Buff lanza una colección de mascarillas solidarias y donará beneficios a favor de Unicef

Madrid – La compañía española Buff, especializada en el diseño y la producción de prendas y complementos deportivos y de lifestyle, acaba de sellar una alianza en favor de Unicef España. Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, a cuyos proyectos sociales dirigidos a la lucha contra el impacto del coronavirus entre la población infantil destinará el 2 por ciento de todos sus beneficios globales de este 2020. Entre ellos, los obtenidos a través de la venta de la nueva colección de mascarillas sostenibles que la firma acaba de poner a la venta.

De manera especial, los fondos se destinarán de manera prioritaria a tres proyectos impulsados por Unicef. El primero de ellos, con una vocación plenamente global, se está llevando a cabo en cerca de 190 países y tiene como finalidad aportar a familias, cuidadores y profesores recursos e información sobre el coronavirus que garanticen la protección de los niños frente al virus, así como que puedan continuar con su desarrollo educativo. Mientras que de manera paralela se apoyarán las labores de Unicef en Senegal y Siria, país donde los efectos del coronavirus se suman a los estragos de la prolongada guerra. En el caso de Senegal, las labores de Unicef irán encaminadas a asegurar el acceso de la población a agua potable y a unos servicios sanitarios y condiciones de secamiento que permitan mejorar la higiene y disminuir la posible propagación del virus. Mientras que en Siria los trabajos de la organización se enfocarán a proporcionar agua, a la distribución de cientos de miles de pastillas de jabón y a una campaña informativa sobre la prevención del coronavirus.

“De una forma u otra, todos nosotros sufrimos los efectos de la COVID-19 en nuestras vidas”, apuntan desde la propia Buff a través de un comunicado, “pero las consecuencias son especialmente graves para los niños y niñas más vulnerables”. “Es por esta razón que Buff donará el 2 por ciento de sus beneficios globales de 2020 a favor de Unicef España, colaborando así con proyectos que desarrolla la organización” y “que proporcionan ayuda vital donde más se necesita”.

“Decididos a contribuir en la mejora de la situación global actual, nuestra primera iniciativa fue el desarrollo de nuestra propia mascarilla de filtro, Buff Filter Mark. Pero pronto nos dimos cuenta de que queríamos contribuir mucho más”, indica David Camps, director ejecutivo de Buff. “Rápidamente”, destaca, “tomamos la decisión de ampliar nuestra cooperación habitual con Unicef e identificamos algunas áreas específicas en las que los recursos y las medidas de ayuda para los niños son más necesarias que nunca”.

“Hemos conseguido llevar a cabo esta colaboración en una coyuntura compleja como la que estamos viviendo”, apunta por su parte Jaume Lanaspa, presidente del Comité de Cataluña de Unicef. “Acuerdos como estos estimulan la esperanza de querer avanzar a pesar de las dificultades, ayudando a la infancia que más está sufriendo, la que está en situación de mayor vulnerabilidad.

Mascarillas solidarias, antibacterianas y sostenibles

Como catalizadora de esta iniciativa solidaria, nos encontramos precisamente con la nueva “Buff Filter Mask”. Un modelo de mascarilla disponible tanto para un público adulto como infantil, reutilizable y con un sistema de filtros reemplazables con una eficacia de filtración bacteriana del 98 por ciento, en el que no se compromete la respirabilidad. Unidades que encontraremos ya disponibles en la página online de Buff, con un precio de venta único de 24,95 euros en el caso de las mascarillas de adulto e infantil, y a 15 euros los packs con 30 filtros. Precios que podrán variar en función de la moneda local de los distintos mercados en los que la compañía distribuye sus productos.

Entrando en los detalles de esta nueva “Buff Filter Mask”, la mascarilla se encuentra disponible en distintos y originales modelos, y cuenta con un diseño ergonómico que incluye dos tiras ajustables que se sitúan alrededor de la cabeza, con lo que se logra disminuir la presión detrás de las orejas haciendo de ellas una “alternativa más cómoda para las nuevas necesidades de la vida diaria” y “logrando que las personas no noten que la llevan puesta”, aseguran desde Buff.

Para su fabricación, que se ha llevado a cabo en Igualada, provincia de Barcelona y sede de la marca, se ha recurrido a tela “CoolNet UV+” fabricada en un 95 por ciento en poliéster reciclado; lo que además las convierte en una alternativa altamente sostenible. Mientras que en cuanto al sistema de filtrado, como señalábamos es reemplazable y ha sido desarrollado por los especialistas finlandeses de la compañía Ahlstrom-Munksjö, que garantiza en un 98 por ciento la eficiencia de su filtración bacteriana.

“Este filtro, cumple con el estándar para mascarillas quirúrgicas (UNE EN 14683) de eficiencia de filtración bacteriana y presión diferencial, por lo que garantiza una mayor respirabilidad”, aseguran desde Buff. “Además”, subrayan, “la tecnología HeiQ ViroBlock”, un tratamiento antibacteriano que se le ha aplicado a la tela del bolsillo interior de la mascarilla, “la protege de los microbios y los gérmenes, al tiempo que ayuda a controlar los olores”. Situándose la residencia de este tratamiento en una duración de hasta diez lavados a 60 grados.

Photo Credits: Cortesía de Buff.