Dior ahonda en la frontera de lo virtual y de lo físico con una colección junto al artista Kenny Scharf
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Madrid – La firma Dior, una de las principales casas de moda del Grupo francés especializado en la comercialización de bienes y artículos de lujo LVMH, presentaba en el día de ayer la última colección de su línea masculina para la próxima temporada Otoño/Invierno de 2021/2022. Una propuesta para la que el director creativo de las colecciones “men” de la Maison, el británico Kim Jones, apostaba por fusionar los conceptos vinculados a la tradición que atesora la firma, junto a la innovación digital que acompaña a los nuevos tiempos. Generando como consecuencia un desfile en el que se trataba de ahondar en el espacio en el que se encuentran los mundos de lo virtual y de lo físico, y para el que, como consecuencia de la actual pandemia por coronavirus, se decidía prescindir de la presencia de público en directo apostando en su contra con una visualización del desfile a través del canal online y de las distintas cuentas y perfiles de la firma en las principales redes sociales.
“Mostrando una conversación entre la herencia y la tecnología, investigando en el espacio donde se encuentran la realidad con lo virtual”, el director artístico de Dior, Kim Jones, “fusiona los conceptos de tradición y la innovación digital”, llevando estos mismos principios tanto al propio desfile, “puramente virtual, con la intención de poder ser experimentado de manera global”, como “también a los propios diseños”. Una actuación con la que se “refleja la evolución de una casa de costuras hasta el siglo XXI”, remarcan desde la propia Dior a través de un comunicado, demostrando la capacidad del diseñador por “sincronizar las realidades de hoy, con los sueños de la historia y las optimistas posibilidades que abre el mañana”.
“Cuando empezamos la colección, salíamos del primer confinamiento y quería aportar alegría, felicidad y esperanza”, añadía por su parte el propio Kim Jones, en declaraciones recogidas por la agencia AFP; sobre una colección que quería dotar de un toque “divertido y ligero”.
Inspirada en China y en colaboración con el artista estadounidense Kenny Scharf
Siguiendo con la misma estrategia que en el pasado condujo a Jones a establecer colaboraciones con diferentes artistas contemporáneos, como el ghanés, afincado en Viena, Amoako Boafo, para esta colección el creativo ha sellado una nueva colaboración artística, en esta ocasión con el artista americano Kenny Scharf. Cuyas reconocidas ilustraciones y motivos, con claras influencias en la cultura pop y en la ciencia ficción, han terminado trasladándose en forma de estampados y bordados a esta colección Dior Men para la temporada Otoño/Invierno 2021/2022, que mira directamente a China, con guiños como las ilustraciones que representan las figuras del zodiaco chino.
Entre las prendas más destacadas de la colección, llaman así poderosamente la atención las piezas de sastrería, una de las señas de identidad de la Maison, dotadas en esta ocasión de una nueva silueta mucho más holgada y fluida, que se repite en abrigos y chaquetas. Piezas que encontraremos tanto libres sobre el cuerpo como ceñidas en la cintura, en una clara referencia y homenaje que el diseñador ofrece al icónico traje “Bar” que diseñase el fundador de la Maison, Christian Dior, como máximo exponente de ese “New Look” con el que revolucionó la moda a finales de la década de los 40 del siglo pasado. Un “savoir faire” que para esta colección se conjuga con una clara inspiración en la cultura y la artesanía chinas, que la firma enfatiza adoptando técnicas y materiales que traduce al inconfundible lenguaje de la casa de modas francesa. Todo ello a través de un colección que se completa con las piezas de joyería moderna de Yoon Ahn, diseñadora coreana-estadounidense responsable de la línea de joyería de Dior, que recurre en esta ocasión a materiales como el Lapislázuli y el Jade, mientras que otros elementos propios de las culturas orientales, como las flores de crisantemo, se trasladan a la colección de la mano de la casa Lemarié en forma ramilletes.
“Me encanta el contraste de colores”, entre “amarillo y violeta, naranja y azul, rojo y verde”, explicaba el propio Kenny Scharf. “Cuando cogemos los opuestos, alegría y tristeza, y los ponemos juntos, se crea esa tensión y la efervescencia que tanto adoro”.
Photo Credits: Cortesía de Dior.