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El Mercado de Diseño, lanzadera para marcas de moda emergentes

Por Sandra Bódalo Munuera

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Moda

A pesar de que cada vez son más mayoritarios y frecuentes, los mercados y las pop up stores siguen siendo una alternativa interesante para marcas de moda emergentes que todavía no disponen de un punto de venta físico. Suponen una inversión menor de capital y son una buena herramienta de difusión y posicionamiento. En Madrid, una de los más veteranos es el Mercado de Diseño y este fin de semana ha celebrado su vigésimo segunda edición en su emplazamiento habitual, el centro de creación contemporáneo Matadero, con más de 20.000 visitantes.

Desde su nacimiento en octubre de 2013, esta feria de diseño y creación de vanguardia funciona a modo de escaparate para que “jóvenes talentos expongan y vendan sus propuestas de moda, complementos, decoración, ilustración…”, explica Rocío Álvarez, Directora de Comunicación de la plataforma. De esta manera, desde la organización pretenden ayudar a que las jóvenes firmas consigan “visibilidad, comunicación, cierto prestigio en el sector y contacto con tiendas, distribuidores y cliente final”, afirma. En esta ocasión, el leitmotiv ha sido la sostenibilidad y su consecuente concienciación. Más de cincuenta marcas de moda y complementos que apoyan el consumo sostenible, la producción local o nacional y la responsabilidad social.

¿Cuál es el mejor canal de venta?

Si echamos la vista atrás, el sector del retail y, concretamente de la moda, ha vivido un cambio radical. El canal de distribución ha variado, así como la relación con el consumidor, la logística o el diseño de merchandising. La venta electrónica, por ejemplo, proporciona una mayor comodidad al usuario y facilita la entrada a mercados extranjeros. Mientras que esta clase de mercados “son una plataforma muy interesante, ya que cuando arrancas un proyecto de presupuesto pequeño, no tienes el pulmón económico para abrir una tienda propia”, apunta Marina Urbina, diseñadora y cofundadora de Cabo Lupita.

Muchas de estas firmas que empiezan, solo disponen de una tienda online y estas superficies sirven de punto encuentro entre productos, diseñadores y consumidores. “Agradecemos conocer a nuestros clientes. Desde la eshop, no vemos la aceptación del producto ni conocemos las necesidades de nuestro compradores. En la pasada edición de febrero, nos pidieron un bolso de mayor tamaño y por eso creamos el modelo ‘Dana’ que mide un poquito más”, comenta Arturo Gutiérrez de la Cámara, creador de DLC Wood Projects. Por su parte, Israel Cascón, codiseñador de Hosoi añade que únicamente tienen su tienda online, “por lo que siempre está bien contar con un punto físico donde poder contactar con el cliente, que puedan ver y tocar la ropa, conocer la marca…”.

Con un precio fijo de 255 a 295 euros el stand, algunas de estas marcas ven que estas tiendas efímeras son más lucrativas que un establecimiento multimarca, por ejemplo. Diseñadores como Miriam Navarro, directora de la firma de bolsos de piel Olivia & Tom, recurre al Mercado de Diseño debido a malas experiencias con los puntos de venta tradicional. “Hemos dejado de estar presentes en algunas tiendas porque nos obligaban a dejar el producto en depósito”, dice Miriam. La venta en depósito implica “dejar tus piezas en la tienda y hasta que no las venden no te pagan, además de quedarse con un margen”. Tal como explican desde Cabo Lupita, “en las tiendas multimarca siempre se llevan una comisión, que puede ser desde un 20 por ciento a un 50 por ciento, mientras que aquí es un precio fijo que lo amortizas si van bien las ventas”. Además, las sinergias que pueden surgir entre diseñadores y el tipo de público que acude a esta clase de mercados es más afín a su filosofía de marca, ya que valoran la calidad, la artesanía y la sostenibilidad frente en comparación con las grandes superficies textiles.

Foto Créditos: Mercado de Diseño, Cabo Lupita.


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