Muere “Madame Butterfly”, la diseñadora japonesa Hanae Mori
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La diseñadora japonesa Hanae Mori, conocida como "Madame Butterfly" por sus característicos estampados de mariposas y su firma con un motivo alado, ha fallecido el pasado 11 de agosto a la edad de 96 años en su casa de Tokio, según los medios de comunicación japoneses.
Madame Butterfly fue una de las dos únicas mujeres japonesas que presentó sus colecciones en las pasarelas de París y Nueva York, y la primera mujer asiática en ser admitida como casa de diseño oficial de alta costura por la Fédération de la Haute Couture et de la Mode, famosa por reunir las más elaboradas colecciones de las firmas más destacadas del panorama internacional.
En una sociedad japonesa y global dominada por los hombres, Mori fue una de las pocas mujeres de su país que dirigió un negocio internacional. Y es que además de diseñar el vestuario de cientas de películas en su país, e incluso diseñar el vestido prenupcial de la actual exesposa del Emperador japonés, entre los clientes de sus lujosas creaciones hechas a mano también se encontraban Nancy Reagan, esposa del presidente estadounidense Ronald Reagan o la actriz estadounidense Grace Kelly, entre otros innumerables miembros de la alta sociedad japonesa.
De Tokio a Nueva York, París y la gran pantalla
Nacida en 1926 en la isla japonesa Honshu, se trasladó a Tokio con su familia, donde estudió literatura en literatura en la Universidad Cristiana Femenina de Tokio. Pero decidió dedicarse a la moda tras casarse con Ken Mori, un Mori, un ejecutivo de la industria textil.
Abrió su primer estudio en el barrio de Shinjuku de Tokio a los 25 años. Este estaba situado frente a un cine y un director japonés, que vio sus originales creaciones al salir de una película, le ofreció hacer el vestuario de su próxima película.
En 1965 causó furor con su primer desfile de moda en el extranjero que celebraba su encuentro con las américas bajo el lema "East Meets West" en Nueva York con el kimono y su especial gusto por la tradición como elemento diferenciador.
Posteriormente, abriría su primera boutique en la parisina Avenue Montaigne y en 1977 cumpliría el hito de convertirse en la primera diseñadora japonesa en compartir pasarela con los más destacados creativos del panorama europeo en la París Fashion Week.
“Esta mariposa pudo volar por todo el mundo durante 70 años porque yo amaba hacer ropa”
En 2004, tras su último desfile de alta costura, cerró su taller de París pero mantendría abiertas sus boutiques en Tokio y sus fragancias se siguieron vendiendo en todo el mundo.
En enero, Mori plasmó sus sentimientos sobre la industria de la moda en una columna especial para el diario japonés Yomiuri Shimbun en la que desde AFP recogen que escribió “la moda es algo que te empuja, te da coraje de extender tus alas y te permite tener aventuras", aunque en los últimos años "no todo fue positivo", “esta mariposa pudo volar por todo el mundo durante 70 años porque yo amaba hacer ropa".
A lo largo de su vida, también ha recibido numerosos premios, entre los que destacan la Orden de la Cultura de Japón, un honor japonés que también fue la primera mujer en reciibir Además, fue distinguida en Francia con el título de Officier de la Légion d'Honneur.
Este mismo mes, también tuvimos que decir adiós a otro gran diseñador japonés Issey Miyake que fallecía a sus 84 años por motivos de salud.