El futuro luce muy prometedor para los estudiantes de moda en LATAM
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CDMX - Las carreras de moda solían verse como una de esas utopías artísticas, en donde muy pocos lograban acaparar las miradas, y muchos otros padecían de falta de oportunidades laborales para triunfar en el arte del vestido. Sin embargo, la moda se ha convertido en una de las industrias más prometedoras para quienes quieren apostar por ella, abriendo cada vez más trabajos para satisfacer a un mercado que está en constante evolución, ávido de ideas novedosas, y presentando otras ramificaciones de lo que significa ser parte del mundo de la moda. Es precisamente en estas nuevas ramificaciones, en la siguiente etapa de la moda, en donde los estudiantes actuales pueden ver brillar su futuro laboral.
“Creo que la apertura de los mercados, la globalización y las nuevas tecnologías, han significado un incremento en las posibilidades en las que los estudiantes [de moda] pueden colocarse”, menciona en entrevista para FashionUnited Francisco Saldaña, Director de Licenciaturas de la Universidad Jannette Klein, considerada una de las mejores universidades dedicadas a la moda en México. El experto explica que anteriormente no existían muchas de las marcas y empresas relacionadas a la moda que hay hoy en día, como las tiendas en línea o las tiendas de saldos por internet, lo cual abre posibilidades para los estudiantes que se interesan también en el mundo digital y que pueden aplicar sus conocimientos en nuevas plataformas.
Por otro lado, cada vez más marcas internacionales se instalan en países latinoamericanos, lo cual abre otro tipo de opciones. “La cantidad de marcas que llegan requieren de identidad dentro del mercado local, por lo que necesitan personas que conozcan el mercado nacional. Es necesario integrar una marca con la identidad de otro país para hacerla accesible al mercado nacional, por muy globalizados que estemos”, agrega Saldaña.
De acuerdo con un estudio por McKinsey&Company el tamaño global del negocio de la ropa se espera que crezca a doble dígito entre 2014 y 2020, y este crecimiento se le atribuye en gran parte a los mercados en desarrollo. Incluso, acentúa que los mercados emergentes de Asia y de Sudamérica actualmente conforman un tercio de las ganancias globales en ropa para mujeres, y se estima que en los próximos 20 años este porcentaje se convierta en más de la mitad.
Una industria en crecimiento con las puertas abiertas
“Yo creo que el mercado laboral ha crecido y va a seguir creciendo todavía más”, dice Saldaña con mucho optimismo en entrevista. El hecho es que el mercado laboral no sólo ha crecido, sino que también ha cambiado, ha evolucionado y con las nuevas oportunidades también se encuentran nuevos retos. Uno de los principales es que los estudiantes deben entender el lenguaje actual de la moda, para que lo puedan manejar y presentar propuestas exitosas.
El reto no se limita a México, el resto de América Latina se encuentra en el proceso de ampliar la visión que se tenía de la moda en estos países. En entrevista para FashionUnited, Yeanethe Solís, Coordinadora de Programas Educativos de la Universidad Chio Lecca en Perú, expresa que “debido al crecimiento y globalización del sector, éste indudablemente ha cambiado. También la tecnología ha sido un factor clave para que la información y tendencias permitan desarrollar nuevos canales de comunicación y el diseñador sea más rápido, práctico y objetivo al lanzar colecciones y productos de moda”.
El uso de la tecnología es tanto una oportunidad, como un reto, para los estudiantes y para la industria en general. La clave se encuentra en cómo vincularla a la vida laboral. “La tecnología no es solo un distractor sino una herramienta básica para ser más competitivos a nivel global”, acentúa Francisco Saldaña. Una de las principales oportunidades que se abren a raíz de la tecnología es el e-commerce tanto en áreas de diseño como de compras, ventas, marketing y publicidad relacionada a la moda. Especialmente en América Latina, este tipo de plataformas se encuentran emergiendo y quienes aprovechen esta apertura con una visión de negocio podrán abrirse camino en una zona antes inexistente.
De acuerdo con datos de Statista, en 2019 se espera que 155.5 millones de personas en América Latina compren bienes y servicios en línea, a diferencia de los 126.8 millones que habían en 2016. Aunque el mercado del e-commerce en la región podría parecer pequeño en comparación con otras, como Asia, los datos demuestran que es una región que está en muy rápido crecimiento. En particular, se prevé que las compras de retail por e-commerce en Latinoamérica crezcan de 49 mil 800 millones de dólares en 2016, a 79 mil 700 millones de dólares para 2019.
