Playas llenas de ropa: Cómo la sobreproducción textil podría dejarnos sin vacaciones

Las playas de Ghana, Namibia, Bangladesh e India se han convertido en los destinos de grandes cantidades de ropa usada debido a la falta de infraestructura adecuada para manejar desechos textiles. Muchas de estas prendas, importadas en grandes cantidades desde países desarrollados, terminan en vertederos o se desechan de manera inadecuada.

Pero, ¿qué ocurriría si nuestras playas españolas amanecieran cada mañana cubiertas de ropa? Este es el escenario que ha planteado Ecodicta en su nueva campaña de concienciación en redes sociales, lanzada coincidiendo con la temporada vacacional.

"¿Te imaginas paseando por nuestras playas famosas rodeado de basura textil? ¿Pedir un espeto y encontrar dentro un botón de plástico, o ver restos de una chaqueta podrida en la caña?", se lee en una de las últimas publicaciones de Instagram de Ecodicta, plataforma española de intercambio de moda mediante suscripción que ayuda a los clientes a renovar su vestuario mensualmente sin acumular.

La campaña busca sensibilizar sobre la sobreproducción en la industria de la moda y cómo este exceso de producción termina convirtiéndose en desechos al otro lado del planeta. Para ello se ha valido de una herramienta de inteligencia artificial generativa, que ha permitido llenar Barceloneta, la playa de las Catedrales, la Concha y el Gulpiyuri en Asturias de residuos textiles, sin afectar a sus ecosistemas.

“Aquí en Europa, cualquier impacto en una playa provoca manifestaciones, dimisiones y mucha polémica", señala Raúl González, CEO de Ecodicta, en una conversación con FashionUnited. "Pensemos en la tragedia del Prestige o, más recientemente, en los pellets."

"Mostrar estas imágenes busca hacer tangible el impacto de la sobreproducción textil y la responsabilidad de consumidores y empresas. La contaminación por residuos textiles no solo afecta a los países receptores, sino que también tiene repercusiones globales, como la presencia de microplásticos en el mar y su eventual retorno a través de la cadena alimentaria", explica.

La campaña concluye con un llamado a la acción: "¿Cómo podemos actuar? Comprando menos, eligiendo calidad, lo que realmente necesitamos y que tenga durabilidad".