Amancio Ortega puja para hacerse con parte de la “fibreco” de Telefónica y Vodafone

Madrid – El empresario Amancio Ortega, fundador y accionista mayoritario de la multinacional española de la moda el Grupo Inditex, trata de seguir diversificando su cartera de activos e inversiones, para lo que en esta ocasión ha vuelto a poner su foco de atención en el terreno de las telecomunicaciones. Ámbito para el que se prepara a reforzarse, como nuevo socio minoritario de referencia dentro del capital de la nueva empresa de fibra, “fibreco”, creada de manera conjunta entre Telefónica y Vodafone España.

Constituida bajo el nombre en clave de “Proyecto Milos”, tal y como se encargaban de adelantar desde el medio económico expansión a comienzos del pasado mes de diciembre de 2024, Telefónica y Vodafone España, en propiedad del fondo de inversión británico Zegona Communications desde el pasado mes de mayo, se han aliado para crear esta empresa conjunta de fibra óptica, con una valoración estimada de 2 000 millones de euros. Empresa que en el momento de su constitución, según informaban desde la misma compañía española de telecomunicaciones a comienzos del pasado mes de noviembre de 2024, quedaba repartida con el 63 por ciento de su capital en manos de Telefónica, y el 37 por ciento restante en las de Vodafone España, contando con una red que cubre aproximadamente unos 3,6 millones de hogares, con unos 1,4 millones de clientes, lo que representaría un nivel de penetración de aproximadamente el 40 por ciento en el mercado. Unos indicadores de base, para una empresa de fibra que se constituía con el objetivo social de actuar como una firma de fibra tanto para los servicios minoristas como mayoristas de Telefónica como de Vodafone España, y que quedaba pendiente de recibir las autorizaciones regulatorias pertinentes, las cuales se esperaban para el arranque de este ejercicio de 2025. Un hecho tras el cual, señalaban ya entonces desde Telefónica, ambas partes, Telefónica y Vodafone, manifestaban su intención de incorporar a un tercer inversor en el capital de la nueva empresa de fibra, en la que en cualquier caso Telefónica seguiría manteniendo una participación mayoritaria, en una sociedad que, según las fuentes cercanas a la alianza estratégica entre ambas compañías consultadas por el citado medio económico, se espera que llegue a generar una rentabilidad positiva anual de unos 125 millones de euros, para a partir del tercer año tras su constitución.

A pesar de la aparente solidez con la que cuentan las cifras que han acompañado a la constitución de esta nueva empresa conjunta, en cualquier caso los ingresos y beneficios que Milos alcance a generar en beneficio de sus accionistas no estarían garantizado, y dependerán en cualquier caso del propio desempeño y rendimiento alcance a generar a través de sus propias operaciones. O lo que es lo mismo, de la capacidad de Milos para generar ingresos a través del alquiler de su red a Telefónica, Vodafone y a cualquier otro nuevo operador de telecomunicaciones; ingresos que igualmente fluctuarán en función de los clientes que cada grupo termine por contar sobre el área de actuación en el que se despliega la red de fibra de Milos.

Con Amancio Ortega y Pontegadea partiendo como “favoritos”

Tras la constitución de esta nueva sociedad, estaba en el ánimo de ambos grupos de telecomunicaciones el de tratar de monetizar los activos de Milos y el de recuperar buena parte de la inversión empleada en la construcción de su red de fibras, abriendo su capital a un nuevo socio minoritario de referencia. Un propósito para el que se abrió, según las mismas fuentes, un proceso encaminado para la venta de cerca del 40 por ciento del capital social de Milos; proceso para el que habría entrado en puja, entre otros, el fundador de Inditex.

A este respecto, y según las informaciones que han terminado saliendo a la luz este mismo viernes 31 de enero de 2025, adelantadas nuevamente por Expansión, siguiendo con los plazos con los que BBVA y Barclays, como asesores financieros, habrían venido coordinando el proceso de venta, esta semana se han terminado de presentar las ofertas, no vinculantes, por el cerca de ese 40 por ciento del capital de Milos que Vodafone y Telefónica se habrían decidido por sacar a la venta. Una operación por la que estiman un valor de entre 800 a 1 000 euros por la adquisición de esa más que considerable participación minoritaria dentro de la fibreco, horquilla que es en la que rondarían las ofertas que ya habrían presentado la multinacional aseguradora francesa Axa, a través de su gestora de activos e inversiones Axa Investment Managers; la firma de inversión, con sede también en Francia, Antin Infrastructure Partners; y la firma de inversión, también francesa, Vauban Infrastructure Partners, filial de Natixis Investment Managers y socia de Telefónica en Bluevia, la red de fibra que constituyó la operadora en 2022 y de la que posteriormente, como va a tratar de hacer ahora con Milos, pasó a vender parte de su capital social como parte de su estrategia para reducir deuda y optimizar operaciones. Potenciales compradores a los que se ha sumado también Amancio Ortega, a través de su sociedad de inversión Pontegadea. Siendo justamente la suya, según se valora desde el ya citado medio económico, la oferta que más temían que se presentase el resto de los potenciales interesados, habida cuenta de tanto el capital como las mejores condiciones de partida con las que cuenta Pontegadea, cuyos objetivos de rendimiento de sus inversiones resultarían menos “exigentes” que los de los fondos, permitiéndole así el contemplar presentar una oferta más elevada que con respecto a la que de partida habrían contemplado el resto de los interesados.

En el caso de que Pontegadea termine por imponerse en el proceso de venta de Milos, Amancio Ortega pasaría a volver a diversificar su cartera de activos y de inversiones más allá del ámbito inmobiliario, en el que se focalizan buena parte de las operaciones de inversión de Pontegadea, así como a reforzar su alianza con Telefónica. Compañía de la que Ortega ya es socio, de la mano de Pontegadea, con el 30 por ciento de Pontel, la sociedad conjunta que comparte con Telefónica y a través de la cual controlan el 100 por cien del capital de la compañía de infraestructuras de telecomunicaciones Telxius Telecom tras la salida, en enero de 2023, del grupo de inversión estadounidense KKR. Asociación que volvería a darse ahora en el caso de Milos, pero a tres bandas, con Telefónica reduciendo su actual participación hacia se estima que algo más del 50 por ciento, lo que le permitiría seguir controlando la sociedad, con Vodafone reduciendo su peso hasta cerca de un 10, y con el 40 por ciento restante en manos de Pontegadea, o del otro potencial comprador que termine por imponerse en este proceso de venta.