Un país en streaming: el Gobierno y Netflix firman un acuerdo para atraer turistas a España
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Madrid – El poder de influencia del que Netflix está sabiendo hacer muy bien uso a través de sus distintas producciones, es algo de sobra conocido desde hace ya largo tiempo en el ámbito de la moda y del retail. Sobre todo tras marcados ejemplos como los de destacados éxitos internacionales como los de esa “Emily in Paris”, que logró disparar las ventas de sombreros en plataformas como Asos —donde sus ventas llegaron a dispararse hasta un +48 por ciento— gracias al gusto de su protagonista por hacer uso de las habituales boinas parisinas o de los sombreros tipo “bucket”; o el de esa “Halston” con la que la plataforma de streaming ha logrado culminar una misión que se antojaba tan imposible, y en la que tantos otros habían ya fracasado, como la de resucitar e insuflar de una nueva vida a la icónica casa de modas estadounidense, y todo gracias, y solo gracias, al biopic sobre su fundador, el controvertido diseñador Roy Halston, que lanzaba a mediados del pasado mes de mayo.
Pero a medida que la plataforma ha comenzado a ser consciente de su poder de influencia entre la sociedad, gracias a ejemplos como los descritos, ha terminado decidiéndose finalmente por mostrar el mismo comportamiento del que hacen buena gala todos aquellos buenos “influencers” internacionales que se precien, véase entre los ejemplos de mayor éxito el de Chiara Ferragni: renunciar a ser meramente una comparsa de las grandes marcas y comenzar a mostrar su propio músculo empresarial, en el caso de la plataforma de streaming grabando firmemente su nombre y participando de manera activa en el lanzamientos de una amplia y variada lista de colecciones y productos. Una estrategia que desde Netflix se decidían finalmente a llevar un paso más allá, con el lanzamiento a principios de este mes de junio de su propia tienda online. Un nuevo portal del que se valdrán para comercializar distintas colecciones y productos exclusivos vinculados a algunas de sus ficciones de mayor éxito, como “Lupin”, “The Witcher” o “Stranger Things”.
Al margen de estas cuestiones más comerciales, y que no hay duda de que pueden resultar de una especial atención para todos aquellos con un mayor interés en campos como los de la mercadotecnia, el del diseño de productos o el diseño de modas, lo que subyace es la capacidad de influencia que las producciones de éxito que tienen cabida en la plataforma pueden llegar a terminar a ejerciendo entre la sociedad. Un hecho que ya no pasaba desapercibido, ni para la propia plataforma de streaming, ni para los distintos gobiernos nacionales, en este caso como el Gobierno español. Cuyo Ejecutivo, a través del ministerio de Industria, Comercio y Turismo, acaba de firmar un acuerdo con Netflix dirigido a hacer de las películas y las series filmadas en España un recurso turístico capaz de atraer turistas a nuestro país. Un público que, no hay que olvidar ni pasar por alto, juega igualmente un papel destacado como consumidores preferentes de artículos y piezas de moda a ojos de las compañías del textil, tanto nacionales como internacionales, con presencia en nuestro país.
Un acuerdo para impulsar la recuperación de un sector estratégico de la economía nacional
Con este acuerdo, formalizado a través del Instituto de Turismo de España (Turespaña) y rubricado por Reyes Maroto, ministra de Industria, Comercio y Turismo, y Ted Sarandos, codirector ejecutivo de Netflix, desde el ministerio y el Gobierno liderado por Pedro Sánchez aspiran a lograr incentivar la recuperación de la industria turística nacional. Un importante sector dentro de la economía española, que se encuentra atravesando un momento de dificultad sin precedentes como consecuencia de esta pandemia por coronavirus y de las limitaciones que siguen mostrándose a los vuelos y los viajes internacionales. Problemáticas que bien quedan reflejadas en unas aportaciones al PIB nacional que, según el “Informe de la Coyuntura Turística Española 2020” realizado por la Universidad Nebrija y la Mesa del Turismo, pasó del 12,4 por ciento del PIB en 2019 a un 5,5 por ciento del PIB durante el año 2020.
