Palau socks: calcetines solidarios con alma eco

Madrid- Bajo el lema “Every sole matters”, un juego de palabras entre “sole” (suela) y “soul” (alma), que nos recuerda que todas las personas cuentan por igual, llega Palau Socks, una marca con vocación solidaria y alma eco.

La marca, que comercializa calcetines “solidarios”, empezó su andadura en diciembre de 2019 y ya ha realizado su primera donación por un total de 2.250 euros, a la ONG BarcelonActua. En palabras de Laia Serrano, fundadora y directora de BarcelonActua: “El proyecto Palau Socks nos ha permitido, por una parte, sensibilizar sobre la realidad de las personas refugiadas e inmigrantes que llegan a nuestro país y por otra, conseguir recursos para hacer sostenibles los programas que llevamos a cabo dirigidos a este colectivo”.

La idea de Palau Socks nació de la mano de Daniel Stone, Johanna Regårdh y Maria Cardona, después de conocer a Amílkar, un sin techo de orígenes mexicanos a quien ayudaron a salir de la calle, gracias a Arrels Fundació. “La historia de Amílkar nos llevó a replantearnos muchas cosas sobre nuestro papel en la sociedad y nos dio la fuerza para empezar una iniciativa sostenible que apoyara a los más necesitados de nuestra ciudad”, comentan sus fundadores.

La comunidad, su principal foco

Con el foco puesto siempre en la comunidad, todos los beneficios de Palau Socks van destinados a fundaciones, ONGs y entidades que ofrecen ayuda directa a los más necesitados, particularmente a refugiados, personas sin hogar y personas en riesgo de exclusión social. El equipo de Palau Socks, formado por una quincena de voluntarios de diferentes áreas de especialidad, ha estado involucrado este último año en varias actividades que aporten a la sociedad.

En ese sentido, han entrenado a un equipo de fútbol de refugiados, han repartido comida por las calles de la ciudad o han acogido a refugiados durante varios meses en sus casas. Su objetivo para el próximo año es claro: seguir organizando acciones de todo tipo que contribuyan a una mejor inclusión social y poder dar un empleo digno a, como mínimo, una persona sin recursos.

Un producto local y sostenible

Diseñados en Barcelona por la finlandesa Johanna Regårdh y fabricados en Braga (Portugal) por la empresa familiar A.J. Gonçalves, con una larga trayectoria en producción de calcetines desde 1966, los Palau Socks son un producto 100 por 100 sostenible, tanto por sus materiales como por su embalaje (en bolsas de algodón orgánico).

Además, la podóloga Manal Oulad, voluntaria también de la iniciativa, ha certificado su diseño y comodidad, así como su perfecta adecuación al arco del pie, por lo que se pueden utilizar también para actividades deportivas. “Proyectos como este permiten acercar realidades de colectivos vulnerables a mucha gente, dándoles la oportunidad de implicarse económicamente, con importes puntuales y asumibles para una gran parte de la población, recibiendo por ello un producto de gran calidad, diseño y que además es sostenible”, ha recalcado Laia Serrano, de BarcelonActua.

Crédito de foto: Palau socks