Twitter e Instagram bloquean a Kanye West mientras Adidas pone “en revisión” su acuerdo
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A lo largo de un comunicado emitido por la propia compañía alemana, y del que se hacían eco a finales de la pasada semana distintos medios como la cadena de noticias estadounidense CNBC, la multinacional deportiva anunciaba su decisión de poner “en revisión” en acuerdo y las relaciones que mantienen a día de hoy con el controvertido rapero y compositor norteamericano Ye, el artista anteriormente conocido como Kanye West. Una acción que respondería a los últimos enfrentamientos que el propio artista ha mantenido con miembros de la junta directiva de Adidas, en lo que no obstante podría ser simplemente la excusa empleada por Ye para, primero seguir ganando notoriedad ante el público, y segundo conseguir lograr cortar los lazos que lo mantienen unido, tanto a él como a su marca Yeezy, con diferentes grupos internacionales, a través de unos acuerdos de explotación y licencias que se habría puesto por objetivo romper, de cara a lograr así avanzar en su trayectoria en solitario dentro del mundo de la moda. Una acción con la que además respondería a las veladas intenciones que el propio artista, tal y como recogíamos desde FashionUnited España, avanzaba ya a finales de julio de 2020, momento en el que abiertamente apuntaba a que rompería sus lazos con Gap y con Adidas en el caso de no ver correspondida su contribución hacia ambas compañías con un puesto en sus respectivas juntas directivas.
Cansado de lo que, a su entender, serían unas relaciones desiguales que estaban resultando especialmente ventajosas para sus socios comerciales, West, a través de su abogado Nicholas Gravante, anunciaba a mediados del pasado mes de septiembre su decisión de romper de manera unilateral la sociedad que mantenía con el Grupo Gap por un “incumplimiento sustancial” de los términos de un acuerdo que había logrado, a través de la marca Yeezy y, de la mano de esta, de Balenciaga, revalorizar el valor de la marca Gap. Un hecho que se hacía notar con la sustancial caída de los títulos de la multinacional de la moda que se producía tras la confirmación del fin de sus relaciones con el cantante y compositor, y a pesar de las palabras que Mark Breitbard, nuevo director ejecutivo de Gap, dirigía a sus empleados a través de una misiva, palabras desde las que señalaba que había sido decisión de la dirección de la multinacional el “terminar la asociación” con West, al tener ambas partes maneras enfrentadas y no alineadas de abordar los objetivos que se habían mantenido como fuente mismas de su asociación.
Sobre estos antecedentes, y después de que el propio artista a mediados de junio ya acusase a la multinacional deportiva de plagiar algunos de los diseños de su marca Yeezy, en concreto sus sandalias Yeezy Slides, el nuevo paso del rapero habría sido el de tratar de romper su asociación con Adidas. Un acuerdo que mantienen de manera formal desde el mes de junio de 2016 a través de la marca Yeezy de West, impulsado sobre el gran éxito que lograron alcanzar con la primera colaboración que realizaban bajo el paraguas de la primera colección de la firma Yeezy, presentando su primer diseño colaborativo, las “Yeezy Boost 750”. Un modelo al que seguía el modelado y el lanzamiento de unas “Yeezy Boost 350” con las que lograban, además de un tremendo éxito de ventas, un premio Footwear News como el Zapato del año 2015. Logros sobre los que se decidían ya en aquel junio de 2016 a seguir avanzando como socios a largo plazo, en un acuerdo que se anunciaba entonces como el “más importante jamás creado” entre una marca deportiva y un personaje ajeno al mundo del deporte, y que West, a la vista de sus últimas acciones, se habrían marcada como objetivo dinamitar de cara a acelerar en sus planes de emprender nuevas aventuras en el mundo de la moda, en lo que ahora no han encontrado más remedio que el de darle satisfacción desde Adidas.