Frente a una caída que se situó así, según el informe, en los -6,9 puntos interanuales, y a la espera de comprobar de qué modo evolucionan los datos a lo largo de ese ejercicio de 2021, desde el Ejecutivo buscan ahora, valiéndose de ese mismo poder de convocatoria que han hecho de Netflix una viva competidora dentro de la industria de la moda, acelerar e impulsar la recuperación de nuestro sector turístico. Un ámbito para el que esperan captar, gracias a este acuerdo, nuevos visitantes extranjeros a los que se les intentará encandilar con los encantos de nuestras ciudades y de los distintos rincones de nuestro territorio, a través de las producciones de Netflix que se graben en España. Iniciativa con la que además, subrayan desde Industria, buscarán lograr la tan ansiada desestacionalización del sector atrayendo a nuevos nichos interesados en una oferta que vaya más allá del habitual “sol y playa” que ha venido marcando la oferta turística nacional.
De este modo, desde el Ejecutivo apuestan por avanzar hacia un turismo “de más calidad, desestacionalizado y vertebrador del territorio”, apunta Reyes Maroto, que permita añadir al “sol y playa otros productos turísticos atractivos y que sumen valor al sector”. La ministra, según destacan desde Industria a través de un comunicado oficial, “ha explicado en numerosas ocasiones la necesidad de trabajar y colaborar para diversificar la oferta turística y atraer turistas de mayor gasto que buscan experiencias únicas”, y en este sentido, indican desde el ministerio, “el turismo de rodajes puede ser un atractivo turístico con gran crecimiento en los próximos años”.
“Esta unión tiene como objetivo crear sinergias y contribuir a la recuperación del país, reforzando la marca turística España y ampliando el conocimiento de la riqueza y diversidad cultural de nuestro país”, detallan desde el ministerio. “La colaboración entre Netflix y Turespaña fortalece el vínculo entre la producción audiovisual en España y el turismo”, apuntan; a lo que Miguel Sanz, director general de Turespaña, no duda en añadir que el acuerdo responde a la estrategia del Instituto, la cual pasa por “orientar la promoción y el marketing turístico allí donde están los consumidores y a aquellas plataformas y canales que modulan la opinión de los consumidores, en nuestro caso de los viajeros”.
Una vía para exhibir ante el mundo y una audiencia global los tesoros de la geografía española
El éxito del acuerdo se confía en estos momentos a estudios, como el del “Impacto de los Servicios Internacionales de Entretenimiento en la Afinidad Cultural y el Turismo” realizado por la propia Netflix, en el que se reflejaría que el consumo por las audiencias internacional de contenido de origen español, cristaliza en un aumento del interés y de la afinidad hacia distintos elementos propios de nuestra cultura.
“Netflix permite conectar a los creadores españoles con las audiencias globales”, añaden desde Industria, al tiempo que con ello ofrece “un gran potencial para incrementar el turismo en el país”. Una acción que buscará así incentivarse a través de este acuerdo, de la mano de estrategias como ese vídeo promocional “Cómo dirías que es España sin decirlo” que Netflix acaba de lanzar a través de sus redes sociales, como parte del mismo, y a medida que a la plataforma vayan arribando nuevas producciones que tendrán como telón de fondo distintos rincones de nuestro país, entre las que ya están previstas las series “Jaguar” (Almería), “Feria” (Barcelona, Cádiz y Huelva), “Tú no eres especial” (Navarra), “Intimidad” (Bilbao) y “Bienvenidos a Edén” (Lanzarote y Barcelona); así como películas como “Fuimos Canciones” o “Las niñas de cristal” (Madrid), “La Bestia” (Teruel), “Centauro” (distintas localizaciones de Cataluña y Aragón) o “A través de mi” (Barcelona).