BERSHKA reinventa su flagship store en Ibiza: Un espacio radical y sensorial para la generación Z

BERSHKA ha inaugurado en el corazón de Ibiza una nueva flagship store que rompe con todos los esquemas tradicionales del retail. Concebida como un espacio vivo, escultórico y de fuerte carga sensorial, esta tienda se presenta como un nuevo punto de encuentro para la Generación Z: intuitiva, híbrida y abierta a la contradicción.

Ubicada en la Avenida Bartomeu de Roselló, 28-30, la tienda se divide en dos espacios diferenciados con accesos independientes:

• BERSHKA Woman, con 354 m2, y
• BERSHKA Man, con 126 m2.

Cada espacio ha sido diseñado con una narrativa propia, pensada para potenciar la experiencia del usuario y conectar con el espíritu mestizo y libre de la isla.

En la tienda de mujer, el recorrido gira en torno a una gran estructura metálica verde menta conocida como “El Lingote”, que atraviesa el espacio y funciona como pasarela, escaparate y dispositivo inmersivo. Esta pieza monumental marca el ritmo del recorrido y alberga zonas expositivas que se descubren al paso. La experiencia culmina en los probadores, bañados en una luz rosa translúcida que genera una atmósfera lúdica y envolvente.

La tienda de hombre, por su parte, apuesta por la verticalidad. A pesar de su menor superficie, la gran doble altura dota al espacio de una presencia monumental. Un pilar central, rodeado por mobiliario diseñado a medida, organiza la circulación e introduce una estética escultórica coherente con el resto del proyecto. En la zona de probadores, la luz verde y los materiales vibrantes refuerzan el carácter inmersivo.

En ambas tiendas, los materiales y la iluminación han sido seleccionados con precisión: piedra caliza, hormigón gunitado, metacrilato blanco y pavimento de mármol aglomerado se combinan en una paleta neutra y táctil que pone el foco en el producto. La iluminación, suave y direccional, contribuye a construir una atmósfera envolvente sin interferir en la lectura espacial.

La fachada, unificada por un potente despiece de piedra caliza, diferencia sutilmente cada tienda mediante matices de color: más claro para mujer, más gris para hombre. Una marquesina compartida refuerza la continuidad visual desde el exterior.

Este proyecto redefine lo que puede ser una tienda: no solo un espacio comercial, sino un entorno que comunica, propone y genera una experiencia memorable. La intervención ha sido desarrollada junto al estudio de arquitectura e interiorismo El Departamento, que firma una propuesta arriesgada, contemporánea y alineada con la visión de Bershka para el retail del futuro.