Adidas mantiene hundidos sus beneficios un -70 por ciento
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Madrid – Ampliando, y confirmando, las cifras que adelantasen de manera provisional a mediados del pasado mes de octubre, desde la multinacional europea de la moda deportiva Adidas acaban de presentar los estados financieros de la compañía concernientes al tercer trimestre de su actual ejercicio fiscal de 2023. Periodo de tres meses finalizado a fecha del pasado 30 de septiembre, que la compañía alcanzó a completar registrando un desempeño que volvió a situarse por encima de lo esperado, gracias al revulsivo que sus cuentas están encontrando en la comercialización de los artículos restantes de su extinta colaboración con la firma de moda Yeezy de Kanye West, en lo que no obstante no impidió a la multinacional europea volver a experimentar una nueva caída tanto de sus niveles de facturación como de beneficios.
Ampliando, y consolidando, las informaciones concernientes a sus cuentas presentadas por la multinacional el pasado mes de octubre, ahora desde Adidas informan de un tercer trimestre de ejercicio que la compañía terminó por completar registrando unas ventas netas totales por valor de 5 999 millones de euros. Una cifra un -6,38 por ciento inferior a los 6 408 millones de euros facturados durante el mismo periodo de hace un año; así como un -6,4 por ciento menos que con respecto a los 6 410 millones de euros ingresados durante el mismo periodo de 2019, el último ejercicio que como ya conocemos llegó a completarse al margen de la pandemia por coronavirus. Siendo esta una cantidad que termina por sumarse a los 5 274 millones de euros facturados durante el primer trimestre de este ejercicio de 2023, y a los 5 343 millones de euros en ventas del segundo trimestre, dejando como resultado a Adidas sumando a lo largo de estos primeros nueve meses de ejercicio unas ventas totales por valor de 16 616 millones de euros, un -3,98 por ciento menos que frente a los 17 306 millones facturados durante el mismo periodo de hace un año, y un -6,66 por ciento menos que con respecto a los 17 802 millones de euros ingresados durante el mismo periodo de 2019.
Mientras tanto, y en términos de rentabilidad, Adidas ha cerrado este tercer trimestre de ejercicio registrando un beneficio neto, en positivo, por valor de 280 millones de euros. Una cantidad que se sitúa un -20 por ciento por detrás de los 352 millones de euros de beneficio neto del mismo periodo de hace un año, así como un -56,6 por ciento por debajo frente a los 646 millones de euros de beneficio neto del de 2019. Siendo en este caso un valor que termina de compensar las pérdidas por -30 millones de euros registradas durante el primer trimestre de este actual ejercicio fiscal, y por sumarse a los 95 millones de beneficio del segundo trimestre, para terminar dejando a Adidas sumando un beneficio neto total por valor de 345 millones de euros. Una cantidad un -70 por ciento inferior a los 1 151 millones de euros de beneficio registrado durante los nueve primeros meses de hace un año, y de un -80,9 por ciento frente al de 1 809 millones de euros del de 2019.
“El tercer trimestre fue otro trimestre en el que observamos buenos avances, y en el que los resultados volvieron a ser mejores de lo esperado”, ha salido a defender Bjørn Gulden, actual director ejecutivo de Adidas, a lo largo de unas declaraciones hechas públicas por la misma dirección de la multinacional deportiva. “Por supuesto, sabemos que nuestro desempeño actual no es lo suficientemente bueno, pero ya hemos señalado desde el principio que necesitamos tiempo para reconstruir esta fantástica marca y llevar la compañía de vuelta al lugar que pertenece: la cima como la mejor marca deportiva del mundo”.
Caída generalizada de las ventas, con avances sobre los niveles de inventario
Analizando, brevemente, la evolución registrada por la compañía a lo largo de este último tercer trimestre del año, por mercados, las ventas de Adidas retrocedieron en todas y cada una de las principales regiones en las que se encuentra activa la multinacional deportiva, siendo especialmente acuciada la caída de las ventas registrada en América del Norte. Región que se está viendo afectada por unos niveles de inventario especialmente elevados, frente a los que se está respondiendo con una caída de los niveles de facturación en el canal mayorista, siendo esta una problemática sobre la que, en líneas generales, la compañía asegura haber logrado empezar a corregir, reduciéndolo en un -23 por ciento frente al volumen de hace un año, hasta los 4 800 millones de euros.
