Protagonistas: José Miró

El énfasis en una moda sostenible ha sido la clave para que José Miró haya sido el diseñador elegido para hacer los uniformes del stand de España en la Expo Shangai. Es que a través de sus colecciones de “ecouture”, el creador mallorquí es la

mejor evidencia de que el cuidado ambiental no está reñido con el buen gusto en la moda.

M

iró inició su trayectoria profesional en la mítica casa francesa Thierry Mugler. De regreso a España, cuatro años más tarde, trabaja como jefe de studio y taller de Agatha Ruiz de la Prada y decide abrir su propia firma. Su debut en la Madrid Fashion Week le valió el premio L’Oreal a la mejor colección. Con 35 años de edad, hoy está presente en doce mercados internacionales entre ellos Estados Unidos, Alemania y el Reino Unido.

¿Qué recuerdas de tus años de trabajo en Thierry Mugler?
Cuando me paro a mirar atrás, además de mil y una anécdotas de todo tipo, lo que recuerdo de aquellos años es todas las cosas que aprendí a base de mucho esfuerzo, trabajo y tesón. Yo era muy joven, la primera vez que salía de España y no hablaba francés. Pero era como una esponja, y estaba en uno de los mejores sitios, además de estar cumpliendo uno de mis sueños, por lo tanto lo que tocaba era fijarse en todo lo que me rodeaba –eso lo sigo haciendo ahora- y aprovechar la oportunidad de aprender de los mejores.

¿En qué ha influido el haber trabajado con diseñadores franceses en tu enfoque de la moda desde le punto de vista creativo y del negocio?
Paris es el centro de la moda por excelencia y uno de los mejores lugares del mundo para formarse en esto. El know how que acumulan es impresionante y su visión de la moda es completamente internacional. El enfoque que le dan al diseño, en todos los aspectos, es único y fundamental sobre todo a nivel creativo. Atesoran historia en su forma de trabajar y crear, pero siempre teniendo en cuenta la innovación en sus diseños, el lema por excelencia es que “nada es imposible”. A nivel negocio menos, puesto que la eterna lucha francesa es el comercial versus el diseñador.

¿Qué es lo que hace que la moda francesa esté tan bien considerada internacionalmente y no la española?
Historia y buen hacer. Es uno de los estandartes franceses y el Estado desde hace mucho tiempo así lo consideró.

Tu colección debut en España ganó el premio LOreal en Cibeles. El listón se ha fijado muy alto desde el principio. ¿Cómo haces para mantenerlo?
Gané el premio con la primera colección que presenté en Cibeles Madrid Fashion Week, Baraka, y nunca me ha parecido que existiera ningún listón, las colecciones surgen como consecuencia principalmente del trabajo y son una evolución constante y cambiante. Mi trabajo me apasiona, me gusta crear, investigar, recrearme en cada pieza e intento transmitir esos sentimientos positivos en cada una de ellas.

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tilizas en tus colecciones tejidos 100 por ciento ecológicos. ¿Nos puedes dar ejemplos?
El diseño y la sostenibilidad me parecen claves para el momento que estamos viviendo. Desde hace varias temporadas parte de los tejidos que utilizo son totalmente ecológicos, cosa que no es nada fácil. Uso desde algodón orgánico, algodón regenerado, lana, seda, etcétera, tintados con bayas, flores, es decir, sin agentes químicos y respetando la legislación. Sobre todo lo que quiero es ir más allá de la típica camiseta eco, quitar esa etiqueta y crear desde vestidos para diario hasta piezas con sedas y bordados para momentos más especiales.

¿Es compatible la moda como industria del lujo con la sostenibilidad?
Sí, es perfectamente compatible. Mi colección Verano 2011 tiene esa premisa, diseño y sostenibilidad, con tejidos eco pero muy ricos en texturas, calidades y color.

¿Cómo has adaptado tu propuesta eco a los uniformes del Pabellón español en la expo de Shangai?
Cuando recibí la convocatoria al concurso lo vi claro, el lema de la Expo era “mejor ciudad, mejor vida”, tenía que utilizar un tejido cien por ciento ecológico para desarrollar mi propuesta. Intenté romper con el encorsetamiento que normalmente desprenden los uniformes para crear un diseño cercano, simpático, que no intimidara a los visitantes. La arquitectura del pabellón de España fue clave tanto a la hora de diseñarlo, con formas redondeadas, anatómicas, pero muy sutiles, tanto como para la selección del tejido y el color. Los tejidos fueron algodón orgánico y regenerado en cuyos procesos de fabricación, tintado y secado no interviene ningún producto químico.

¿Dónde realizas la producción de tus colecciones?
En España, aunque cada vez es más y más difícil.

¿Existe una vínculo entre las prendas de vestir que diseñas con las colecciones de tocados, joyería, carteras, o van por caminos diferentes?
Sí, siempre hay un hilo conductor, pero también se pueden crear colecciones por separado sin ningún problema.

¿Qué se necesita para vivir de la moda en el mercado español?
Mucho trabajo, y sobre todo a nivel general que haya consumo nacional, eso es importantísimo. Tanto Francia, Italia como Estados Unidos son grandes consumidores de su propio diseño, en España no pasa lo mismo, hay que potenciar e incentivar de alguna forma dicho consumo.

Foto 1) José Miró © Nando Esteva
Foto 2) José Miró Verano 2011
Foto3) José Miró Colección Verano 2011