Mango lleva a Barcelona su nueva imagen “mediterránea” y anuncia un ambicioso plan de inversiones para la renovación de sus tiendas

Madrid – La firma de moda española Mango ha decidido celebrar el que toda su red comercial de tiendas ha vuelto a abrir sus puertas, algo que no sucedía desde el pasado otoño y que la compañía espera que presagie una pronta vuelta a la normalidad, emitiendo dos anuncios que marcarán sendos nuevos hitos para la multinacional. Por un lado el de la reapertura de su flagship store ubicada en el Paseo de Gracia de Barcelona, uno de los establecimientos más emblemáticos de la cadena y el primero en España que ha pasado a contar con el nuevo concepto de “tienda mediterránea” que desde Mango presentasen desde su tienda alemana de Düsseldorf. Y de otro, con el anuncio de la puesta en marcha de un ambicioso plan de inversiones con objeto de acometer la renovación de una parte más que significativa de su red comercial.

Empezando por este último punto, al que de otra parte viene asimismo a servir de inicio la reapertura de la tienda del Paseo de Gracia, se trata de un ambicioso plan estratégico de actualización del parque de tiendas de la compañía, que se llevará a cabo a lo largo de los próximos años afectando a una parte importante de la red de tiendas que Mango mantiene en la actualidad repartidas por más de 110 países, y que incrementó el pasado 2020 hasta superar la cifra de los 2.220 establecimientos tras la inauguración de 43 nuevos puntos de venta. Un abrumador plan de transformación que arranca así pues este mismo año, un ejercicio pare el que la cadena de moda española tiene programado llevar a cabo inversiones por un valor total de 10 millones de euros, que destinará a la actualización de 42 puntos de venta ubicados, en esta primera fase, en las principales ciudades europeas. Unos mercados entre los que ocupará una especial importancia España, como país de origen y principal nicho de la compañía, al reunir sobre su territorio un total de 18 de esas 42 tiendas que la multinacional tiene pensado renovar antes del cierre de ejercicio.

“Para Mango las tiendas físicas son y seguirán siendo esenciales porque son un punto de contacto privilegiado con nuestros clientes”, nos explica Toni Ruiz, consejero delegado de Mango, a través de unas declaraciones difundidas desde la propia multinacional española. “El rol de la tienda está evolucionando y entendemos que habrá tiendas con mucho tráfico”, como “las que tenemos en el Paseo de Gracia”, que “tendrán un papel más enfocado a la inspiración y a la experiencia”. No obstante, “todas nuestras tiendas seguirán siendo imprescindibles para expresar el ADN de nuestra marca”, añade Ruiz, “así como para poder presentar de la mejor manera nuestra oferta comercial y para mantener y potenciar el contacto con los cientos de millones de clientes que nos visitan cada año en nuestras tiendas”.

Paseo de Gracia número 36, la primera flagship de Mango en España en adoptar su nueva imagen “mediterránea”

En lo concerniente ya a la renovada flagship de Mango que vuelve abrir sus puertas en el número 36 del barcelonés Paseo de Gracia, uno de los principales ejes comerciales de la Ciudad Condal, se trata como ya indicábamos del primer establecimiento de la cadena en España en el que se exhibirá la renovada imagen “mediterránea” de la cadena. Un proceso de reforma y de adaptación al que la compañía a destinado la friolera de 1,8 millones de euros.

Con una superficie comercial de 1.500 metros cuadrados, distribuidos en dos plantas, la flagship servirá para dar cabida tanto a las colecciones de la línea Woman como de la línea Man de Mango. Propuestas a las que brindará de una nueva atmósfera mediterránea, en línea con los valores que defienden como propios desde Mango. Unos principios que, más allá de marcar tanto su filosofía como la de sus colecciones y la de sus nuevas líneas de productos, veremos así a través de medidas dirigidas a mejorar en clave sostenible, y por ende mediterránea, la experiencia de compra de sus clientes “offline”. Quienes se encontrarán rodeados de un espacio al que se le han incorporado desde un mobiliario hecho con materiales sostenibles, hasta pinturas orgánicas o un sistema de iluminación y climatización ecoeficientes que permiten reducir el consumo eléctrico en más de un 30 por ciento.

Una serie de mejores que constituyen la base de este nuevo modelo de tienda que la cadena tiene pensado implementar sobre gran parte de su red global, al tiempo que igualmente introduce mejores, presentes del mismo modo en esta flagship de Gracia, como las de colocar contenedores “Committed” en los que depositar prendas y calzados destinados a la reutilización y el reciclaje; el diseño de zonas de descanso para los clientes; la exposición de obras de diferentes artistas que hagan gala de esos mismos valores de marca compartidos por Mango; la ampliación del tamaño de los probadores; la instalación dentro de los mismos de reguladores de luz y de puntos de carga de dispositivos móviles; o el montaje dentro de las zonas de probadores de espacios de pago in situ que permitirán a los clientes formalizar sus compras sin la necesidad de pasar por caja.

Una agilidad en los procesos de compra que desde Mango también potenciarán aumentando el valor de sus tiendas físicas como espacios “phygital”, habilitando una amplia zona de “click&collect” para la recogida y la devolución de pedidos online. Un valor como puntos de venta omnicanales que, como en el caso de esta nueva glagship de Gracia, se verá reforzado gracias a un espacio en el que se expondrán las colecciones de venta exclusiva a través de la página online de Mango. Y todo ello al tiempo que nuevas tecnologías como la RFID o la In Store Analytics (Deep Learning), facilitarán a los equipos de tienda datos con los que poder implementar iniciativas de mejora continuas relativas a la disponibilidad de las prendas, la distribución de las colecciones y la navegación en tienda.

“Desde el punto de vista de diseño e interiorismo, en los locales renovados predominan las tonalidades cálidas y las bases de colores neutros, que se mezclan con materiales tradicionales, artesanales, sostenibles y naturales, como la cerámica, la toba, la madera, el mármol, el esparto o el cuero”, sintetizan desde Mango en relación a la renovada imagen con la que pasarán a dotar a sus tiendas. Como resultado, “el cliente sentirá cómo el local está inspirado en la cultura popular del Mediterráneo y en los valores que caracterizan a su gente”, como “la calidez, la naturalidad, el espíritu alegre, la generosidad” o “el querer compartir momentos únicos”. Unos “aspectos que son la base del ADN de Mango”, y que se reflejarán “en cada rincón” de sus renovados establecimientos.