental
Este artículo fue publicado originalmente en FashionUnited.UK, y posteriormente traducido del inglés al español y editado por Alicia Reyes Sarmiento.