En consecuencia, y por regiones, Emea volvió a situarse como la principal fuente de ingresos de Adidas, registrando una caída de las ventas hasta los 2 396 millones de euros (-2,7 por ciento); una caída que igualmente experimentaron las regiones de América del Norte, hasta los 1 484 millones de euros (-15,2 por ciento); de la Gran China, hasta los 870 millones de euros (-7,1 por ciento); en América Latina, hasta los 621 millones (-1,8 por ciento); y en Asia-Pacífico, hasta los 567 millones (-2,1 por ciento).
Una última evolución sobre las ventas que, en términos de todo el año, deja a los tres principales mercados de Adidas por debajo de sus niveles de hace un año, con Emea registrando ventas en estos nueve meses por 6 371 millones de euros (-1,6 por ciento); Norteamérica por 4 060 millones (-16,5 por ciento); la Gran China por 2 520 millones (-5,2 por ciento); y con Asia-Pacífico manteniéndose por encima con ventas por 1 684 millones de euros (+3 por ciento), y a América Latina por valor de 1 812 millones de euros (+16,1 por ciento).
“Siento que estamos mejorando cada día”, apunta Gulden. “Los equipos están mostrando la actitud correcta, aceleramos constantemente nuestros procesos de decisión y estamos logrando los avances que esperaba”. No obstante, “necesitamos tiempo para llevar los suficientes productos adecuados a los mercados, y para hacer que estos idóneos productos sean más visibles para nuestros consumidores”. Un compromiso para el que “sentimos un gran interés y apoyo por parte de nuestros socios minoristas”, un canal en el que “también están mejorado, aunque a un ritmo más lento”, unos niveles de inventario que, en su canal de venta directa DTC, Adidas ha logrado reducir en “un -23 por ciento, que es incluso un poco más de lo que habíamos previsto”. En respuesta a esta evolución, “nuestro enfoque en nuestro negocio DTC es claramente el de ofrecer menos descuentos, aumentar la participación en el precio total y equilibrar la construcción de marca con el éxito comercial”, para lo que “también hemos empezado a ver buenos avances en este ámbito”, en el que se espera no obstante que “los niveles de inventario en el mercado estadounidense sigan impactando nuestro negocio por un tiempo”.
Perspectivas mejoradas, trimestre a trimestre
Precisamente de cara a lo que resta de ejercicio, desde Adidas se mantienen sobre su última actualización, al alza, sobre sus previsiones anuales, adelantada a mediados del pasado mes de octubre como resultado del nuevo éxito registrado por la compañía con la venta de un nuevo paquete de artículos del stock que mantienen almacenado de su extinta línea Yeezy Adidas. Manteniéndose así pues sobre las perspectivas de registrar al cierre del ejercicio una caída de los ingresos en un rango de un solo dígito de valor bajo, y no medio como preveían antes de la última actualización de perspectivas; el llegar a registrar un beneficio operativo subyacente de alrededor de 100 millones de euros, frente al beneficio subyacente plano que venían estimando con anterioridad; y unas pérdidas operativas estimadas de 100 millones de euros, en lugar de 450 millones, como resultado de los cerca de 300 millones de euros que la compañía ha llegado a facturar con los dos lanzamientos de artículos de Yeezy llevados a cabo durante el segundo y el tercer trimestre del ejercicio.
“En el cuarto trimestre continuaremos enfocándonos en nuestras prioridades, y asentando las bases para un mejor 2024 y unos exitosos 2025 y 2026”, sostiene Gulden. “Este año, hemos mejorado nuestras perspectivas trimestre tras trimestre, y ahora esperamos que los ingresos a una tasa de cambio neutral caigan en el valor de un solo dígito de rango bajo (comenzamos el año con una caída de un dígito de rango alto), y una pequeña pérdida operativa de 100 millones de euros, en la que se incluye una posible cancelación de 300 millones de euros del inventario restante de Yeezy y una partida de gastos de 200 millones, relacionada con la revisión estratégica” del modelo de negocio de Adidas, cuando “comenzamos el año con una perspectiva negativa de llegar a registrar unas pérdidas operativas de 700 millones de euros”.