Circoolar lanza una campaña para evitar, en un momento de cambio de uniformidad, que más de 20 millones de prendas acaben en el vertedero

• La compañía pionera en el diseño y comercialización de ropa laboral ecológica, 100% eco-friendly y reciclable al final de su vida útil, logra el residuo casi cero mediante el eco-diseño y su servicio de recogida
• Bruselas presenta una batería de propuestas para que las prendas sean más duraderas, reutilizables, reparables y reciclables

 

Barcelona, 28 de abril de 2022.  La Comisión Europea ha presentado recientemente un paquete de medidas alargar el ciclo de vida de los productos textiles fomentando el eco-diseño, el uso materiales reciclados y la mejora en la duración prendas. La propuesta legislativa amplía el actual marco sobre diseño ecológico - y los requisitos que deben cumplir-, no solo considerando la eficiencia energética sino también cumpliendo criterios de circularidad y de reducción del impacto sobre el medioambiente y social.

“En un momento en el que la Comisión Europea está poniendo su foco estratégico en la economía circular, con su Plan de Acción para la economía Circular, ¿cómo van a reaccionar el conjunto de las empresas frente a impacto causado a través del diseño, producción y confección de su ropa laboral?”, se pregunta Luis Ribó, cofundador de Circoolar. “Nuestro objetivo es que en este momento clave, los decisores de compra valoren la posibilidad de introducir la sostenibilidad en su ropa laboral y, en este sentido, el cambio de uniformidad para el próximo invierno se presenta como una oportunidad excepcional para integrar la sostenibilidad en su forma de vestir”, añade Ribó.

Cambio de uniforme

Entre los meses de abril y mayo las empresas suelen tomar las decisiones referentes a la uniformidad para la temporada de invierno. A diferencia de la ropa de uso cotidiano, no existe un mercado de reutilización, sea por la presencia de logo corporativo, por las sensibilidades del uso de la propia marca o por razones de seguridad.

La industria textil genera más de 1 millón de toneladas de residuo solo en España, situándose entre las 4 industrias más contaminante del mundo y la segunda en mayor consumo de agua. Unido a que la reutilización en el sector la moda es apenas del 1%, unos datos preocupantes que afectan también a la vestimenta laboral teniendo en cuenta que 1 de cada 3 personas activas viste ropa laboral.