“[Las oportunidades laborales] son muy amplias porque estamos viviendo una industria en crecimiento en nuestro país”, exalta el director de licenciaturas de Jannette Klein. “Es muy interesante porque si bien la parte de la manufactura y de la producción es y ha sido muy importante en México, ya que somos un país en donde la maquila es una parte muy importante que requiere de muchos egresados, también llevamos ya mucho tiempo en el que las marcas nacionales se han dado cuenta de la importancia de integrar diseñadores y de tener propuestas originales, de comprender al mercado local y no solamente de ofrecer copias de otras marcas internacionales. Entonces es ahí donde se están posicionando los egresados”, agregó.
Un punto clave en el que tanto Francisco Saldaña como Yeanethe Solís coinciden es en que la moda es más que el diseño, y en la actualidad se están ofreciendo muchas oportunidades en posiciones que complementan al mismo, que requieren el conocimiento, pero que aportan algo distinto. Ya sea en el ámbito digital o físico, el hecho de que los países latinos estén creando propuestas nuevas y de que distintas marcas globales abran tiendas o espacios en departamentales en países de América Latina crea oportunidades en áreas de comunicación, marketing, ventas, compras, visual merchandising, personal shopping, fashion styling, o asesoría de imagen. Muchos de ellos puestos, relativamente nuevos, requieren un conocimiento profundo de la industria de la moda y de las características que tiene el usuario y el consumidor de moda.
Es importante recalcar que las oportunidades que hoy en día se están abriendo no prometen ser algo pasajero, al contrario. De acuerdo con BMI Research, el mercado de la moda en América Latina tenía un valor en 2016 de más de 160 mil millones de dólares, pero de acuerdo con el comportamiento de cuánto se gasta tanto en ropa como en calzado en la región, la tasa de crecimiento anual entre 2017 y 2021 se estima en 7.2 por ciento, llegando así a más de 220 mil millones de dólares.
El cambio viene desde la visión
El mundo de la moda ha cambiado, la industria se encuentra en una época en la que su evolución es constante y requiere que los estudiantes la miren con nuevos ojos, abriéndose a las nuevas oportunidades que ofrece. Francisco Saldaña explica en entrevista que en ocasiones hay una desconexión entre el estudiante y lo que la industria en realidad requiere: “evidentemente lo que el estudiante de moda desea es vivir entre reflectores y desfiles y modelos y revistas, que si bien es una parte del trabajo, no lo es todo”. La Coordinadora de Programas Educativos, de la universidad Chio Lecca coincide en que una de las principales expectativas de los estudiantes es poder desarrollar y dar a conocer su talento a través de conceptos de colecciones y productos de moda.
No obstante, es importante hoy en día cerrar la brecha entre la parte atractiva, glamorosa y creativa de la carrera, con la visión de que tenga una función económica, productiva y que genere empleos. La industria, aunque es en esencia creativa, exige que en la actualidad se tomen en cuenta más factores para poder brillar en los mercados, y la integración de los mismos se da desde la visión que se tiene acerca de la moda. Dichos factores a considerar, tanto si se busca emprender un negocio nuevo, como integrarse a una marca consolidada, incluyen la satisfacción del consumidor, ser competitivos nacional y globalmente, y tener la capacidad de trabajar de la mano con otras disciplinas. La moda se ha vuelto una industria multidisciplinaria, que si bien eso abre oportunidades para más empleos, también requiere que todos los integrantes de la misma puedan hablar un mismo lenguaje y trabajar en conjunto.
“Todo esto va cambiando de manera muy positiva la percepción del estudiante, quien va viendo que, si bien la moda es divertida y bastante atractiva, sí requiere de una disciplina importante y de conocimientos interdisciplinarios. Pero sobre todo es una carrera que no tiene nada de frivolidad, al contrario, es muy seria porque de ella depende mucha gente que está trabajando y obtiene ingresos. Es una industria que mueve muchísimo dinero a nivel mundial”, comenta Saldaña.
El paso hacia el mundo laboral
Yeanethe Solís cuenta a FashionUnited que los jóvenes en América Latina están dirigidos a nuevas generaciones de consumo, tanto en tema de producto como de comportamiento, por lo que es importante que antes de adentrarse en el mundo laboral conozcan a detalle sus insights, qué buscan y qué necesidades deben satisfacer. Además, acentúa en que es relevante comparar datos, analizar a la competencia y presentar una innovación constante porque las generaciones actuales se mueven tan rápido como la moda.
La experta considera que las oportunidades que se encuentran ahora son similares a las que se hallaban hace unos años, sólo que se han vuelto más específicas y variadas, lo que exige que los estudiantes comiencen a tener contacto con la industria incluso dentro de sus años de escuela para poder desarrollar y complementar su experiencia. Al respecto, Francisco coincide en que es importante que conforme están estudiando vayan buscando qué áreas les van interesando y complementarlas con cursos o talleres para profundizar más y ser más competitivos en una industria en la que se valora mucho la especialización.
Fotos: Chio Lecca y Jannette Klein