Estupor tras las declaraciones de Carré Otis contra Gérald Marie: “Sabía que tenía que soportar los abusos para seguir trabajando”
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A mediados de esta semana la otrora supermodelo y actriz californiana Carré Otis, ahora Carré Sutton, rostro durante los años 90 de marcas como Guess y Calvin Klein y de portadas de revistas como Elle o Vogue, protagonizaba una rueda de prensa desde París desde la que entraba a detallar los presuntos abusos que, de manera continuada, habría sufrido siendo menor de edad por parte de Gérald Marie. Expresidente de la prestigiosa agencia de modelos Elite en su división para Europa y exmarido de la legendaria y también otrora supermodelo de los años 90 Linda Evangelista, a quien públicamente Otis acusa, junto a un buen número de otras modelos, de haberse beneficiado de su posición para, presuntamente, haber violado y abusado sexualmente de un alto número de modelos.
A pesar de que la propia Otis interponía una demanda contra Marie y contra la agente de modelos Trudy Tapscott este pasado mes de julio frente a un tribunal de justicia de Nueva York, en virtud de la Ley de Víctimas Infantiles aprobada por el mismo estado el pasado enero de 2019, su intervención no respondía a estas actuaciones, sino a la investigación por presuntos delitos de violación que desde la Fiscalía francesa abrían contra Marie el pasado septiembre de 2020. Unas pesquisas que están dirigiendo desde una unidad especializada en protección infantil, siguiendo a las denuncias por “violación y agresión sexual, así como de violación y agresión sexual contra una menor” que habrían presentado en su contra diferentes mujeres, en relación a unos actos, presuntamente, cometidos por Marie durante los años 1980 y 1988. Un intervalo de tiempo que ahora, según adelantan desde el medio estadounidense Wwd —apuntando a declaraciones de la organización Model Alliance—, los investigadores franceses habrían ampliado, después de que varios de los casos presentados no hubieran terminado en la apertura de una causa formal por prescripción de los delitos. Motivo este por el que desde la Fiscalía habían pedido que brindaran su testimonio nuevas afectadas, pidiendo que Otis y otras cerca de al menos 11 mujeres lo hicieran públicamente, en un intento por generar conciencia sobre la causa, así como llamar a que otras posibles víctimas de Marie se decidieran a participar de las investigaciones.
Un llamamiento para que alcen su voz nuevas víctimas de abusos sexuales
De este modo, además de Otis, no dudaron en acudir hasta la capital francesa las igualmente también, presuntas, víctimas de Marie, las exmodelos profesionales Jill Dodd, Lesa Amoore, Shawna Lee, Ebba Karlsson y Emily Mott. Quienes posteriormente no dudaban de participar de una intervención conjunta ante los medios, con la que no solamente entraban a denunciar los presuntos delitos de Marie y buscaban mostrar su público apoyo al resto de las afectadas, sino de la que se valían, siguiendo las indicaciones de la Fiscalía, para lanzar un llamamiento a que otras víctimas de los supuestos abusos cometidos por el exgerente de Elite se decidan y accedan a prestar declaración, en el marco de la investigación que sigue manteniendo abierta la Fiscalía francesa. Siendo este el momento en el que Otis entraba a relatar algunos de los turbios episodios que, según su versión de los hechos, llegó a vivir al lado de Marie.
Según el testimonio que daba la exmodelo durante dicha rueda de prensa, que pudo seguirse en directo a través de la cuenta oficial en Instagram de la organización sin ánimo de lucro Modelo Alliance, y de la que se han hecho eco distintos medios como el citado WWD, el directivo de Elite ejerció contra ella su primer abuso cuando apenas había comenzado su carrera como modelo. Una etapa en la que se encontraba “completamente atrapada”, siendo, como ella misma relataba, muy joven, estando sola, no contando con dinero ni apoyos, y encontrándose en un país extranjero en el que dependía de Marie desde para la comida hasta para su alojamiento. “Sabía que tenía que soportar los abusos para poder seguir trabajando. Eso me quedó muy claro”, detallaba la exmodelo, quien confesaba que ha necesitado de muchos años para procesar estos, supuestos, abusos, y también para poder hablar de ellos.
“Cuando eres solamente un niño, realmente lo que haces es intentar sobrevivir, y normalizarlo o compartimentarlo es la respuesta clásica frente a un trauma… así que intenté desarrollar mi carrera tratando de dejar a un lado algo que fue completamente horrible y traumático para mí”, explicaba la exmodelo, quien no dudaba también en explicar como fue “vendida” desde San Francisco a Nueva York y posteriormente a Marie. A quien, en su demanda de Nueva York, la modelo acusa de haber violado repetidamente cuando tenía 17 años, a menudo en el dormitorio vacío de su hija, así como de haberla “traficado” con “otros hombres ricos de Europa”. Unos abusos a los que intentó poner fin, verbalmente, en 1986, momento en el que la “echaron para trasladarla a otro apartamento y luego el trabajo se paró”.
“El abuso es algo que está normalizado en nuestra industria y en la industria del modelaje, porque se percibe como la contraprestación que hay que pagar por haber ganado una lotería genética”, manifestaba Otis. “Muchos ven en eso el precio de la fama o incluso como un trato justo… la industria que permitió mis abusos y que permitió que los hombres pagaran por tener acceso a las mujeres, sigue siendo la misma industria hoy”, sentenciaba la modelo. “Para mí la justicia no pasa por ver a alguien tras las rejas. Hay muchos Gérald Maries dentro de esta industria”, y ahora “se trata de comenzar a ver cambios dentro de un sector que aún no está regulado en gran medida”. “Eso, para mí, es lo que se asemejaría más a hacer justicia”, y la razón que se encontraría para poner voz a este movimiento “Me Too” de la moda, que tratan de impulsar a través de diferentes acciones desde la Model Alliance. Organización desde la que mantienen abierta una iniciativa desde la que reclaman, junto a Otis, la ampliación de la ley neoyorquina de abusos a los afectados mayores de 18 años, así como la adhesión de las principales agencias de modelo a su compromiso de buenas prácticas “RESPECT Program”. Una campaña que ya contarían con el apoyo de destacadas figuras del sector, como Milla Jovovich, Karen Elson, Tatiana Patitz, Beverly Johnson, Paulina Porizkov o Karen Alexander.
Por su parte Gerarld Marie, al que los medios no dudan en señalar como el “Harvey Weinstein” de la moda, a través de unas declaraciones de su abogada, Celine Bekerman, al Daily Mail, “refuta con consternación todas estas acusaciones falsas y difamatorias”. Rechazando el por ahora ofrecer mayores declaraciones, a la espera de poder hacerlo frente a “las autoridades competentes”.