“Después de repetidos esfuerzos por tratar de resolver la situación en privado, hemos tomado la decisión de poner en revisión la asociación” con Ye, anunciaban a través de un comunicado desde Adidas. No obstante, “continuaremos cogestionando el producto actual durante este periodo”, tras el cual parece que terminará por resolverse los lazos que mantenían unidos al cantante con la multinacional deportiva. Compañía que por su parte es de esperar que trata de seguir afianzándose en el sector “premium” a través de nuevas asociaciones como las que ha venido manteniendo con casas de la talla de Gucci y Balenciaga, pero que con esta acción viene a desdecirse de las palabras que el propio Kasper Rorsted, director ejecutivo, en funciones, de la multinacional deportiva, ofrecía a la CNBC el pasado agosto en un intento por frenar el escándalo que aviva Ye con sus acusaciones públicas de plagio.
“Kanye es nuestro socio más importante a nivel mundial”, y “tenemos una muy, muy buena relación con él”, aseguraba entonces el director ejecutivo de Adidas. “Nos comunicamos con él de forma permanente” y “estamos muy orgullosos de esta relación”, que, para el mismo Rorsted, “ha tenido un impacto tremendo a nivel mundial para nosotros”.
Bloqueado por Meta y Twitter
Convertido, al menos de puertas hacia afuera, en un personaje que parece totalmente descontrolado y fuera de sí mismo, desde que se encargase de abrir el desfile de Balenciaga durante esta última edición de la Semana de la Moda de París, lo cierto es que el polifacético creativo, rapero, compositor y diseñador de moda, no ha cesado de acaparar titular tras titular en las principales cabeceras internacionales, en una suma de noticias que dibujan el perfil de un personaje difícil de catalogar, sobre el que siguen presentándose las dudas sobre si no son estos unos intentos por seguir acaparando la atención, o de una índole mucho más seria.
En esta línea, y como última actualización, después de unas semanas en las que el rapero había incluso atacado a Bernard Arnault, director ejecutivo del holding internacional francés LVMH, con una suma de declaraciones relacionadas con el fallecimiento de Virgil Abloh, hasta su deceso director creativo de las colecciones masculinas de Louis Vuitton, y levantado ampollas con el diseño de su camiseta con el lema “White Lives Matter”, este 8 de octubre Ye hacía públicos unos extractos de una conversación privada que había mantenido con Tremaine Emory, director creativo de Supreme. Una conversación desde la que entraban a profundizar en el enfrentamiento público que habían mantenido previamente ambos creativos en torno a la figura y el fallecimiento de Abloh, desde la que Ye se reiteraba en lo poco que le gustaban los diseños de Abloh, en los celos que llegaba a sentir por el creativo y en que, a pesar de todo, el cariño que siempre ha profesado al que sigue defendiendo como su amigo. Unas declaraciones que vertía a través de su cuenta oficial en Instagram, perfil que se mantiene con las opciones bloqueadas tal y como han llegado a reconocer desde Meta, después de que el rapero publicase una entrada con un contenido que infringía la política de contenidos de la red social. Una publicación que era borrada por un moderador de Instagram, y que, según adelantaban desde la cadena estadounidense NBC, contenía contenido antisemita.
En respuesta a este bloqueo, Ye decidía recuperar la actividad de su cuenta de Twitter, en la que no mostraba nueva actividad desde 2020, arremetiendo directamente contra le fundador y máximo accionista de Meta, Mark Zuckerberg. Ejecutivo al que directamente Ye decidió dirigirse con una fotografía del propio Ye junto a Zuckerberg acompañada del texto: “Cómo pudiste sacarme de Instagram”, “solías ser mi ‘nigga’”. Una entrada a la que siguieron otra serie de publicaciones, entre ellas de apoyo a las revueltas de las mujeres en Irán, así como otra, parece ser que nuevamente denunciada como antisemita, que ya ha sido borrada de su perfil y que ha provocado que, al igual que en Instagram, la cuenta de Ye en Twitter se mantenga restringida impidiendo al rapero seguir publicando nuevas entradas, por el momento.