Birkenstock cambia de ciclo: ya vende más zapatos cerrados que sandalias
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Madrid – Desde la multinacional alemana del calzado Birkenstock, compañía cuyos títulos cotizan en la Bolsa de Valores de Nueva York desde el pasado mes de octubre, acaban de hacer públicos sus estados financieros concernientes al primer trimestre de su nuevo ejercicio fiscal de 2024. Periodo finalizado a fecha del pasado 31 de diciembre de 2023, durante el que la compañía alcanzó a disparar sus ventas un +21,9 por ciento, en lo que al tiempo llegó acompañado de un singular hito para la dos veces centenaria empresa: por primera vez en su historia las ventas de zapatos cerrados han excedido a las de sandalias.
En base a las informaciones hechas públicas de este modo desde su dirección, Birkenstock ha arrancado su nuevo ejercicio fiscal de la mano de un primer trimestre finalizado a fecha del pasado 31 de diciembre de 2023, durante el que la compañía de calzado alcanzó a generar unas ventas totales por valor de 302,92 millones de euros. Cifra que supone un aumento de un +21,9 por ciento con respecto a los 248,49 millones de euros facturados por la compañía durante el mismo periodo de 2022, enmarcado dentro del primer trimestre de su anterior ejercicio fiscal de 2023. Año que supuso todo un auténtico hito para la histórica compañía alemana, en manos de L Catterton desde 2021, y hasta que finalmente terminó convirtiéndose en una compañía cotizada, con su salto a la Bolsa de Nueva York el pasado 11 de octubre. Fecha que llegó para marcar un decisivo punto de inflexión en la historia de la empresa, durante un ejercicio que terminó completando en los 1 491,91 millones de euros en ingresos.
Mientras tanto, y en términos de rentabilidad, la compañía alemana en contra ha cerrado este primer trimestre de su nuevo ejercicio fiscal recogiendo unas pérdidas netas por valor de -7,15 millones de euros. Cantidad que, como dato positivo, supone una contracción de un -22,1 por ciento frente a las pérdidas de -9,18 millones de euros registradas durante el mismo periodo de hace un año; dentro de un anterior ejercicio fiscal de 2023 que la multinacional del calzado terminó completando en un beneficio neto, en positivo, por 75 millones de euros, pero tras un último cuarto trimestre durante el que afloraron unas pérdidas netas por valor de -28,28 millones de euros. Cifra que logra mejorarse con creces en el contexto del arranque de este nuevo año fiscal, y que desde la dirección de Birkenstock tratan de poner en contexto y de relativizar, advirtiendo de que la rentabilidad de la compañía se seguirá viendo afectada de manera puntual, como resultado de las inversiones que se están llevando a cabo con el fin de asentar su crecimiento a largo plazo.
“Nuestros resultados del primer trimestre de 2024 demuestran una vez más la resiliencia de nuestro modelo de negocio, así como la fuerte y sostenida demanda con la que cuentan nuestros productos”, no ha dudado en querer salir a remarcar Oliver Reichert, director ejecutivo de Birkenstock, a lo largo de unas declaraciones hechas públicas desde la misma dirección de la multinacional alemana. “Gracias a nuestro ideado modelo de distribución, la demanda ha continuado superando a la oferta en todas las regiones, canales y categorías”, subrayaba. Aspecto que justamente llegaría para reforzar el compromiso de la compañía con sus inversiones estratégicas para el largo plazo, en lo que no obstante, y “como comunicamos anteriormente”, advertía Reichert, tendrá “un impacto temporal y estudiado sobre nuestra rentabilidad”. “Sin embargo, en el mediano plazo, confiamos en que continuaremos cumpliendo nuestros objetivos de alcanzar un margen de beneficio bruto superior al 60 por ciento y un margen EBITDA ajustado de alrededor de un 30 por ciento”.
Con más ventas de zapatos que de sandalias
Analizando, brevemente, el comportamiento experimentado por la compañía a lo largo de este primer trimestre de ejercicio, por mercados, desde la dirección de Birkenstock destacan un aumento generalizado de las ventas de la compañía en todas las regiones en las que opera. Evolución que ha dejado todavía más a la región de las Américas como la principal fuente de ingresos de Birkenstock, con ventas por 181,45 millones de euros (+14 por ciento con respecto al ejercicio anterior); seguida por Europa, con ventas por 80,13 millones de euros (+32 por ciento); y de la región de APMA (Asia Pacífico, Medio Oriente y África), con ventas por 39,47 millones de euros (+47 por ciento).
Mientras tanto, y por canales de distribución, los crecimientos de las ventas han sido igualmente generalizados, pero destacándose a este respecto la capacidad de la compañía para reforzar sus ventas DTC directas al cliente final, que ya suponen un 53 por ciento de las ventas totales de la compañía, tras elevarse en este primer trimestre hasta los 160,65 millones de euros (+24 por ciento). Mientras que por su parte las ventas mayoristas B2B continuaron igualmente creciendo a doble dígito, situándose en los 140,41 millones de euros (+19 por ciento).
Como dato singular, y en materia de producto, desde la misma dirección de Birkenstock resaltan el hecho de cómo “el crecimiento de los ingresos también llegó respaldado por el cambio hacia los modelos de punta cerrada, que por primera vez excedieron la participación en ventas de sandalias de la compañía”, apuntan. Sin duda un nuevo y verdadero hito para Birkenstock, que logra así afianzarse en el sector del calzado, dejando de lado su perfil y su calificación como “marca de sandalias de lujo”, y en lo que deberá de llegar para destapar su mayor potencial de crecimiento y de penetración en el sector, a medida en la que consiga seguir distanciándose de la natural temporalidad a la que se había venido, hasta ahora, viendo ligada, resultado de su perfil como compañía especializada en la producción de sandalias.
Mantenimiento de las perspectivas para 2024
De cara a lo que resta de ejercicio, y contemplando para ello esta última actualización sobre sus cuentas que supone la presentación de estas cuentas del primer trimestre del ejercicio de 2024, desde Birkenstock han comunicado que se mantienen en las mismas perspectivas anuales y para el largo plazo que ya adelantaron el pasado mes de enero, coincidiendo con la publicación de sus resultados de cierre del ejercicio de 2023.
En base a esas previsiones, para 2024 desde Birkenstock esperan llegar a cerrar el año con un crecimiento de las ventas de entre un +17 a un +18 por ciento sobre las de 2023, en lo que se traducirá en unos ingresos de entre 1 740 a 1 760 millones de euros. Un aumento de la facturación que confían en que termina viéndose reflejada en un Ebitda ajustado de entre 520 y 530 millones de euros, a tipo de cambio constante, traducido en un margen Ebitda ajustado de aproximadamente un 30 por ciento. Mismo en el que prevén mantenerse en el largo plazo, con ligeras “variaciones” que variarán en función de las inversiones que continúen llevándose a cabo con el fin de garantizar satisfacer el futuro aumento de la demanda, y de seguir estimulando el crecimiento y los beneficios de la compañía, con una mirada fija en el medio/largo plazo.
“Dado nuestro continuo impulso, tenemos aún más confianza en la orientación para el año fiscal 2024 que proporcionamos el mes pasado”. “Nuestro trabajos de expansión de la capacidad están avanzando según lo esperado, mientras continuamos mitigando el impacto de la inflación”; y “en consecuencia”, añaden desde Birkenstock, “seguimos totalmente comprometidos con nuestros objetivos de rentabilidad a medio plazo, para lograr un margen de beneficios bruto superior al 60 por ciento y un margen EBITDA ajustado del 30 por ciento”.