Justin Bieber rechaza su colaboración con H&M: “No he aprobado nada” y “es basura”

Protagonizando la enésima polémica que enfrenta a un personaje conocido con una firma de moda, y en lo que no deja de resultar el último de los complicados episodios a los que está debiendo de saber hacer frente la multinacional de la moda sueca, el cantante canadiense Justin Bieber ha salido públicamente a censurar la última colección lanzada por H&M y, en principio, desarrollada en colaboración y con la autorización del propio autor de temas tan populares entre distintas generaciones como “Love me” (2009), “Baby” (2010) o “Sorry” (2015).

En lo que se prometía ser de este modo como el último capítulo de la estrecha relación que venían manteniendo a lo largo de todos estos últimos años el cantautor y ganador de dos premios Grammy y la popular cadena de moda sueca, desde H&M habían iniciado ya el lanzamiento y la comercialización de los primeros artículos de una nueva colección cápsula dedicada a la figura del cantante y compositor canadiense. Una propuesta que llegaba para tomar el testigo de aquellas colecciones cápsula de “The Purpose Tour” y “Bieber Stadium Tour” que desde H&M, en colaboración con el cantante, lanzaban entre 2016 y 2017 asentando de aquel modo, y con notable éxito, su relación con el cantante, integrada en esta ocasión tanto por prendas de moda como por toda una serie complementos, piezas todas ellas ilustradas con motivos extraídos del imaginario creativo del cantante y con distintas fotografías con la imagen del propio Bieber. Unos artículos que no han debido de terminar causando una grata impresión en el cantante, quien no ha dudado a la hora de salir públicamente, ya no solo a censurar el valor de las propias piezas, sino a denunciar el que estas habrían terminado diseñándose y viendo la luz sin su consentimiento.

“No he aprobado nada de la colección de piezas de merchandising que han puesto a la venta en H&M”, manifestaba el propio Bieber a través de unas historias publicadas en su cuenta oficial en Instagram, plataforma en la que cuenta con más de 270 millones de seguidores, y desde la que ha terminado dando un duro golpe a la imagen y a la reputación de H&M. “Todo se ha hecho sin mi permiso y aprobación”, continuaba en su incendiada ofensiva contra la cadena de moda sueca el cantante canadiense, quien terminaba sus declaraciones apuntando a que “yo no lo compraría si fuera tú” y tildando de “basura” las piezas de la colección cápsula: “el merch de H&M que han hecho de mi es basura y no lo he aprobado. No lo compres”.

H&M se defiende, pero retira la colección “por respeto”

Mientras tanto, y en respuesta a las declaraciones públicas de Bieber, vía Stories a través de Instagram, desde H&M han decido responder a la polémica, de un lado defendiendo la validez y las garantías de los procedimientos que se han seguido para la aprobación de esta cápsula, una colección que, sostienen, se ha confeccionado atendiendo a los cauces habituales que se siguen para la elaboración de colecciones con licencia de esta misma naturaleza, y de otro decidiendo la retirada de todas las piezas de la colección. Una acción que han acordado llevar a cabo, defienden, “por respeto” al propio artista.

“Al igual que con el resto de productos y colaboraciones bajo licencia, H&M ha seguido los procedimientos de aprobación correspondientes”, manifestaba un portavoz de la multinacional sueca a través de un comunicado remitido a la agencia de noticas AFP. No obstante, añadían desde H&M, “por respeto a la colaboración y a Justin Bieber hemos retirado la ropa de nuestras tiendas y del canal online”, añaden desde la cadena, en relación a unas piezas que la multinacional había puesto a la venta tanto en los Estados Unidos como en una amplia selección del resto de mercados en los que opera, y entre las que se podían encontrar desde camisetas ilustradas con fotografías del cantante y letras de algunas de sus canciones, hasta fundas para el móvil o una tote gab.

“La puntilla” a un difícil ejercicio

La polémica de la crítica abierta por parte de Bieber a la cadena, así como de la consecuente retirada ahora de las piezas de esta cápsula, por otro lado todo hacía indicar que de un carácter secundario dentro de la oferta en moda de H&M, viene a poner la puntilla a un ejercicio que está resultando especialmente complicado para la multinacional de la moda sueca. Compañía que tras completar su salida de Rusia y Bielorrusia con el cierre, efectivo, de su última tienda el pasado 30 de noviembre, y mientras trata de hacer frente a distintas demandas por “greenwashing” en los Estados Unidos, anunciaba casualmente el mismo día 30 de noviembre un recorte en sus filas de 1.500 puestos de trabajo. Una medida que, defiende desde su dirección, se muestra como esencial a medida de seguir adelante en la implementación del plan estratégico de optimización de recursos y ajuste de costes que anunciaban a finales del pasado mes de septiembre.

Como resultado de esta implementación, la dirección del Grupo H&M aspira lograr generar un ahorro anual sobre sus gastos operativos de unos 2.000 millones de coronas suecas. Un ajuste que esperan que comience a hacerse visible, tras los costes de 800 millones de coronas suecas que van a necesitar para su puesta en marcha, sobre los balances de la compañía a lo largo de la segunda mitad del próximo ejercicio de 2023. Un nuevo año al que desde el Grupo H&M están empezando ya a tratar de hacer frente, tras cerrar el pasado 30 de noviembre su último ejercicio fiscal de 2022 todavía por detrás de sus valores prepandemia, con unas ventas que solamente lograron ascender, según sus cifras provisionales, hasta los 223.571 millones de coronas suecas, un -3,95 por ciento por detrás de los 232.755 millones de coronas suecas que llegó a facturar durante todo el ejercicio completo de 2019.